Hace unos días doña Mercedes leyó en un periódico de circulación nacional sobre La Cuenta del Desafío del Milenio. Doña Mercedes leía en voz alta: “Honduras reprobó en 11 de los 20 indicadores”, esos indicadores “sirven para determinar si una nación puede recibir donación para proyectos de desarrollo”. La corrupción es uno de esos temas que el gobierno de la Vida Mejor no ha podido superar. Las evaluaciones hechas tanto por el Banco Mundial, la Revista inglesa El Economista y el Proyecto de Justicia Mundial, han sido decisivas. Para la embajada de Estados Unidos en nuestro país, no se logró este objetivo porque Honduras sigue pagando la factura de “decisiones presupuestarias y de política de años anteriores”.
Doña Mercedes para poder explicar esta noticia a sus nietos, les contó una historia muy simple: “Había una vez un ladrón que pasó frente a una casa bonita, con todas las comodidades, era de una de esas casas de gente con mucha pisto. Pero esa casa, tenía cámaras de vigilancia, portones bien altos y un guardia de seguridad. Ese ladrón pensó: ¡esa casa no me interesa, porque no voy a robar fácilmente!”. Al ladrón de la historia de doña Mercedes, no le interesó aquella casa porque tenía todos los mecanismos de seguridad que no le permitirían robar con tranquilidad.
Esa historia tiene un gran parangón con el planeamiento del analista Julio Navarro y obliga al gobierno a responder un par de preguntas muy concretas. Sostiene el analista que dichos fondos tienen mecanismo de seguridad en los que cualquier cantidad de dinero que se utilice, debe dar cuentas en el más mínimo detalle; “lo que pasa es que al gobierno no le interesa acceder a esos fondos, porque son fondos bien controlados, bien monitoreados y blindados, entonces ¿pueden estar interesados funcionarios del Estado en ejecutar fondos que nos les generan ningún beneficio?”. Dicho de una manera sencilla, ¿será que al gobierno de la Vida Mejor no le interesan esos fondos porque están bien “chequeados”?
Como en la historia de doña Mercedes, al ladrón no le interesó esa casa, porque no puede robar fácilmente. Por eso, tendría sentido preguntar lo siguiente: ¿Cuál es la razón por la que Honduras se ha aplazado en los últimos 6 años de la Cuenta del Desafío del Milenio?, ¿incapacidad o desinterés de la clase política?
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