jueves, 4 de junio de 2015
KPFT, Radio Pacífica Houston: 45 años de defensa de los derechos civiles
Por Amy Goodman, con la colaboración de Denis Moynihan *
Boligán
El 13 de mayo de 1970, el periódico Houston Chronicle titulaba: “Atentado con bomba saca del aire a Radio Pacífica”. KPFT, la flamante radio comunitaria de Houston, había estado en el aire apenas dos meses cuando hicieron volar su transmisor en pedazos. George Rosenblatt, del Houston Chronicle, escribió en aquel momento: “La explosión que destruyó el transmisor de la radio KPFT FM de Houston (Radio Pacífica) no fue un accidente, sino aparentemente el accionar de expertos, afirmaron hoy las autoridades”. Rosenblatt añadió: “La explosión ocurrió el martes a las 11 de la noche en el momento en que la radio estaba pasando la canción de Arlo Guthrie “Alice’s Restaurant”. En el preciso instante de la explosión se escuchaba a Arlo Guthrie cantar: “matar, matar, matar”, como si se tratara de una broma”.
Sin embargo, el ataque contra la radio no fue ninguna broma. Alguien colocó dinamita y destruyó el transmisor. El equipo de la radio y un grupo de voluntarios reconstruyeron el transmisor y lograron que la emisora volviera al aire, esta vez con el transmisor protegido por una caseta de cemento reforzado. No obstante, pocos meses después, en octubre de ese mismo año, atacantes anónimos destruyeron nuevamente el transmisor. Esta vez utilizaron 15 cartuchos de dinamita en lugar de solo uno. KPFT es, al día de hoy y afortunadamente, la única emisora de radio en la historia de Estados Unidos que ha sido víctima de un atentado con bomba.
La recuperación tras la segunda explosión, que fue más grave, llevó más tiempo. Cuando la emisora volvió al aire en enero de 1971, Arlo Guthrie estaba en Houston y terminó de tocar en vivo, en el estudio de la radio, su famosa canción “Alice’s Restaurant”, que estaba sonando al aire cuando la radio fue atacada por primera vez. KPFT sufrió dos atentados, pero los ataques lograron algo que la emisora, que carecía de presupuesto para publicidad, no habría podido lograr por sí sola: las explosiones hicieron que la radio quedara grabada en la conciencia de su potencial audiencia en Houston.
Una investigación realizada después de los atentados con bomba dio lugar al procesamiento de Jimmy Dale Hutto, el Gran Dragón de la organización local del Ku Klux Klan. Hutto dijo que hacer estallar el radiotransmisor de KPFT había sido el acto de su vida del que se sentía más orgulloso. Al pensar en la rica trayectoria de Radio Pacífica, no resulta sorprendente que un grupo que incitaba al odio como el KKK la atacara. Radio Pacífica brinda un espacio público a las personas para que hablen por sí mismas, rompiendo con los estereotipos y el fanatismo que alimentan el odio.
Radio Pacífica fue fundada por Lew Hill, un pacifista que se negó a combatir en la Segunda Guerra Mundial. Cuando salió del campo de detención en el que había permanecido encerrado durante la guerra, dijo que Estados Unidos necesitaba un medio de comunicación que no fuera propiedad de las empresas que lucran con la guerra, sino de los periodistas y artistas. Como dijo el difunto George Gerbner, ex decano de la Facultad de Comunicaciones Annenberg de la Universidad de Pensilvania: “Las empresas no tienen nada que decir, pero sí todo para vender, y son las que están criando a nuestros hijos hoy”.
KPFA, la primera emisora de Radio Pacífica, comenzó a transmitir en Berkeley, California, el 15 de abril de 1949. Radio Pacífica intentó algo que nadie pensó que podría funcionar: construir una red de emisoras basada en la financiación voluntaria de los oyentes, un modelo que más adelante adoptaron todas las emisoras públicas de radio y televisión de EE.UU. La red de Pacífica creció hasta llegar a tener cinco emisoras: KPFA en Berkeley, KPFK en Los Ángeles, WBAI en Nueva York, WPFW en Washington y KPFT en Houston.
Las radios de Pacifica dieron importantes primicias y nunca temieron a la polémica, especialmente cuando se trata de cubrir temas relacionados con los movimientos sociales. Luminarias del movimiento por los derechos civiles, como Paul Robeson y Harry Belafonte, eran invitados asiduos de estas emisoras. La red Pacífica transmitió un debate entre Malcolm X y el escritor afroestadounidense James Baldwin sobre el valor de los actos de desobediencia civil no violentos. En 1965, la emisora de la red Pacífica en Nueva York, WBAI, envió al periodista Chris Koch a Vietnam del Norte, convirtiéndose en el primer medio estadounidense en tener un corresponsal informando sobre la guerra desde la perspectiva norvietnamita. Músicos de la talla de Bob Dylan y Jerry García, de Grateful Dead, realizaron sus primeras actuaciones en vivo en emisoras de la red Pacífica.
Cuarenta y cinco años después de los atentados, KPFT sigue transmitiendo en Houston y sirve a la población como referencia de puntos de vista alternativos y foco de difusión de las noticias y la cultura locales. Algunas personas dicen que los atentados no se investigaron en profundidad debido a la relación cercana entre el Ku Klux Klan local y la policía de Houston. En la actualidad nos enfrentamos a una crisis de discriminación racial y persecución policial de jóvenes afroestadounidenses, que ocurre con aparente impunidad. A pesar de que la actividad de los grupos que incitan al odio ha aumentado considerablemente desde que Barack Obama fue electo presidente, a lo largo de varias décadas se han logrado cambios más importantes y duraderos.
Cinco años antes del atentado con bomba contra KPFT, el 26 de febrero de 1965, Martin Luther King Jr. habló en el Templo de Israel en Hollywood, California: “Venceremos. En lo más hondo de mi corazón creo que venceremos. Y lo creo porque, de alguna manera, el arco del universo moral es largo, pero se inclina hacia la justicia. Venceremos porque Carlyle tenía razón: una mentira no dura por siempre. Venceremos porque William Cullen Bryant tenía razón: ‘la verdad que cayó abatida se alzará otra vez’”. KPFT, la emisora de Radio Pacifica en Houston, fue abatida dos veces en 1970, pero volvió a alzarse una y otra vez durante 45 años y ha estado utilizando las frecuencias de radio públicas para contribuir a que el arco del universo moral se incline hacia la justicia.
Traducción al español del texto en inglés: Mercedes Camps. Edición: María Eva Blotta y Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org
* Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 800 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 450 en español. Es co-autora del libro "Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos", editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.
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