El día 27 de octubre de 2015, el Colegio de Periodistas de Honduras hizo público un comunicado en referencia al cierre de Diario Tiempo. Estamos en la penosa obligación de hacer algunas observaciones a su honorable junta directiva. En el comunicado hablan del “cierre temporal”, ¿En qué basan esa afirmación?, ¿el Colegio de Periodistas sabe cuánto tiempo durará ese cierre temporal?, o el término temporal ¿es para ablandar un poco la escandalosa acción en la que el Estado, a través de su gobierno, asfixia a un medio de comunicación?
Sigue diciendo el comunicado: “expresamos nuestra preocupación”, ¿cómo debe entender el pueblo hondureño su preocupación?, ¿qué pasó con esa preocupación en las violaciones a la libertad de expresión de los corresponsales de Radio Progreso que han sido amenazados en los últimos años?, ¿qué pasó con el caso de David Romero?, ¿por qué el silencio cómplice ante el bozal impuesto por CONATEL en referencia al tratamiento del Caso Continental?, ¿Dónde ha estado esa preocupación con respecto a la impunidad que sigue primando en la muerte de comunicadores y periodistas en los últimos 5 años?
El inciso 3 de su comunicado, nos deja más claro su papel frente al gobierno de turno: ser su fiel defensor sin ninguna vergüenza ni acoquinamiento, y hacer lo que pida casa de gobierno “ad litteram”. En ese sentido no pretendan tapar que el presidente de la república y su círculo de poder no hayan sido los responsables de todo este “macaneo”. El Estado, a través del gobierno, es el primer y máximo responsable, de manera directa o indirecta, de velar y proteger el derecho de la libertad de expresión e información en cualquier caso.
Que el Colegio de Periodistas diga que el cierre de operaciones de este medio de comunicación no se deriva de una decisión del gobierno, sino por decisiones legales tomadas por el departamento del Tesoro de los Estados Unidos es insultar la inteligencia de la ciudadanía, ya que está claro que Juan Orlando Hernández aprovechó la ocasión para aniquilar a Diario Tiempo. Vio la ocasión perfecta para seguir su apuesta de fulminar todo pensamiento y crítica independiente porque los ve como voces enemigas.
Ojalá que la Junta Directiva y el gremio periodístico entiendan la necesidad de saber acompañar las luchas de los diversos sectores de la sociedad hondureña que reclaman la vigencia de los derechos humanos, la democracia, el Estado de derecho y la libertad de expresión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario