sábado, 17 de noviembre de 2012

En memoria del compañero Erick Martínez Ávila, a seis meses de su asesinato



“¿Te molesta mi amor?
Mi amor de humanidad”
Silvio Rodríguez

Se cumplen seis meses del asesinato de nuestro compañero Erick Martínez Ávila, primer candidato abiertamente gay en participar en el proceso de elecciones en la historia del país, militante de la Organización Política Los Necios (OPLN) y luchador incansable de las causas populares. 

Estamos acá con el ánimo de levantar la voz por Erick, para dejarles claro a sus asesinos que nunca podrán vencer a la vida. De su asesinato fuimos enfáticos desde un inicio y aseguramos que es responsabilidad del régimen actual y denunciamos que la presentación de chivos expiatorios puede ser suficientes para evitar que los Estados Unidos no les retiren su apoyo pero nunca será suficiente para el pueblo que hace más de tres años exige justicia. Lograremos el castigo de los culpables porque como pueblo nos acompaña la razón.

Hoy nos encontramos en estos pasillos universitarios que hace unos diez años fueron nuestra trinchera de lucha. Éramos más jóvenes entonces, pañoleta rojo y negro adornando nuestro brazo izquierdo, más ingenuos o más envalentonados quizás, pero con la certeza de que luchar por las mayorías era el camino correcto. Ese mismo camino nos ha llevado hasta el Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP) como el punto más alto de la organización popular y al Partido Libertad y Refundación LibRe como ese salto de la resistencia a la conquista del Poder.

Erick murió por ser militante, por ser gay, por ser periodista, por ser joven y por defender los derechos humanos. Esto en nuestro país está prohibido. Afortunadamente lo prohibido y lo imposible son el quehacer diario del necio y la necia que han decidido cambiar el mundo y que no nos conformamos con nada menos.

Ser afeminado, gay, lesbiana, trans o bi no son insultos, en cambio ser golpista, asesino, mediocre, traidor, homofóbico, cobarde e idiota tienen dos cosas en común: por una parte esos si son insultos y en un sentido histórico son hasta sinónimos.

Erick esto lo supo bien y por ello dio la vida. Era un socialista convencido, sabía que Socialismo No es Capitalismo. Sabía que era necesario cambiar el sistema actual, que Honduras ya no podía seguir manejada por el egoísmo y que había que dar paso a la solidaridad.

Como todos los socialistas Erick sabía que nuestra meta es superar el Estado actual, que no creemos en el libre mercado por la misma razón por la que no creemos en el imperialismo, ya que las relaciones deben respetuosas y no aplicando leyes “iguales” que sólo benefician a los más fuertes sin considerar a los más débiles. Nosotros creemos en la apertura de mercados basándonos en nuestra soberanía para decidir con quienes queremos desarrollar actividades económicas y comerciales, sin pedirle permiso a nadie, sin bloqueos y priorizando por los mercados que aunque no sean "libres" ofrezcan las mejores prebendas para el país y en especial para los pequeños productores que son los que más han sufrido los actuales Tratados de Libre Comercio (TLC).

Socialismo es respeto por las decisiones individuales y es no a la imposición de la moral de la clase económicamente dominante como si el conservadurismo acrónico debiera ser ley del Estado.

Socialismo es un Estado con la fuerza para defender a los más débiles y esto se puede hacer permitiendo el desarrollo de la empresa privada pero con reglas claras, dejando claro que lo privado nunca podrá ser más importante que lo público. Hemos visto lo que pasa cuando el Estado se vuelve un simple facilitador y pierde la potestad de tomar decisiones. Lo vemos ahora en Honduras donde las decisiones las toman los grandes empresarios y el Estado sólo se dedica a facilitar ese gobierno privado.

Socialismo no es capitalismo de carácter social que se basa en la filantropía, en apoyar a algunos pocos, en especial si eso es deducible de impuestos. Socialismo es la puesta en práctica de la solidaridad como política de Estado y como norma general de la sociedad. No se trata de quitarle a nadie sino de garantizar que todos y todas tengan algo.

Sabemos que la palabra Socialismo puede generarle miedo a más de alguno o alguna pero sólo se trata de un Estado que deja aún lado las excusas y que asume la responsabilidad de que todos los hondureños y hondureñas sin importar en que rincón del territorio se encuentren tengan luz eléctrica, agua potable, acceso a carreteras, una vivienda digna, una forma de ganarse la vida, educación, cultura, salud y resguardo en su ancianidad. Para esto ese Estado debe hacer dos cosas fundamentales, uno es desarrollar formas de percibir ingresos ya sea aumentando los impuestos para la empresas cuya ganancias son muy grandes y que están acostumbradas a no pagar nada o creando y fortaleciendo las empresas estatales propias para que le pueden generar ganancias y no depender de más préstamos internacionales o nacionales, y dos desarticulando los monopolios que tienen secuestrada la economía y restándole beneficios a los sectores privilegiados que sostienen esos beneficios a costa de la explotación desmedida de otras personas. Sabemos que esto no se da se la noche a la mañana y será necesario un periodo de transición.

Eso es socialismo, por cumplir ese sueño dio su vida el compañero Erick Martínez Ávila y por ese anhelo nosotros y nosotras mantenemos nuestro puño izquierdo y nuestra esperanza en alto.

Ya estamos muy cerca de las elecciones internas y sólo me queda invitarles a que si aún no saben por quien van a votar pongan atención no sólo a las promesas y a los anuncios si no a la forma en la que se dice se cambiara este país, para ver si existe alguna coherencia en lo planteado.

Si usted es parte del Partido Libre me gustaría invitarle a que le de su voto a quienes considere los mejores candidatos y candidatas pero que vote por el compañero Juan Barahona como sub coordinador del Partido ya que él representa a todo el Frente Nacional de Resistencia Popular que puede garantizar el proceso socialista en Honduras. En este caso la foto del compañero representa toda la trayectoria de lucha de nuestro pueblo.

Es necesario seguir en la formación política de toda la población para evitar confusiones, por que la chicha y la limonada son cosas muy distintas y no es válido hacer política queriendo ser las dos.

Los socialistas te recordamos hoy Erick y te recordaremos siempre.

A vos y a todos quienes han caído, así como a las futuras generaciones les reglaremos una Patria Justa, Socialista y Democrática. Daremos nuestra vida en el intento y sabremos heredar este compromiso.

Porque nacimos en el seno de la lucha, somos indestructibles.

¡Venceremos!
¡Necedad!
Universidad Nacional Autónoma, 
Tegucigalpa, Honduras.
7 de noviembre, 2012.
Gerardo Torres Zelaya
Secretario de Organización
OPLN

No hay comentarios: