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Dejando a un lado el combate político entre el Partido Nacional y la oposición no queremos dejar pasar por alto uno de los elementos fundamentales del proyecto de Juan Orlando Hernández que está queriendo impulsar en el país: convertir a Honduras en el Corredor Logístico de Centroamérica. Y esto se realizará a base de “megaproyectos” en toda la geografía nacional. Ha sido el propio presidente de la república quien en una amplia rueda de prensa lo ha dado a conocer.
Uno de los pilares será la creación de infraestructura de carreteras a nivel nacional y que son designados como “corredores”. Entre ellos se puede mencionar el “Corredor de Occidente” con 331.4 kms, el “Corredor Logístico” con 405 kms entre Puerto Cortés y Goascorán, el “Corredor Turístico” de 201.3 kms entre la Ceiba y La Barca, el “Corredor Central” de 257.5 kms entre Río Dulce y Olanchito, el “Corredor Atlántico” de 134.99 kms entre la Ceiba Saba Corocito, el “Corredor Agrícola” de 473.87 kms entre Puerto Castilla y Tegucigalpa y el “Corredor Pacífico” de 315.60 kms entre Tegucigalpa-Amatillo-Jicaro Galán- Coyolito-El Espino-Guasaule.
JOH plantea pues la necesidad de siete “corredores”, dos puertos marítimos (Puerto Cortés y Amapala) y un aeropuerto internacional para que Honduras se convierta en el Centro Logístico de Centroamérica. En carreteras habrá una inversión de mil trescientos millones de dólares ( 28,600 millones de lempiras) de los cuales el 65% está en ejecución o por ser adjudicados. El 35% restante se gestiona con instituciones de crédito internacional o mediante alianzas público-privadas.
El “complejo carretero” de unos dos mil doscientos kilómetros unirá al país desde todos los puntos que están conectados con los puertos de Amapala y Puerto Castilla. De igual manera este sistema de vías de comunicación comunicará con el aeropuerto de Palmerola que ha sido concesionado para su modernización. Y la razón de fondo es que “todas estas obras suponen una competencia con el Canal de Panamá”, que se encuentra en una fase de ampliación, y con el soñado Canal Interoceánico de Nicaragua”.
Teniendo esto presente entendemos la inauguración del aeropuerto en la ciudad de Tela para conectarse con todo el país: “la belleza de sus playas, su riqueza natural y la calidad de su gente, se combinan ahora con un moderno aeropuerto”. Es la tercera pista que inaugura después de la de Gracias, Lempira y la de Río Amarillo de Santa Rita en las cercanías del Parque Arqueológico de Copán Ruinas.
Va en la misma línea la ceremonia de colocación de la primera piedra para iniciar el Corredor Turístico de Santa Rita (Yoro) con una inversión de 287 millones de dólares. Comprende también los puentes de La Democracia y el de Santa Rita que recuperará los servicios de los tramos San Pedro- El Progreso, Tela-La Barca- El Progreso y Tela-La Ceiba. La presencia de todos los alcaldes da una idea de la importancia que le otorgan estas ciudades.
Los empresarios, participantes activos en este proyecto, han sugerido la necesidad de agilizar la seguridad jurídica para los inversores debido a que los conflictos políticos actuales pueden entrar en contradicción con los planes de JOH.
En la euforia presidencial con la inauguración de alguno de estos proyectos afirmaba que “Honduras se va a convertir en uno de los centros logísticos más importantes de Centroamérica. Es una alegría para Honduras. Estamos comenzando a construir el sueño hondureño”.
Escuchando al presidente JOH entendemos perfectamente cuál es su objetivo, la búsqueda de protagonizar el liderazgo presidencial a nivel de la región y su presencia en todo tipo de foros. Siempre queda como interrogante saber a qué sectores sociales va orientado su proyecto, quienes serán sus aliados estratégicos, quiénes se beneficiarán y quiénes se quedarán por fuera. Y, sobre todo, tener la certeza que servirá para mejorar los índices económicos y sociales del país.
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