Por Marvin Palacios
El vocero del Movimiento Campesino de San Manuel, Cortés (MOCSAN), Ricardo Domínguez estuvo a punto de morir el miércoles de esta semana, cuando a las 9:15 de la mañana, 3 sicarios lo interceptaron en el parque Ramón Rosa de la ciudad de El Progreso, departamento de Yoro.
En comunicación que sostuvo con el programa radial "En La Plaza" de Radio Globo, Domínguez narró que mientras él se encontraba con una amiga, un individuo llamó por celular y minutos después llegaron al lugar en un vehículo pick olor blanco, 2 hombres jóvenes fuertemente armados que se acercaron hasta donde él se encontraba.
Al momento Domínguez se retiró del lugar y pidió auxilio a unos guardias de seguridad que cuidan un centro comercial. La acción hizo que los individuos optaran por retirarse de la escena.
"Los guardias pudieron defenderme, porque si no me hubiera muerto, gracias a Dios que é está con un pueblo que es justo y no se produjo ningún hecho lamentable, pero sí se puede ver que sicarios andan tras los campesinos queriéndoles dar muerte", expresó el vocero del MOCSAN.
Añadió que de las 3 personas, "dos eran jóvenes y la otra, un señor que el perfil de cara es igual a Clother (jefe de seguridad de la compañía azucarera (CAHSA), ellos estaban queriéndome dar muerte el día de ayer (miércoles 22 de mayo), hay una persecución contra mi vida, pero gracias a Dios que los guardias de seguridad me dieron protección y me pude salvar".
Al parecer el que anda ahí queriéndome dar muerte yo sé que es un familiar del señor Clother, porque el perfil de la cara es idéntico a él, nada más que en el físico es un poquito más gordo y los 2 muchachos son sicarios, porque pude observar cuando se avalanzaron sobre mí, taparon sus armas y yo corrí y gracias a Dios metí la mano en mi mochila, queriendo decir que yo andaba armado y eso me pudo salvar, había un policía y yo le grité, pero no me auxilió, entonces corrí y me metí a un centro comercial, comentó Domínguez.
Ricardo Domínguez estuvo presente y brindó declaraciones el lunes 20 de mayo, durante una conferencia de prensa desarrollada en la Vía Campesina en la capital, en donde varias organizaciones como el Movimiento Campesino de San Manuel, Cortés (MOCSAN), Vía Campesina y el Movimiento Campesino Unificado del Aguán (MUCA) condenaron las muertes violentas de dos campesinos en San Manuel Cortés, ocurrida el viernes 17 de mayo perpetradas por guardias de seguridad de la Compañìa Agrícola Hondureña (CAHSA).
Ese mismo día otra de las afiliadas al MOCSAN, identificada como Marilú Miranda Orellana fue acribillada por 4 sicarios a primeras horas de esta mañana.Miranda Orellana fue asesinada a las 7:30 de la mañana por desconocidos que le dispararon en varias ocasiones, mientras ella abandonaba el campamento en donde se encontraba para visitar a sus hijos en El Progreso, Yoro.
Con la muerte violenta de Marilú Miranda Orellana, suman 3 los campesinos asesinados en las ùltimas horas, ya que el pasado viernes en horas de la tarde, mientras unos 500 campesinos y campesinas del MOCSAN procedían a recuperar las tierras otorgadas por el instituto Nacional Agrario (INA) en San manuel Cortés fueron atacados a tiros por guardias de seguridad de la empreasa CAHSA.
Producto del ataque, resultaron muertos los campesinos Valentìn Avelar Caravante y Celso Ruíz y con heridas de gravedad, Adolfo Melgar Melgar y Santos Aníbal Melgar, quienes se debaten entre la vida y la muette en el hospital Mario Catarino Rivas de San Pedro Sula.
En un pronunciamiento distribuido a la prensa el MOCSAN aclaró que tanto ellos como la Asociación para el Desarrollo Campesino de El Progreso (ADCP) no son invasores o invasoras de tierras, puesto que las tierras en recuperación pasaron a formar parte de la reforma agraria a favor del campesinado.
Las tierras recuperadas por el MOCSAN, fueron expropiadas por el estado de Honduras a la empresa CAHSA. La expropiaciación se produjo en marzo de 2012, por lo que no se justificaba un desalojo en la zona ya que existe un fallo emitido por la Corte de Apelaciones de San Pedro Sula con fecha 6 de marzo de 2013, en el cual admitió el recurso de amparo interpuesto por los campesinos y campesinas con suspensión del acto reclamado, sin embargo la empresa azucarera obvió la disposición legal existente.
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