La oposición hondureña denunció que actas de votación fueron duplicadas por el TSE y que portavoces internacionales intentan fragmentar la unión del candidato Salvador Nasralla.
El partido opositor hondureño la Alianza de Oposición contra la Dictadura, encabezado por Salvador Nasralla, presentó el pasado martes ante representantes de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (UE), órganos de observación internacional, pruebas de que él ganó la presidencia del país y que hubo fraude en el proceso de conteo de votos tras las elecciones del 26 de noviembre.
“Es un fraude sistémico que no se había experimentado en ninguna parte del mundo (…) no importa si declaran a Juan Orlando (Hernández) como presidente, vamos a luchar hasta que se den cuenta que el pueblo hondureño quiere un cambio”, sostuvo el candidato presidencial.
Entre las pruebas consignadas, está un informe que detalla las irregularidades electorales cometidas por el Tribunal Supremo Electoral (TSE) y un archivo digital con más de 14.364 en las que, a su juicio, se demuestra la manipulación de los comicios presidenciales a favor del actual mandatario, Juan Orlando Hernández.
A través de sus redes sociales, el dirigente compartió un mensaje en el que denuncia que el órgano electoral contrató una imprenta para duplicar las actas que no pudiesen ser transmitidas por Internet el día de las votaciones.
Esta es una de las 5759 actas que la imprenta que contrató el TSE imprimió en duplicado de 2 originales por si el PN las ocupaba para el fraude. Hicieron en octubre actas duplicadas correspondientes a todos los lugares desde donde no se podía transmitir por Internet el 26/11.
El director de comunicación de la organización, Manuel Díaz Galeas, expresó: “(…) Estamos impugnando el conteo (…) a efectos de que esos conteos se declaren nulos y vuelvan a contarse para que con el nuevo conteo demostrar que Salvador Nasralla ganó las elecciones”.
La Alianza considera que el TSE está “al servicio de la reelección” de Hernández. Por ello, pide un árbitro internacional, “imparcial y objetivo”, para que realice el escrutinio de las más de 18.000 actas y cuadernillos electorales.
Tras la presentación de la documentación, el TSE tiene plazo hasta el 26 de diciembre para proclamar al nuevo presidente del país, así como a los diputados y alcaldes.
Los anuncios de decretar a Hernández como ganador ha desencadeno múltiples denuncias de fraude en la sociedad hondureña que han provocado protestas y han dejado al menos siete fallecidos y decenas de heridos.
Golpe contra Zelaya
El día de la transmisión de los datos hubo un “apagón” del sistema del conteo electoral. Antes de la interferencia, Salvador Nasralla encabezaba el conteo por cinco puntos; luego de ésta, apareció Juan Orlando Hernández como favorito.
De acuerdo a señalamientos de medios locales, este fraude presenta semejanzas con el golpe de Estado perpetrado en 2009 contra el entonces presidente Juan Manuel Zelaya.
En aquel momento, la acción fue orquestada por la cúpula de las Fuerzas Armadas, en complicidad con el Poder Judicial. Fue recibido de buena manera por el gobierno estadounidense: los medios de comunicación difundieron la idea de que Zelaya había firmando una carta de renuncia, mientras que la verdad era que había sido secuestrado y llevado a una base militar.
Denuncias de intervención
El expresidente Manuel Zelaya denunció que portavoces de la OEA recomendaron a Nasralla que se desvinculara por completo del expresidente Zelaya pues éste “es chavista y pregona el socialismo democrático”, denunció
Por su parte, la encargada de Negocios de la Embajada de EE.UU. en Honduras, Heide Fulton, instó el pasado domingo a los hondureños a aceptar los resultados que señalan a Hernández como ganador.
Estas declaraciones causaron alarma en países de la región, quienes advirtieron que la OEA está operando como un brazo promotor del fraude de Estados Unidos en Honduras.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, advirtió que “detrás del fraude en Honduras está el gobierno imperialista de los Estados Unidos”, mientras que el presidente de Bolivia, Evo Morales, señaló que el secretario general de la organización y el jefe de la misión en el país tienen relación directa con lo que califica como “golpe”.
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