sábado, 26 de septiembre de 2015

Los cuerpos policiales y militares incrementan las agresiones contra los periodistas



Las agresiones en contra de periodistas y comunicadores sociales han incrementado en el último año. Y lejos de ser condenadas y juzgadas por el Estado, éste las promueve con una política de agresiones en contra de aquellos y aquellas que ejercen el derecho a la libertad de expresión. 

Lo anterior fue denunciado en una conferencia de prensa realizada esta semana por el Comité por la Libre Expresión, C-LIBRE y el Grupo de Sociedad Civil. 

La feminista Jessica Sánchez, directora del Grupo de Sociedad Civil, asegura que han denunciado en comparación con el año anterior-2014- el aumento de la agresividad policial y militar en contra de periodistas, comunicadores sociales, pobladores y pobladoras que ejercen su derecho a la libertad de expresión a través de la protesta ciudadana.

“Lo que está sucediendo es grave, no es aislado y comenzó a incrementarse a partir del 2009, pero ahora es notable que las agresiones vienen con mayor fuerza y con más frecuencia. Ya no importa el género, el ataque va y es con más saña.  Y lamentamos eso porque no se pueden justificar los ataques en contra de las personas que están ejerciendo su profesión de informar a la ciudadanía”, dijo Sánchez en la conferencia de prensa.  

Sentar precedente 

A la conferencia de prensa, desarrollada en Tegucigalpa, asistieron los periodistas Dunia Montoya de la revista Vida Laboral y el comunicador César Obando Flores, corresponsal del Radio Progreso en el departamento de Colón. Ambos comunicadores fueron agredidos brutalmente por la policía y miembros del ejército el pasado 1 de septiembre cuando la ciudadanía hizo suyo el derecho a la protesta social. 

De acuerdo al dictamen médico Dunia Montoya sufrió luxación de su hombro derecho, golpes contusos en el rostro y tórax causados por las "patadas" propinadas por agentes de la Policía. Dunia Montoya, reconocida profesional del periodismo es beneficiaria de medidas cautelares solicitadas por la CIDH a la Secretaría de Seguridad hace seis años; ahora tendrá que guardar al menos dos meses de reposo por la golpiza policial.

“En medio de la realidad que enfrenta el país, la impunidad, es necesario que denunciemos, que presionemos para que la fiscalía investigue solo así se podría sentar un precedente en estas agresiones que sufren, no solo yo, sino varios periodistas y comunicadores sociales”, dijo Montoya. 

En esa misma represión en la ciudad de El Progreso sufrieron agresiones físicas y psicológicas los periodistas Inmer  Gerardo Chevez de Radio Progreso. Igual suerte corrió Román Paz de la televisora Campus TV. Mientras que a Edy Andino, de Canal 6, le impactó una bomba lacrimógena en su rodilla derecha.


Represión en el Aguán 

Otro caso de represión al trabajo periodístico tuvo lugar en Tocoa en el departamento de Colón, donde fue agredido el comunicador Cesar Obando, corresponsal de Radio Progreso, quien daba cobertura a la protesta de los indignados e indignadas en aquella ciudad.

Obando fue lanzado al suelo por un policía que después junto a otro lo persiguieron y amenazaron diciendo que "por su culpa la gente se estaba dando cuenta". Obando corrió y logró tomar un taxi que lo llevara al Comisionado de Derechos Humanos donde se refugió hasta que llegaron organizaciones de derechos humanos para llevarlo a interponer la respectiva denuncia. 

“Espero que las autoridades investiguen, para evitar que esto quede impune. Hago el llamado para que las autoridades respeten el trabajo que hacemos los periodistas y comunicadores que estamos trabajando para informar al pueblo”, dijo Cesar Obando Flores. 

En la agresión de los tres periodistas los ataques fueron dirigidos específicamente para ellos quienes documentaban el alto nivel de represión que vivía la población indignada el pasado uno de septiembre en protesta a los altos índices de corrupción e impunidad. 

Registros del Comité por la Libre Expresión, C-Libre, informan que desde enero y septiembre de este 2015, militares y policías han cometido 25 agresiones en contra de quienes han ejercido su derecho a la libertad de expresión. De ese total, 13 de las agresiones fueron cometidas por policías, y 12 por miembros de las Fuerzas Armadas. 

Este número de agresiones incrementó tres veces en comparación el año 2014. 

No hay comentarios: