jueves, 23 de julio de 2015
“Estamos frente al segundo holocausto del pueblo griego, producto de las imposiciones de Europa"
CX36, Radio Centenario
Por Efraín Chury Iribarne
Efrain Chury Iribarne: Estamos recibiendo vía telefónica, como cada lunes a esta hora, a James Petras desde Nueva York. Buenos días Petras, ¿cómo estás?
James Petras: Buenos días. Estamos bien, prontos para comenzar.
EChI: Bien, comencemos con Grecia.
JP: Quiero comentar primero sobre el concepto de lo que llaman “acuerdo” de este fin de semana, que es el segundo holocausto griego.
El primero fue la invasión y ocupación de los nazis que costó 400 mil muertos -incluidos mi abuelo y mi tío- durante la ocupación por el hambre y las dificultades que los alemanes nazis exigieron.
Ahora tenemos el segundo holocausto, que es el producto de las imposiciones de Europa, principalmente -otra vez- alemanes y la invitación del gobierno de Grecia, de Alexis Tsipras, de someter al país a un tipo de colonialismo.
Es un colonialismo por invitación. Porque el acuerdo dice textualmente que Europa, desde Bruselas, va a mandar supervisores para asegurar que todas las medidas regresivas se cumplen puntualmente y según lo establecido por los prestadores y de los bancos en Europa del norte.
Son cincuenta años de peonaje enfrentará Grecia, pagando y pagando, nada de lo que llaman “de ayuda” –préstamos por 80 mil millones en tres años- va a entrar en Grecia, ni un centavo. Simplemente ese dinero pasa de los bancos europeos a los bancos europeos.
No entrará al país ni un peso para aliviar la crisis ni estimular la economía.
El acuerdo dice que van a privatizar todas las empresas griegas que puedan organizar, incluso Luz y Fuerza, la empresa más lucrativa del país. Y mucho más: todos los puertos, aeropuertos; todos los sectores productivos que puedan encontrar.
Además van a aumentar los impuestos a los alimentos, van a modificar los acuerdos laborales para dar mano fuerte a los capitalistas para despedir obreros en cualquier momento bajo cualquier pretexto.
Realmente es una gran traición por parte de Tsipras.
Y ahora él busca la ratificación en el Parlamento. Los parlamentarios deberían rechazarlo.
Los datos que tengo, es que algunos sectores del partido Syriza votarán en contra y eso resultará en una ruptura, mientras Tsipras ha dicho que expulsará del gabinete a todos los opositores. Creo que como resultado de nuevas elecciones, Tsipras va a perder votos por lo que tendría que aliarse con la derecha neoliberal para formar el nuevo gobierno.
Es una situación desastrosa porque ya los pensionistas, por ejemplo, han perdido el 40% de sus ingresos, otro recorte más significará que la gran mayoría de los pensionistas van a caer en la pobreza. Esto indica que todos los trabajadores del sector público, que habían conseguido reimponerlos en el trabajo, serán expulsados nuevamente.
El acuerdo significa que Grecia entrega toda su soberanía, toda la posibilidad de implementar medidas a favor de las grandes mayorías; la colonización de Grecia es completa y; el entreguismo de Tsipras es definido.
Esto significa que toda esta izquierda europea no tiene mucha importancia, son simplemente sirvientes del poder.
Lo que dicen es que apoyan un referéndum que dice NO y ellos hacen por el SI. La mayoría votó contra la austeridad y el gobierno implementa una súper austeridad. El pueblo considera al nuevo gobierno como un representante de la democracia, y el gobierno entrega el poder de decisión a funcionarios extranjeros no elegidos.
En suma, las contradicciones y la hipocresía de los izquierdistas indican que debemos repensar lo que es izquierda; y todos los comentaristas en el exterior –con pocas excepciones- nosotros incluso, hemos dicho muchas veces que no se puede funcionar en las uniones controladas por los poderes imperialistas. El imperialismo es la forma más dominante de controlar y no hay que hablar de socios, como habla Tsipras de “nuestros socios” en Europa. Es como formar un esquema de integración con Estados Unidos y llamar a los imperialistas de Washington como socios. No son socios, son explotadores, buscan controlar los recursos y la mano de obra, y quieren empobrecer al pueblo para aumentar la ganancia.
