A cuarenta de los 68 jóvenes, que según testigos fueron víctimas de permanentes torturas por parte de militares de la “105 Brigada de Infantería”, se les desarrolló este día la audiencia inicial en los tribunales sampedranos. La Fiscalía y un abogado privado los están acusando de saqueos en varias tiendas de San Pedro Sula, al norte de Honduras, hecho suscitado el pasado 01 de diciembre.
Sin embargo, la mayoría de los familiares de los acusados aseguran que esto es parte de una campaña del Gobierno de Juan Orlando Hernández, para criminalizar la protesta social que se lleva a cabo en el país, en contra de lo que denominan el fraude electoral que favorece al mandatario.
Las audiencias se desarrollaron durante todo el día en el juzgado de lo penal, sin embargo, argumentando, las tomas de carretera que se llevan a cabo en las diversas regiones del país, las autoridades determinaron que los 40 acusados que permanecen en la penitenciaría de Ilama, Santa Bárbara, no comparecieran ante el juez correspondiente.
Abogados de diversas organizaciones de derechos humanos, se hicieron presentes a las audiencias para actuar en defensa de los detenidos. En algunos de los casos el juzgado modificó el delito de robo agravado a encubrimiento, porque la Fiscalía no aportó pruebas de que las personas acusadas hayan sustraído directamente los artículos.
En la mayoría de los casos la Fiscalía acusó a los jóvenes de robo agravado, pero no ha presentado las pruebas de medios de intimidación y dolo para que se tipificara ese delito. Por su parte la mayoría de los familiares de los jóvenes, aseguraron que el día de su captura, ellos venían de trabajar y fueron detenidos en las calles sampedranas cuando se dirigían a tomar el transporte para llegar a sus casas.
Víctimas de Torturas
“Toda la noche del 01 de diciembre fuimos víctimas de golpes por parte de los militares. Nos sacaron para un campo de futbol, y nos hincaron con las manos para arriba, luego con un cable de luz nos pegaban fuerte en la espalda”, indicó una de las personas que logro salir en libertad el 02 de diciembre.
A renglón seguido dijo que él estuvo en el grupo que iniciaron las torturas a las 8 pm y finalizaron a las 2:00 am. “Estaba lloviendo y los militares encapuchados también nos pegaban patadas en las espalda, nos daban palmadas fuertes en los oídos y algunos con los toletes nos pegaban en el estómago y las costillas”, indicó.
“La mayoría somos personas trabajadoras y nos capturan no sé por qué. En mi caso yo venía en mi bicicleta de trabajar y usted lo puede constatar porque lo único que cargaba era mis pailas donde cargo mi comidita. Yo me sorprendí al ver a las personas que llevaban todo tipo de electrométricos, y la policía y militares no los detenían, pero se fueron a ensanchar con las personas que pasamos en ese momento por esos lugares”, manifestó.
Otro de los jóvenes que salió libre el mismo día, mostro las señales de tortura que sobresalen en su espalda, estómago, pecho, piernas y rostro. “A nosotros nos sacaron a las cancha desde las 12 de la noche y nos amarraron de pies y manos, luego nos decían que corriéramos y como no podíamos entonces ellos nos pegaban patadas por todos lados”, indicó.
Dijo que después de dos horas los colocaron hincados con las manos para arriba hasta las 6:00 am, pero en el transcurso de esas horas recibieron todo tipo de golpes. “Algunos arrojaban sangre y nos decían que éramos unos perros y que nos iban a matar”.
“Los que tenían mayores golpes fueron las personas que mandaron para los centros penales y estoy seguro que hoy no los trajeron a la audiencia porque los medios de comunicación los iban a ver todos golpeados”, indicó.
“Aquí ya no somos tontos, mi hijo y muchos muchachos fueron detenidos cuando venían del trabajo para justificar los “toques de queda de JOH” (estado de sitio), y hoy los están acusando de robo agravado. Mi pregunta es ¿por qué no capturaron a los verdaderos responsables del saqueo de los negocios? ¿Quién los mandó y por qué lo hicieron? Esas preguntas tienen que responderlas la policía y los militares”, denunció la madre de uno de los jóvenes detenidos.
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