sábado, 12 de diciembre de 2015

Callejas y la corrupción



Otra vez Honduras en la mirada internacional por un nuevo escándalo. La corrupción en el fútbol de Honduras es un secreto a voces, algunos dirigentes, comentaristas y gente ligada al fútbol lo denunciaban tibiamente, algunos buscando algún interés personal y otros que sí estaban realmente preocupados por la suerte que está llevando el fútbol en el país.

Los aficionados y aficionadas al fútbol vieron a Rafael Leonardo Callejas como el gran héroe del país por haber llevado a Honduras a dos mundiales consecutivos, Sudáfrica 2010 y Brasil 2014, tras 28 años de no asistir después del recordado mundial de España 82. Lo que no sabían los seguidores del fútbol es que uno de los grandes ganadores de esos mundiales fue Callejas y compañía, se enriquecieron a base de sobornos y negocios pandos, según la justicia norteamericana.

Ganaron grandes cantidades de dinero sin necesidad de saber pegar a una pelota. Lo que provoca el ¡fútbol! algunos aficionados hasta se han atrevido a justificar esa corrupción porque dicen que con nada se paga haber ido a dos mundiales, y con nada se paga haberle ganado a México en su propio estadio en el denominado “Aztecazo”.

Esa conquista del corazón de los aficionados con dos mundiales, le dieron a Callejas la fuerza para intentar volver al ruedo político y tener la posibilidad de volver a ser presidente de Honduras. Un sueño y una aspiración que con la sacudida del árbol Fifa, se frustró tras caer en manos de la justicia norteamericana.

Rafael Leonardo Callejas y Alfredo Hawit Banegas cayeron juntos porque juntos han estado al frente del fútbol hondureño en los últimos quince años. Pertenecen al mismo partido político y al mismo gobierno que hoy ha declarado estar en la disposición de colaborar con la justicia gringa y cumplir con sus pedidos de extradición.

La sociedad hondureña ha vivido muchos capítulos de su historia con Rafael Leonardo Callejas como actor principal. Éste último, algunos lo viven hasta con sentimientos de satisfacción porque la justicia hondureña, secuestrada por los dueños del país, no tuvo nunca la capacidad de aplicar justicia al presidente que más se ha señalado por corrupción como Rafael Leonardo Callejas, que exhibió por los medios de comunicación la colección de cartas de libertad que los manipuladores del sistema le otorgaron.

Callejas tiene sus horas contadas en el país, la joya del partido nacional ha sido pedido por Estados Unidos que ya lo traía en la mira hasta “desvisarlo” por su actuaciones poco transparentes. Las temidas cárceles gringas se preparan para recibir a otro huésped hondureño.

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