Eso es lo que llamamos ‘integración’ en Europa y en las Américas.
Y me parece importante marcarlo para todos los que consideran una política de izquierda. No se puede comprometer con los países imperialistas y esperar la realización de reformas progresistas y dejar la subordinación, el vasallaje, que está presente.
El pueblo griego va a sufrir tremendas pérdidas, van a quedar como sirvientes, limpiadores y mesoneros de los turistas ricos que van a Grecia ahora a encontrar un pueblo dominado, humillado y traicionado.
Es uno de los pecados, uno de los peores actos de un partido que pretende ser de izquierda en toda mi historia. Tengo casi 58 años de militancia y nunca he visto una traición tan profunda, tan negativa, sobre un pueblo entero.
EChI: ¿Hay alguna salida o la suerte está echada?
JP: La salida siempre dije –desde que empezamos a discutir esto, en enero- que es dejar de pertenecer a la organización colonial que se llama eurozona, la Unión Europea.
Luego, desarrollar una política independiente, renunciar a la deuda, como hizo Argnetina, Ecuador, Islandia; y empezar a encauzar los ingresos para el repunte de la Economía; financiar el consumo; mejorar las capacidades de desarrollar la actividad pública; nacionalizar los bancos; etc.
Todo está escrito, nosotros lo definimos temprano.
Si uno vuelve a mirar las columnas de febrero o marzo, ya hablábamos de que era un desastre, porque ante cada capitulación de Grecia mayores eran las exigencias.
Cuando los imperialistas entienden que hay un gobierno débil, un gobierno dispuesto a conciliar, ellos determinan los términos de las negociaciones y cada vez que Tsipras y Syriza entregaban algún documento, aceptando una u otra de las imposiciones; se enfrentaba a mayores imposiciones.
La única solución ahora y en el pasado, es la ruptura con Europa y aplicar una nueva forma de organizar la Economía.
Dicen que esto causaría un caos, pero el caos ya existe. La gente no encuentra trabajo, los jóvenes sufren una desocupación del 60%, no tienen nada que perder.
Sería eso: buscar otra forma de organizar la Economía, socializarla; buscar aliados en Rusia, China, etc.; aumentar la capacidad de producir; y no someterse a los bancarios. Porque hoy la mayor parte de lo que Grecia produce va a pagar la deuda, no entra en el bolsillo de la gente ni en el Tesoro griego.
Por eso creo que lo mejor que puede pasar hoy en Grecia es que el Parlamento rechace el acuerdo y fuerce a nuevas elecciones, rechazando a Tsipras -que se vaya al infierno- y buscando otra dirección. El Partido Comunista de Grecia, desde el comienzo, dijo que Syriza era un traidor, un partido dispuesto a colaborar con Europa, la OTAN, etc.
Y tenían razón.
Creo que un reagrupamiento de partidos e individuos, puede formar por lo menos una oposición. Y creo que Syriza con Tsipras a la cabeza va a formar alianza con los partidos de la derecha, porque ahora ambos apoyan la austeridad, la subordinación, el peonaje de deuda, el colonialismo. Entonces creo que lo mejor es que el gobierno pase a elecciones, hay una oposición verdadera en Grecia, la derecha se unificará entre sí para otra vez enfrentar la crisis griega, que pasará por huelgas generales, movilización de la juventud, barricadas en las principales ciudades, etc. Esa es la única respuesta.
EChI: ¿Cómo está la situación en Venezuela?
JP: Bueno, allí la intervención norteamericana es notable.
Están utilizando todos los instrumentos de la guerra de clases: financian partidos, financian paramilitares, trabajan junto a empresarios locales para fomentar abastecimiento; etc. Es decir, están haciendo todo lo posible para crear una situación económica negativa y generar el descontento popular.
