No quiero verla como la veo. No quiero verla discriminada por una cultura que le grita que usted es menos y que el hombre es más.
No quiero verla como la veo humillada por una sociedad que siempre le recuerda que usted solo es ama de casa, casa que irónicamente llaman hogar.
No quiero verla como la veo sometida por una religión que le predica que usted es objeto de obediencia y sumisión, que es propiedad privada del hombre con el cual hace vida de pareja.
No quiero verla como la veo siempre doméstica a la orden de los que mandan. No quiero verla atrapada por el paradigma de que usted así debe ser, que el cambio no existe.
No quiero verla como la veo, marginada por una economía que le niega la dignidad que da el empleo. No quiero verla como la veo, utilizada por un sistema de mercado muchas veces usada como instrumento de mercancía y publicidad.
No quiero verla como la veo, a veces solo deseada como objeto sexual y la fantasía, y no con el respeto que merecen las personas. No quiero verla como la veo, muchas veces, siendo mercancía y negocio del tratante de su vida, su cuerpo y su dignidad. Así no quiero verla.
Yo quiero verla libre como la quiere su creador, quiero verla libre de una sociedad en la que solo deciden los que se creen hombres, quiero verla libre de religiones que predican la inequidad y no la equidad, quiero verla libre del trato sexual publicitario y de mercancía. Quiero verla libre, volando como mariposa sin prisas pero sin pausas, volando, luchando por la equidad, sabiendo que no hay iguales, que solo hay diferentes enriquecidas por la diversidad, quiero verla en la perseverancia de la lucha por la equidad de género, y simepre siendo mujer.
Quiero verla mujer, Libre desde la Libertad.
Con mucho cariño; Manuel Suarez (promotor social ERIC y Radio Progreso)
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