jueves, 25 de febrero de 2016

Funcionarios y alcaldes de La Paz e Intibucá siembran violencia para imponer proyectos hidroeléctricos

Martín Gómez Vásquez, subcoordinador general del Movimiento Indígena Lenca Independiente de La Paz (MILPA)


Por Marvin Palacios

El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) reunió a inicios del mes de enero de 2016 a líderes y lideresas lencas que enfrentan una problemática preocupante en relación con los grupos de poder que impulsan proyectos hidroeléctricos y de extracciones mineras en el departamento de La Paz.
En dicha reunión asistieron representantes de MILPA de varias comunidades y se abordó el tema de los derechos humanos que han sido violados producto de la violencia institucional que ha arreciado en los últimos años en contra de las comunidades lencas y que ha dejado 25 muertes violentas en el año 2015.
“La problemática es muy fuerte de persecución, criminalización, acusaciones, encarcelamientos, represión, torturas, de todo se da en nuestros pueblos”, denunció el Gómez Vásquez.
Vásquez señaló que los alcaldes de los municipios de Santa Elena (Santos Víctor Ventura Vásquez del partido Liberal), San José La Paz (José Abel García Argueta del partido Nacional), San Marcos de la Sierra en el departamento de Intibucá (Miguel Angel Bautista Gutiérrez del partido Nacional)  junto a la vice presidenta del Congreso Nacional, Gladys Aurora López son señalados de promover acciones que violentan los derechos humanos de las  comunidades indígenas lencas.
Asimismo se señala a Arnold Castro López (esposo de Gladys Aurora López) y quien administra los proyectos de represamiento de ríos, de acuerdo a la denuncia expuesta por  los dirigentes de MILPA.
Dentro de esta vorágine de violencia también se menciona a activistas del partido Nacional, a agentes policiales, militares y también civiles que al parecer son utilizados como informadores (orejas), pero que cuentan con armas y equipos de comunicación para espiar y perseguir a dirigentes lencas.
“Esta gente hace un trabajo de seguridad, con todo su equipo, armas, chalecos y todo lo demás, entonces empiezan a reprimir a los dirigentes más que todo, a los consejos indígenas, como en el caso nuestro, como dirigentes de MILPA”, aseguró Gómez Vásquez.
Gómez Vásquez dijo que antes de que los políticos promovieran las concesiones minerales e hidroeléctricas, el pueblo indígena lenca vivía en paz, con tranquilidad. “Después que viene el gobierno de Honduras a concesionar las tierras, los territorios, las aguas, el aire, los bosques, los minerales; entonces ahí empieza el problema porque ya nosotros ya nos convertimos en víctimas  de esos mega-proyectos”.
Esos mega-proyectos son proyectos de muerte, por ejemplo nosotros en Santa Elena sólo en el año 2015 tuvimos 5 asesinatos afirmó el dirigente comunitario.

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