martes, 21 de julio de 2015

Misión exploratoria genera expectativas y dudas



Una misión exploratoria de la Organización de Naciones Unidas (ONU) pisó tierras hondureñas el pasado lunes y esta noche estaría concluyendo las reuniones que con diversos sectores acordó, en el marco de la jornada de protestas y el fallido diálogo convocado por el gobierno de Juan Orlando Hernández. 

Dicha misión es encabezada por Andrés Salazar, oficial superior de Asuntos Políticos y jefe de Equipo para Centroamérica del Departamento de Asuntos Políticos de Naciones Unidas. Además la integran Alejandro Bendaña, asesor del Equipo de Reserva de Apoyo a la Mediación, y Brenden Varma, oficial de Asuntos Políticos de la ONU. Ellos recibieron a sectores organizados de sociedad civil, entes de gobierno, el Comisionado Nacional de Derechos Humanos y organizaciones defensoras de derechos humanos independientes, organizaciones feministas, y algunos dirigentes de la oposición indignada así como de los partidos de oposición política. 

Para el analista Raúl Pineda “no hay que ser ingenuos pensando que esta misión nos vendrá a resolver los problemas”, Pineda es de la idea de que los hondureños deben resolver sus problemas en casa, sin intervenciones internacionales. 

“No podemos caer en la ingenuidad de que a esta delegación la anima una profunda preocupación por lo que está pasando en Honduras, y al final los problemas de Honduras los resolveremos aquí. Podría venir una CICIH (Comisión Internacional contra la Impunidad para Honduras)  pero al final les tocará a los fiscales hondureños y jueces hacer el proceso de juzgamiento. En esta exploración lo que habrá es un informe en el que dirán si enviarán o no delegados facilitadores”, dijo escéptico Pineda. 

Por otro lado analistas y buena parte de la oposición indignada guardan la esperanza que esta misión sea un paso para llegar al diálogo transparente que han pedido, condicionado por la instalación de una CICIH. 

Miguel Briceño, joven de la oposición indignada quien se reunió con esta misión el pasado martes, cuenta que se les escuchó los puntos de exigencia en donde el énfasis está en la instalación de una CICIH. “Además dejamos clara la exigencia de reformar la elección de la Corte Suprema de Justicia. Ellos escucharon, solo se dedicaron a preguntar sobre lo que nosotros hablamos, no hubo un sí o un no, harán un informe en la última semana y de allí la ONU hará sus recomendaciones”, explicó Briceño.

Esta semana partidos políticos de oposición (LIBRE, PAC, PINU y Liberal) se reunieron con representantes de los jóvenes indignados de Tegucigalpa y San Pedro Sula donde presentaron un informe que demuestra la factibilidad de una CICI para Honduras. Una delegación de tres jóvenes viajó a Guatemala y el informe es validado por la CICIG (Comisión Internacional contra la Impunidad Guatemala) . Este documento fue entregado a la misión exploratoria de la ONU esta semana también.

Lea el informe AQUÍ

El analista político Eugenio Sosa es de la idea que esta misión exploratoria bien trae la posibilidad de generar un verdadero diálogo, pero aún dista mucho de la realidad ya que ambas partes en conflicto siguen dándose negativas. 

“El gobierno puede recibir recomendaciones pero hay escepticismo de que realmente se dé el paso a un diálogo más profundo porque de fondo está que el planteamiento central del movimiento de indignados no está siendo aceptado por el gobierno ni siquiera como punto de diálogo. Si el gobierno no cede a aceptar la CICIH como elemento central del diálogo y si no cede que es el movimiento de ciudadanía indignada quien debe estar en primera línea como principal interlocutor, no deja de ser un mecanismo desmovilizador y no un mecanismo real para buscar soluciones”, expresó Sosa quien además acotó que también el movimiento de indignados debe colocar sobre la mesa el tema de la CICIH como punto de diálogo, no previo al mismo. 

Lo que sí queda claro es que la misión exploratoria de la ONU se abrió a diversos sectores, muchos de ellos invisibilizados y hasta criminalizados por el gobierno. Los problemas a los que el gobierno se hace sordo, se expusieron ante la ONU porque el descrédito en las instituciones del Estado hace ver en una instancia internacional a un salvador. 

“La pregunta es si va a hacer recomendaciones que busquen una salida profunda y real y luego si el gobierno las va a asumir. Ha llegado un momento de descrédito y desconfianza de la ciudadanía en toda la institucionalidad que cualquier diálogo escapa a las posibilidades de ser conducido o dirigido por las autoridades actuales y por las que el gobierno nombra”, dijo Sosa.

Agregó además que un diálogo, en la situación social que vive Honduras actualmente solo sería posible en las manos de un equipo internacional no de mediadores, ni facilitadores siguiendo el guion del gobierno, sino de mediadores con posibilidades de creatividad metodológica para poder escuchar y acercar las diferentes posiciones en conflicto.

Tanta es la esperanza en entes internacionales que las declaraciones de Tomas Shannon, consejero del Departamento de Estado de los Estados Unidos de que la instalación de una CICIH sería una decisión inteligente para avanzar en el combate anticorrupción y su reconocimiento al movimiento de imaginados e indignadas como muestra de poder ciudadano, han hecho que Miguel Briceño del grupo de los indignados asegure que la instalación de la CICIH es un “logro que está muy cerca de ser una realidad”.  

Un diálogo de este tipo no soluciona todos los problemas de un país que arrastra crisis de décadas oscuras, golpes de Estado, gobiernos corruptos y entreguistas y la opresión de grupos de poderes económicos y sociales. En eso coinciden todos los analistas. También coinciden en que la instalación de una CICIH es solo un paso que puede permitir adecentar el sistema de justicia de forma que la impunidad acabe, especialmente la que favorece a las altas esferas de la sociedad. 

El analista Pineda asegura que hay que poner atención en las estrategias del gobierno que podría alargar su diálogo por un largo tiempo, alegando que los problemas de Honduras son profundos, pero con la intención de agotar al movimiento social que ahora sale a las calles. 

 Por eso, deben haber demandas también a largo plazo, procesos donde se comience la transformación, “en el sector protestante que es representativo, no contaminado por ese afán de poder que caracteriza a los políticos debe haber una actitud pragmática, hay que tomar el tema de la Corte Suprema de Justicia, el tema de la Ley Electoral porque es en el financiamiento de los partidos políticos donde más se genera corrupción, el Ministerio Público que no es independiente, etc”, dijo. 

Para Pineda en Honduras se vive un estado de efervescencia, aun no es una crisis; pero la gobernabilidad se le está complicando al actual gobierno y ya urge sentarse a consensuar para no caer en la crisis. 

Por su parte los indignados e indignados siguen anunciando las movilizaciones de fines de semana y prometen acciones más contundentes para la próxima semana de no ver voluntad de parte del gobierno en instalar una CICIH. 

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