martes, 10 de diciembre de 2013
Policías atentan contra estudiante universitario
La rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), Julieta Castellanos, denunció ayer un atentado de miembros de la Policía Nacional contra el universitario Omar Tejada frente a la casa de la señora Aurora Pineda, quien en octubre de 2011 junto a la rectora, perdieron a un hijo cada una en similares circunstancias.
Según el relato de Castellanos, el joven Tejada se dirigía con otro muchacho-de quien no dio el nombre- en carros distintos a las 10:22 de la noche del sábado al cumpleaños de uno de los hijos de la señora Aurora Pineda.
Añadió que cuando ambos llegaron a la intercepción del desvío de la entrada de la colonia América, frente al aeropuerto Toncontín, solo uno de ellos se detuvo en un retén policial y Tejada no atendió el llamado por lo que fue perseguido por unas cuatro patrullas motorizadas.
Castellanos dijo que los Policías interceptaron el vehículo de Tejada frente a la casa de Pineda y comenzaron a disparar hiriendo de bala al muchacho en la espalda y la cadera.
El joven herido siguió conduciendo el vehículo hasta la posta de la colonia Loarque, ubicada en la salida del sur del país, buscando ayuda.
Una patrulla tendió el llamado, y el joven fue llevado hasta la sala de urgencias del Hospital Escuela Universitario (HEU), donde las autoridades aseguraron que le dieron de alta el mismo día.
“Anoche aproximadamente 18 proyectiles estaban en el piso, (hay) un joven que está herido en el Hospital Escuela, afortunadamente los dos disparos que le entran al cuerpo no le tocaron órganos vitales”, dijo la rectora con un tono de indignación.
Fiscalía y Policía
Expresó que inmediatamente se comunicó con las autoridades del Ministerio Público (MP), para que hicieran las investigaciones del caso.
Asimismo, se comunicó con el director general de la Policía Nacional, Juan Carlos Bonilla, para informarle sobre el tiroteo, porque al principio pensó que se trataba de un acto de intimidación, ya que el viernes tuvo una reunión con las autoridades del MP.
Señaló que la señora Aurora Pineda le dijo que a las 2:00 de la mañana llegaron los testigos oculares en dos patrullas y levantaron los casquillos de manera correcta y científica.
Sin embargo, denunció que “después llegó una patrulla de tránsito donde iba supuestamente uno de los policías que disparó en estado de ebriedad y que aseguró que el joven casi lo atropella cuando le hicieron señal de alto”.
Sin depuración
“No tenemos una Policía que le dé garantía a la ciudadanía, no la seguimos teniendo, y en realidad, nosotros hacemos un llamado al doctor (Ramón) Custodio (Comisionado Nacional de Derechos Humanos), para que este caso no sea otro más de los que queda en la impunidad”, señaló la rectora.
De igual forma manifestó que le envió un mensaje al ministro de Seguridad, Arturo Corrales, en el que le expresó que: “señor ministro, estamos con esta emergencia de nuevo, no puede seguir la Policía haciendo lo que está haciendo”.
Castellanos dijo que no hay un verdadero proceso de depuración de la Policía porque continúan operando en la institución agentes que deberían estar fuera.
“Llegó una patrulla de tránsito donde iba supuestamente uno de los que habían andado en los disparos y andaba en estado de ebriedad y le dijo (a Aurora Pineda) que el muchacho que iba manejando casi lo había atropellado”: Julieta Castellanos.
La señora Aurora Pineda es la madre del universitario Carlos David Pineda, quien junto al hijo de la rectora, Julieta Castellanos, Rafael Alejandro Vargas Castellanos, fueron asesinados el 22 de octubre de 2011.
Por este caso, guardan prisión los ex policías José Rubén Pozzo López, Santos Arnulfo Padilla Rodríguez, Wilson Roberto Córdova Rodríguez y Gabriel Donatilo Marcía Hernández.
Por el mismo caso siguen prófugos Carlos Geovanny Galeas y Wilfredo Figueroa Vásquez.
La audiencia para la individualización de la pena en el caso de los cuatro ex policías que están presos se reprogramó para los próximos días en el Tribunal de Sentencia con Jurisdicción Nacional.
La rectora y Pineda aún reclaman que los oficiales que propiciaron la fuga de los policías no han sido enjuiciados, lo que fomenta la impunidad que le está haciendo daño al país.
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