Por otra parte, el gobierno está tratando de mantener los programas sociales pese a la brutal caída del precio del petróleo; el gobierno trata de movilizar al pueblo, para que se mantenga la alianza del pueblo con las fuerzas armadas. Pero tienen que invertir en diversificar la Economía, hace tiempo que venimos diciendo que no se puede mantener una Economía en base a petróleo solamente. Y esa es la parte difícil porque el gobierno depende del petróleo cuyo precio a caído a un tercio de lo que valía, por lo que es necesario canalizar de una forma u otra, todo lo que el gobierno tiene en la productividad actual y en lo posible, financiar importaciones para comprar elementos que satisfagan las necesidades básicas del pueblo.
Va a ser una lucha muy dura electoralmente y creo que debemos estar a la espera porque el gobierno tiene suficiente fuerza para ganar una mayoría estrecha, que puede ser incluso para evitar un referéndum. Porque la derecha busca ganar las elecciones legislativas para convocar a un referéndum y tratar de derrrocar al gobierno de Nicolás Maduro., Y si no lo consiguen pueden volver a tratar de lanzar un golpe de Estado. Y ese es el peligro.
EChI: ¿Hay algún otro tema que nos quieras analizar?
JP: Si, hay dos temas.
Primero, hay una lucha interna en Ucrania entre los neonazis, el sector de la ultraderecha, y los golpistas en Kiev. Están peleando con armas, ya es una bolsa de gatos, peleándose entre los nazis y los cipayos de la OTAN.
Esto debemos anotarlo porque los opositores, demócratas orientales, están defendiéndose no sólo contra el golpismo sino además contra los nazis. Y ahora los nazis y los golpistas se pelean a ver quién gobierna el país, y no hay nada que elegir entre ambos pues ningunos representa la voluntad del pueblo; sólo el pueblo del oriente ucraniano, armas en mano, está defendiendo el país y la democracia.
Finalmente me quiero referir a la vista del Papa por algunos países de América Latina, que representa en un sentido un repudio al capitalismo salvaje, el capitalismo que no toma en cuenta las necesidades sociales. Esto ha recibido bastante publicidad por la izquierda, mientras la derecha trata de distorsionar el discurso, diciendo que le Papa también critica a los gobernantes de izquierda.
Una frase del Papa que tuvo resonancia en la prensa internacional es cuando criticó la ideología, diciendo que la ideología en el siglo pasado tuvo efectos negativos Pero el mismo Papa está articulando una ideología, una ideología de bienestar social, critica el capitalismo, etc. Y eso es una ideología.
Creo que la ideología del Papa es en contra del neoliberalismo y en contra del marxismo. Y trata una fórmula corporativista, en la que el capital, el trabajo y el Estado juntos trabajan para el bien del país. Pero esto descuenta un factor bien importante en la búsqueda del bienestar social: sin lucha de clases no pueden alcanzarse las metas que plantea el Papa.
Por ejemplo el Papa dice que baje la desigualdad, pero eso no va a ocurrir sin lucha de clases porque los capitalistas no van a escuchar y acatar el mensaje del Papa y entregar sus ganancias. También podemos decir que no va a terminar con la pobreza sin lucha de clases, porque los pobres están pobres porque los capitalistas han tomado el control de los medios de producción y han ido aumentando las tasas de ganancia.
Entonces, hay una contradicción: si el Papa no reconoce la fuerza motor de la historia que es la lucha de clases, toda los grandes ideales y las críticas justas que hace al capitalismo, no tiene un apoyo social y una forma de realizarlos. Esto me parece lo negativo y lo positivo de la visita del Papa.
EChI: Muy bien Petras valoramos muchísimo todos estos aportes, gracias y nos reencontramos el lunes.
JP: Muchas gracias. Un abrazo a los oyentes.
Transcribimos este análisis radical que usted puede volver a escuchar en el siguiente enlace:
(*) Escuche en vivo los lunes a las 11:30 horas (hora local) la audición de James Petras por CX36, Radio Centenario, en el 1250AM del dial uruguayo y desde Montevideo (Uruguay) para todo el mundo a través de www.radio36.com.uy
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