Después de traicionar la voluntad del pueblo hondureño, una aplanadora de diputados nacionalistas respaldados por una minoría del partido Liberal, se impusieron a la legalidad. Luego, cantaron el Himno Nacional, e izaron la bandera porque inició el mes de la patria.
Después de un cuestionado proceso de selección de candidatos que incluyó el retiro de destacados miembros de la Junta Proponente, los seudo-parlamentarios eligieron por cinco años al Fiscal General y al Fiscal Adjunto, contrario a lo que pidió el pueblo y a lo que establece el ordenamiento jurídico.
Se consumó la conspiración contra la voluntad del pueblo hondureño, una aplanadora de diputados nacionalistas respaldados por una minoría del partido Liberal, se impusieron a la legalidad. Luego, cantaron el Himno Nacional e izaron la bandera porque inició el mes de la patria.
Cuando lograron el objetivo, el hemiciclo estalló en euforia, impotencia y rabia. Afuera, acostados en el suelo, cansados por tantas horas de gritos, dormían decenas de hondureños que llegaron a protestar opuestos al nombramiento de los fiscales.
Llegaron a pedir a los representantes del pueblo que respetaran el deseo del pueblo. Eso era imposible para los 98 diputados y diputadas, todo un elogio a la ignorancia, formado por viejas pendencieras y vulgares, por viejos vividores y cobardes.
Tomado de El Libertador
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1 comentario:
lo bueno de los puerko cachurecos que ellos cree van a estar siempre alli . . tan pendejos . .
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