La Asociación LGTB Arcoíris sufrió el pasado primero de septiembre, un "extraño robo" de la computadora que registraba las imágenes de las cámaras de seguridad de sus oficinas, ubicadas en la Avenida República de Chile en la ciudad de Tegucigalpa.
Según la denuncia pública de la Asociación Arcoíris, "Las circunstancias del allanamiento ilegal sugieren que se trata de un ataque dirigido específicamente a la organización, siendo este el incidente más reciente de una larga secuencia de actos de hostigamiento contra los líderes y miembros de la organización".
Además la denuncia pública precisa que "actualmente se opera en un contexto general marcado por un nivel de violencia extremadamente alto, riesgos ante los cuales los defensores de derechos LGBT corren un mayor riesgo debido a la hostilidad social extendida hacia sus esfuerzos por promover el respeto por los derechos de personas LGBT".
De igual manera el equipo de voluntarios de la Asociación asegura que son objeto de amenazas por parte de personas públicas con influencia en los medios de comunicación.
Ante tales hechos la organización de protección a defensores de derechos humanos en situación de riesgo- Front Line Defenders, pidió al gobierno de Honduras, garantizar en todo momento la integridad física y psicológica de los integrantes de Arcoíris y "garantizar que las personas que amenazan a la organización sean llevadas ante la justicia".
La Asociación LGTB Arcoiris es una organización que promueve la igualdad y equidad de personas lesbianas, gays, bisexuales y transgéneros (LGBT) en Honduras.
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