El Partido Libertad y Refundación considera que las políticas de seguridad que se imponen en el país son un total fracaso que no pueden ocultarlo con cifras maquilladas y falsas marchas contra la violencia convocadas por los verdaderos responsables del crimen que campea en el país y que implementan en forma radical un modelo injusto, que despide trabajadores de sus empleos por miles y en forma cínica prometen una vida mejor.
El Partido Libertad y Refundación LibRe, ante las voces que nuevamente promueven la Pena de Muerte como política del Estado para combatir la violencia y la ola de criminalidad que azota a la Nación, a Honduras y a su pueblo, expresa:
Primero: Que el desastre en materia de seguridad del Gobierno del Partido Nacional que preside Juan Orlando Hernández, caracterizado por el autoritarismo, la militarización y la ausencia de dialogo; ha provocado en los sectores conservadores y reaccionarios, desesperación ante una realidad que supera la retórica falaz de la Vida Mejor, promoviendo medidas anacrónicas, anti históricas y profundamente anti cristianas, como ser, la Pena de Muerte.
Segundo: Que para LibRe, la violencia desatada que vive la Nación hondureña se ha incrementado salvajemente desde el último golpe de Estado que profundizó las desigualdades económicas y sociales de nuestro pueblo, sometiéndole a brutales ajustes neoliberales que han provocado la generalización de la pobreza y la exclusión de las mayorías, en un marco de descarada impunidad, corrupción e irrespeto a la Ley en todos los niveles.
Tercero: El Partido Libertad y Refundación considera que las políticas de seguridad que se imponen en el país son un total fracaso que no pueden ocultarlo con cifras maquilladas y falsas marchas contra la violencia convocadas por los verdaderos responsables del crimen que campea en el país y que implementan en forma radical un modelo injusto, que despide trabajadores de sus empleos por miles y en forma cínica prometen una vida mejor.
Cuarto: LibRe se manifiesta rotundamente en contra de la pena de muerte, y reitera a la Nación su propuesta de la No Violencia y de una verdadera política de seguridad integral que ataque de raíz los problemas, transformando los aparatos judiciales, fiscales y de investigación; y que desarrolle políticas en conjunto con la comunidad de Respeto a la Vida y la Dignidad Humana; solo así se restaurara la Paz que merece nuestro pueblo.
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