Por Tommy Morales
Cada una de las mujeres tiene una historia unas más complicadas que otras, las hay desde princesas hasta cenicientas, pero todas con algo que expresar.
Sandra una mujer de 28 años, con una vida poco común, vivía con su madre y su hermana, se caso llena de ilusión, salió embarazada pero por azares del destino su esposo fue asesinado, unos meses después dio a luz a su pequeña.
Pasados más de un año la niña empezó a presentar problemas del corazón, fue trasladada al Hospital Escuela y como a muchos le dijeron que no tenía remedio, la infanta murió en una cama del centro asistencial.
Tiempo después su madre que tenia un negocio empezó a recibir la fatídica visita de extorsionadores, la mujer se negó a pagar el impuesto de guerra, lo que causo que un día cegaran su vida, hace siete años, ¨mi madre era una mujer luchadora, emprendedora¨, expreso Sandra.
Luego tres hombres abusaron de la hermana de catorce años de Sandra, en ese momento encontró el valor necesario para denunciar los dos hechos, pero ella no sabe como los malvivientes se dieron cuenta y comenzaron a amenazarla, lo que la obligo a abandonar su pueblo natal, para esconderse.
Con la ayuda de organizaciones pudo sacar a su hermanita del barrio donde habitaba y le dieron ayuda psicológica, después de todo el proceso de denuncia y el protocolo que se sigue absolvieron a los hechores, aun contando con todas las evidencias, ¨realmente ellos tenían dinero, uno era dueño de transporte¨, señalo Sandra.
Desde esa fecha Sandra ha tenido que andar de un lugar a otro, volvió a enamorarse y se acompaño dos años después de la muerte de su madre, salió nuevamente embarazada, desafortunadamente su bebe murió en su vientre, se fue para el Hospital Escuela, pero le dijeron que no había cupo para operarla, así que tuvo que andar a su niña muerta dentro de ella por un periodo de dos semanas, a pesar que los médicos sabían que estaba muerta, por denuncias de su suegra la operaron en noviembre; se hizo la citología en febrero del año siguiente en la que el diagnóstico fue un Nic Dos (cáncer en la matriz).
¨Yo decidí operarme de la matriz, los médicos me decían de que estaba muy joven, que como me iba a quedar sin hijos, que las mujeres sin hijos no son mujeres, a mi pesar dije como voy a dar una vida a cambio de la mía, me opere¨, manifestó Sandra.
Una vez mas la vida se ensaña, hace dos meses mataron a su pareja, ni siquiera pudo ir al velorio, ni a su entierro, ya que la familia no se pudo comunicar con ella, ¨estaba sin teléfono porque no tenía dinero para comprarme uno¨ dijo la fémina.
¨Una anda de un lugar a otro tratando de sobrevivir, realmente para seguir adelante con la ayuda de Dios, las organizaciones que me han ayudado, llevar mi vida de un lugar a otro, estoy como cansada, salgo a la carrera en ocasiones, debido a todo no he podido estudiar, no vivo¨, manifestó Sandra.
Lagrimas salen de sus ojos, su voz se quiebra y se opaca, su sueño es estudiar; pero sus circunstancias la arrinconan, no puede exponerse, no tiene dinero para poder hacer las cosas, miedo, persecución ¨son como cuentas en el banco, allí están¨, dice Sandra.
¨Han acabado con parte de mi, se lo han llevado ellos, porque me han hecho tanto daño, tengo tiempo de no ver a mi familia, mi abuela, no puedo ir a mi casa, no tengo un lugar donde vivir, a veces siento que me pasan muchas cosas malas, Dios sabrá porque¨, Sandra deja ver su sufrimiento en cada palabra que relata, su angustia, su soledad, simula una sonrisa.
¨La esperanza me mantiene viva, un día me voy a dar cuenta que es una pesadilla y es por todas esas cosas que he pasado, que yo he emprendido mi lucha en la defensoría de Derechos Humanos, defendiendo a las mujeres, metiéndome en mas problemas, no pudiendo con los mismos míos, siento el deseo de servir a otras mujeres¨, expreso Sandra.
Tratar de que haya un mundo mejor, aunque sea para otras personas, que Dios me de la respuesta, que va a ser de mi mas adelante dentro de unos años, ante todo le da gracias al creador para salir delante de tanta adversidad, porque solo con el apoyo del altísimo y las compañeras puede salir adelante, concluyo la defensora.
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