Honduras participó en la reunión de la vigésimo quinta sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Mientras diversas organizaciones nacionales e internacionales denuncian el deterioro sostenido de la situación de Derechos Humanos en Honduras, a canciller del régimen, Mireya Agüero, solicitó este jueves que la alta comisionada de Derechos Humanos de la organización de las Naciones Unidas establezca una oficina en Honduras. Hizo la petición a nombre del fraudulento presidente Juan Orlando Hernández, en la disertación del Segmento de Alto Nivel de la vigésimo quinta sesión del Consejo de Derechos Humanos, de la ONU.
En su participación, Agüero expresó - a manera de broma suponemos- la voluntad de Hernández de “promover una gestión accesible, transparente, cercana a todos, esperando que, al afianzar la senda de los derechos humanos, Honduras pueda cambiar su historia y su futuro”.
Como parte de su intervención, que debió ser nominada a un Oscar por guión de comedia o ficción, la canciller dio a conocer los avances significativos que el Estado de Honduras ha logrado en los últimos años en materia legislativa y en el fortalecimiento de la institucionalidad en derechos humanos.
Reseñó las legislaciones aprobadas por el gobierno de Honduras a fin de garantizar el respeto de los derechos humanos en el país.
Dentro de estos esfuerzos destacó el “Plan de Todos para una Vida Mejor”, la "política de protección social y la política de desarrollo integral de la primera infancia", que está siendo diseñada con la participación activa de niños, al igual que la política nacional de derechos humanos.
Asimismo expresó el interés de Honduras porque se respeten los derechos humanos de los migrantes en todo el mundo, sin prejuicio de su estatus leal, al igual que permitir el acceso de la niñez a la justicia y a las personas discapacitadas.
La recién creada Ley de Protección del Hondureño Migrantes y sus familiares, así como la Ley contra la Trata de Personas es “un tema de vital importancia para garantizar la defensa de los derechos de los grupos vulnerables”.
La aprobación de estas leyes se realizó como Estado parte de la Convención para la Protección de los Derechos de todos los Trabajadores Migratorios y sus Familiares. Agüero hizo “un llamado a la ratificación universal de éste importante instrumento”.
En su discurso, expresó la importancia que el Estado hondureño adjudica al diálogo y cooperación con el Sistema Internacional de Derechos Humanos, reflejado en el amplio recibimiento de Relatores Especiales de Naciones Unidas, y el dedicado seguimiento a las recomendaciones del Examen Periódico Universal.
En las reuniones programadas y las actividades encomendadas como parte de la vigésima quinto sesión, Agüero fue acompañada por la viceministra de Derechos Humanos, Karla Cueva. En la reunión del Consejo de los Derechos Humanos participaron los cancilleres de 105 países.
Por su parte, y siguiendo la corriente al género de ficción que caracteriza el análisis de los DDHH en Honduras por los organismos oficiales, la Representante de las Naciones Unidas destacó que la apertura de Honduras al sistema internacional de derechos humanos y la "voluntad política" del actual presidente Juan Orlando Hernández, para avanzar en el tema, son muy significativos.
Indicó que esos avances, en el país, después de la crisis política de 2009, son un ejemplo a seguir, y en ese sentido, se comprometió a continuar apoyando a Honduras en materia de derechos humanos, y a buscar financiamiento con terceros países para abrir la oficina solicitada.
Con información de El Heraldo y Proceso Digital
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