Diálogo con la hondureña Miriam Miranda sobre el legado de Chávez y la Honduras post-golpe de Estado.
Como una de las representantes de las organizaciones populares de Honduras, Miriam Miranda estuvo presente en el X Encuentro Internacional de Artistas, Intelectuales y Luchadores Sociales en Defensa de la Humanidad. Ella es integrante de OFRANEH, la Organización Fraternal Negra Hondureña y de COMPA (Convergencia de Movimientos de los Pueblos de las Americas).
En entrevista concedida a Radio Mundo Real, Miranda destacó primeramente que el proceso bolivariano conducido por Hugo Chávez, además de los logros históricos que ha venido alcanzando, ha generado un temor en la derecha de Venezuela y del mundo debido a “cómo caló profundamente en el sentimiento, en la corazón y en la mente de la gente”, algo que se pudo constatar en las movilizaciones de dolor por su desaparición física y a su vez de apoyo y compromiso a la llamada Revolución Bolivariana.
El hecho de estar en Venezuela, le permitió a Miriam apreciar el valor que tiene la educación y el conocimiento en ese país en la actualidad: “Me quedo impresionada con cómo un Estado invierte recursos en elevar la construcción de pensamiento de su pueblo (...) para que haya una educación no sólo gratuita, sino de calidad. Eso es algo valiosísimo, porque elevar la calidad del conocimiento, la autocrítica, la capacidad de discernimiento de un pueblo, lo ayuda a tomar mejores decisiones, definitivamente.”
Al hablar del golpe de estado que sufrió su país en junio de 2009, la militante lo describe como un mecanismo que es parte de un sistema de apropiación de recursos y de bienes: “el capital transnacional necesita tener Estados fallidos, Estados colapsados, Estados en crisis. ¿Porqué? Por que es la manera más fácil de apropiarse de los recursos. Después del golpe de estado en Honduras nos estamos enfrentando a una vorágine de aprobación de leyes por parte del Congreso Nacional para poder entregar los recursos al capital transnacional”.
La integrante de OFRANEH destacó la transparencia de las elecciones en las que por última vez ganó Hugo Chávez (aún no habían sido celebradas al momento de la entrevista las elecciones en las que salió electo presidente Nicolás Maduro), afirmando que en ellas “se le abrió las puertas a todos los que quisieran ser observadores y observadoras y ni la derecha nacional, ni la internacional pudieron cuestionar los resultados.”
En cambio para ella, en su país no es posible “ni soñar” con lograr algo similar en las próximas elecciones presidenciales en Honduras, previstas para el 24 de noviembre de este año. Según afirmó, a partir del golpe de Estado en su país, “la oligarquía maneja y controla todos los poderes del Estado. Todos los estamentos del Estado que podrían garantizar una transparencia en el proceso electoral, el Tribunal Electora, la Suprema Corte, son objeto de un control profundo de la derecha hondureña.”
Ante este escenario, la militante expresó que la apuesta de su organización es a fortalecer la resistencia y el poder local, dando prioridad a las alianzas desde las comunidades. Así comentó que las organizaciones y movimientos sociales hondureños se encuentran en un proceso de convergencia refundacional, con miras a que en el mediano plazo se pueda instalar una Asamblea Nacional Constituyente.
La entrevista completa se encuentra en el audio adjunto.
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