Por Sandra Rodríguez
Con material en mano sobre “Feminismo y la juventud” y ¿Cómo los hombres sufrimos el machismo?, un grupo de educación secundaria del instituto Santa Ana, Francisco Morazán, participó en un taller sobre equidad y género, impartido por jóvenes del COFADEH.
Los manuales escritos para jóvenes por organizaciones que se especializan en el tema, como el Centro de la Prevención de la Violencia, CEPREV, y facilitados con el apoyo del Gobierno de Finlandia, captaron la atención de los y las participantes, porque se maneja un lenguaje ameno y entendible, según la edad de los lectores.
Se inició hablando sobre el feminismo, y como se ha mal concebido su significado, debido a una mezcla de desconocimiento y descalificación, que no es nueva, pues parece que ha acompañado siempre a las luchas de las mujeres por salir de la servidumbre y lograr los mismos derechos que los varones, expresa uno de los documentos compartidos.
Por lo que se manifestó que el feminismo es un movimiento social que busca reivindicar los derechos de las mujeres.
Mientras que se analizó como el machismo afecta las relaciones desde la familia, pues la sociedad que reproduce el sistema patriarcal, prohíbe a los varones ayudar con los oficios domésticos, educación paternal y mostrar afectividad por otras personas.
En el taller, también se realizó dinámicas relacionadas con el tema, en una de ellas, se analizó que muchas veces los varones son los que gana porque utilizan las fuerzas, pero las mujeres emplean estrategias que las hacen lograr sus objetivos.
En un debate, se analizó ¿Por qué las mujeres no participan en política?, organizando tres grupos de trabajo.
Uno defendió la teoría que la mujer no participa en política porque no quiere, ya que tiene miedo, temor al rechazo, al que dirán de ella, y hasta puede llegarse a sentir insegura e incapaz de hacer cosas, que cree son de hombres, porque así se ha establecido.
Mientras que otro grupo, manifestó que la mujer no participa en política porque no la dejan, ya que el sistema patriarcal se impone a las nuevas ideas, los hombres no permiten que una mujer tenga nuevas ideas y estrategias para realizar obras de bien común.
Este grupo consideró que la mujer es mejor para gobernar, y que no debe tener miedo de incursionar en ámbitos políticos, ya que otras han demostrado ser buenas presidentas en otros países.
Un tercer grupo, era el jurado y moderador del debate.
Los jóvenes que se forman en estos talleres, son beneficiados con el proyecto, “Ampliación y Fortalecimiento de las Redes de Jóvenes Defensores y Defensoras de Derechos Humanos en seis regiones geográficas de Honduras”, que ejecuta el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH.
Y se pretende concientizar a los y las estudiantes, con el objetivo de poner fin a una de las desigualdades más universales y duraderas de la existencia.
De este modo, se puede ir implementado valores que enseñen a convivir con igualdad en la casa, en la escuela y por ende en el entorno social.
En Santa Ana, el problema de desigualdad de género es muy visible, manifestaron los y las estudiantes.
Amanda dijo que es interesante aprender sobre machismo y feminismo, y ver que no sólo el hombre tiene autoridad, sino que debe ser en conjunto.
Es importante que estos temas los repliquemos en otros cursos, pues todos y todas debemos aprender a convivir con igualdad, no sintiéndonos menos ni más que los y las demás.
Junior, dijo que muchas aptitudes machistas las enseñan en la casa, pues es el papá quien aplica la autoridad, pero como jóvenes están llamados a ser la diferencia y empezar a tomar roles igualitario, como ayudar en los quehaceres de la casa y no imponer la fuerza.
El material con el que se formará en equidad de género, fue impreso en la conmemoración de los 30 años de COFADEH, en el que su coordinadora Bertha Oliva, invita a la juventud a agradecer al fondo Finlandés, que les permite concretar esta idea en el marco del proyecto de fortalecimiento de las redes juveniles en la formación e información de derechos humanos.
“En esta edición exponemos las dificultades que enfrenta la juventud para percibir la desigualdad en las sociedades formalmente igualitarias, es decir, los mecanismos del sistema para visibilizarse y otros más explícitos, el estigma, la amenaza, y el miedo a la pérdida de la felicidad”, manifiesta la coordinadora, en la presentación de los documentos.
Jóvenes de Santa Bárbara, Siguatepeque y Juticalpa, también son capacitados en este tema, además memoria histórica, liderazgo juvenil y derechos humanos.
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