La Policía Militar hizo gala de sus técnicas represivas lanzó gases lacrimógenos dentro del hemiciclo legislativo y toleteó a diputados del Partido Libertad y Refundacion entre ellos a Mel Zelaya y también a Xiomara Castro.
Tenían orden de entrar sin miramientos, lanzaron toletazos a todo lo que se movía.Es una de las primeras acciones dentro del Congreso Nacional después de la ocurrida en las afueras de ese poder del Estado el 12 de agosto de 2009 cuando más de 20 personas fueron salvajemente torturadas después de que los cuerpos represivos emboscaron una protesta contra el golpe de Estado. A los policías y COBRAS responsables les fueron sobreseidos sus casos después de que se inició una denuncia en el Ministerio Público por las víctimas, hoy gozan de total impunidad.
Este martes 13 de mayo la Policía Militar, creada por Juan Orlando Hernández para sostenerse en el poder, estrenó además nuevas bombas lacrimógenas que al lanzarlas salen unas chispas y suenan a disparos.
Claudia Garmendia, diputada de LibRe por el departamento de El Paraíso se desmayó producto de los gases lacrimógenos y se encuentra en una clínica recuperándose, y otras dos personas están en la Cruz Roja Hondureña, según datos proporcionados.
En las afueras del Congreso Nacional y calles aledañas los Policías Militares y unos pocos preventivos lanzaron bombas lacrimógenas contra los cuerpos de las personas que lograban esquivarlas para no ser golpeadas. Los uniformados dejaron impregnado de gas lacrimógeno varias cuadras cercanas al Poder Legislativo.
Esta acción de Juan Orlando Hernández a través de sus cuerpos represivos deja bien claro que no hay espacio para la tolerancia y el diálogo.
Sin embargo se pudo ver a un pueblo que ya no le teme a la represión y que está dispuesto a luchar.
Las acciones represivas se extendieron por varias horas desde las tres de la tarde en que estaba convocada una protesta de apoyo a los diputados y diputadas de LibRe, durando hasta pasadas las siete de la noche. (Por Dina Meza)
La orden desde el Congreso Nacional fue reprimir toda acción de la oposición
El presidente del Congreso Nacional, Mauricio Oliva dio la orden para reprimir con brutalidad al partido de oposición Libertad y Refundación (LibRe) y a los activistas y dirigentes que se manifestaban pacíficamente en los bajos del Congreso Nacional.
La orden del día fue represión y violencia expresaron diputados de LibRe. Las acciones violentas protagonizadas por agentes del Estado dejaron a varios diputados y diputadas hospitalizadas y a decenas de manifestantes con golpes de gravedad producto de la brutalidad con que actuaron efectivos antimotines y policías-militares.
Alrededor de las 4:00 de la tarde un fuerte contingente de policías militares, policías del Comando de Operaciones Especiales (COBRA) y efectivos militares ingresó al salón de sesiones del Congreso Nacional, ocupó posiciones estratégicas dentro del gran salón, rodeó a los diputados y diputadas del partido LibRe y procedió a utilizar toletes, bombas lacrimógenas y escudos para agredir, empujar y maltratar golpear a los representantes del pueblo.
No hubo ningún tipo de consideración para nadie, incluso diputadas como Claudia Garmendia diputada del departamento de El Paraíso sufrió la embestida de los militares de tal forma que rodeó por el piso y fue rescatada por uno de sus compañeros diputados.
El ex presidente Manuel Zelaya al ser expulsado a empellones y golpes del segundo nivel del Congreso Nacional, donde preside la bancada de 36 diputados del partido LibRe, expresó: "son bestias los que gobiernan Honduras".
Para luego añadir con tristeza que "han bastado cien días para que nos muestren los colmillos, el presidente Juan Orlando Hernández, no será reelecto como gobernante ya que su dictadura la rechazará el pueblo hondureño".
Por las calles del centro histórico se respiraba humo y gas pimienta en cantidades industriales, y mientras la gente cubría sus bocas con pañuelos, otros eran perseguidos y golpeados por los uniformados.
El parque central fue nuevamente escenario de un combate campal entre manifestantes y policías pero en condiciones desproporcionales. Muchos de los protestantes salieron heridos de consideración productos de los golpes que recibieron de parte de la policía militar y del orden público.
La diputada Claudia Garmendia fue hospitalizada por los golpes y gases recibidos dentro del salón de sesiones del Congreso Nacional, también las diputadas Elvia Argentina Erazo (Copán) y Audelia Rodríguez (Atlántida).
Los diputados Hari Dixon, Rafael Alegría, Wilfredo Paz fueron golpeados. La Cruz Roja trasladó al Hospital Escuela a varias personas desmayadas y lesionadas.
El partido LibRe convocó desde hace varios fías a una manifestación pacífica en los bajos del Congreso Nacional para exigir que se incluyan representantes de la segunda fuerza política del país como es Libertad y Refundación con 36 diputados ante el Tribunal supremo Electoral. La exigencia encontró respuesta del presidente del Congreso Nacional Mauricio Oliva al expresar que LibRe debe conseguir 86 diputados para lograr la inclusión.
Y la otra respuesta de Oliva se concretó esta tarde al ordenar una brutal represión contra los opositores políticos, activistas y dirigentes de LibRe.
La situación es preocupante para organismos de derechos humanos al considerar que mañana llegarán al Congreso Nacional organizaciones ambientalistas para demandar que cesen las concesiones extractivas de los recursos minerales del país.
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