Una nueva polémica fue puesta en la mesa del debate en la realidad política hondureña. Nos referimos a las reformas al artículo 36 de la Ley del Régimen de Aportaciones Privadas (RAP).
La modificación aprobada por el Congreso Nacional plantea el uso 5,500 millones de lempiras correspondientes a los fondos excedentes del RAP por parte del gobierno para proyectos en salud y compra de bonos.
Una de las reformas del artículo 36 establece que los recursos económicos del RAP que no sean utilizados en el rubro habitacional pueden ser invertidos en el sistema financiero nacional en títulos valores emitidos por el gobierno y supervisados por la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS).
Para la diputada del Partido Innovación y Unidad (PINU), Doris Gutiérrez, la reforma es el comienzo de otro acto de corrupción que nuevamente afecta a la clase trabajadora hondureña: “le están cayendo como aves de RAPiña a los pocos fondos, a las pocas instituciones que han quedado con cierto grado de liquidez y que es un dinero que no es del gobierno; no es desde ahora que vienen con esa intención, desde que estuvimos aprobando la Ley de Protección Social ya se veía venir esta jugada de caerle a los fondos del RAP”.
El capital del RAP se divide en aportaciones de los trabajadores, de la empresa privada más los intereses que genera el capital y generan los fondos excedentes, todo eso es parte del capital patrimonial de los obreros y obreras.
Hasta el momento, a los empleados cuando retiran su dinero solo se les devuelve el capital aportado pero no se les da los fondos excedentes; ese dinero queda bajo la administración de la junta directiva del RAP donde están involucrados los dirigentes obreros.
Antes de la reforma, la ley mantenía blindados los fondos excedentes sin permitir que terceros pudieran utilizarlos para otras acciones, pero con la modificación el gobierno podrá utilizar ese dinero para proyectos que se pueden convertir en programas de asistencia social.
El economista Wilfredo Flores cree que las intenciones del gobierno tienen el objetivo de utilizar esos fondos para hacer proselitismo en el marco del próximo proceso electoral.
“Ese dinero lo quieren invertir en proyectos de bonos del Estado y otras medidas que pondrán en riesgo la existencia del mismo.
Acá se han unido los partidos que están al servicio de los grupos de poder y a ellos se suman los dirigentes obreros, quienes son uno de los principales impulsores de esta medida que es un nuevo golpe a los trabajadores.
Se debe transparentar los fondos que cada trabajador tiene en el RAP y que a partir de eso ellos decidan si lo quieren tener ahí o lo quieren retirar, aunado a eso se debe financiar viviendas, beneficios y proyectos para los trabajadores, pero ahora con estas reformas se plantea que la gente retire su dinero ahorrado hasta los 65 años.
Esos fondos deben ser manejados de forma transparente y para el desarrollo y mejorar las condiciones de vida de los trabajadores y no ponerlos en riesgo de esta forma.
Es un fuerte golpe a la clase trabajadora y mediante ese atentado se busca financiar la campaña política del Partido Nacional y hasta el proceso de reelección del presidente.
Nadie garantiza a los trabajadores que ese dinero no se va a perder, así como sucedió con el Instituto Hondureño de Seguridad Social.
El RAP lleva el mismo camino del IHSS y ahora con las reformas de la Ley Marco de Protección Social se contribuye a destruir el IHSS y fracturar al RAP” sintetizó el economista.
Las centrales obreras: ¿A servicio de quién?
“Los dirigentes obreros deberían estar defendiendo los intereses y los ahorros de los obreros pero están en una postura sumamente contraria”, siguió argumentando Flores.
Y es que acuerdos negociados a espalda de las bases como ser: salario mínimo, Ley Marco de Protección Social, negociaciones de contratos colectivos, son solo algunos de los ejemplos por los que ya nadie confía en el papel de los dirigentes obreros hacia su clase.
En las reformas a la Ley del RAP, las centrales obreras son quienes impulsan a que el gobierno pueda utilizar los fondos excedentes de la institución bajo la promesa que el dinero de las aportaciones y ahorro no sean tocados.
Para Flores los dirigentes obreros dejaron de representar a los trabajadores, y ahora traicionan a las bases gracias a acuerdos y beneficios que tienen directamente con el gobierno.
“No se puede confiar en dirigentes obreros que formaron parte de la junta directiva del IHSS y que luego quebró y ahora son ellos los que promueven estas reformas”, expresó.
Asimismo cree que los obreros independientes deben organizar a la base y que ésta tenga una postura clara y beligerante ante las decisiones de la burocracia que una vez más los traicionó.
Por otra parte el presidente del Congreso Nacional dijo que las reformas al RAP deben entenderse como un proyecto de beneficio a los trabajadores y no confundirlo creyendo que les afectará.
Además, manifestó que todos los proyectos que se realizarán con los excedentes del RAP generarán beneficio para la ciudadanía y afirmó que habrá transparencia en el uso de los mismos.
Recalcó que hay una campaña de desprestigio alrededor de la reforma que no es más que un intento de la oposición por evitar el desarrollo.
Empresarios, obreros y representantes del gobierno forman el Consejo Económico y Social quienes buscarán un mecanismo de distribución de los excedentes y la vigilancia en conjunto con la CNBS de los recursos.
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