Por Galel Cárdenes
Al momento en que el TSE ha declarado candidato ganador de estas elecciones 2013 (“estilo Honduras”) a JOH del Partido Nacional, establecido —en sus recuentos fraudulentos— los porcentajes de los resultados, declarado cuáles y cuántos son los diputados electos, las corporaciones municipales, y realizada la manifestación contra el fraude convocada por el FNRP y LibRe, se pueden realizar muchos análisis, de muy diferentes naturalezas y objetivos, mismos que surgirán poco a poco cuando la serenidad vaya acogiendo los pensamientos políticos e ideológicos de quienes tienen en su haber las posibilidades de hacerlo con muy diversas herramientas.
Entre tanto, después de haber denunciado el fraude, demostrado con pruebas fehacientes todo el andamiaje y su sistema blindado de protección legal, política (nacional e internacional) y militar, en los medios de comunicación alternos y de oposición al sistema político dictatorial que experimentamos por lo menos en este corto período 2009-2013, se debe visualizar las conquistas de un partido de año y medio de existencia con un pueblo en pie dispuesto a la liberación nacional.
Nacido el partido LibRe en las calles cuando se fundó el FNRP, contra el golpe de Estado (2009) que se ha convertido en un sistema de gobierno, disfrazado cuando la élite así lo requiere o manifiesto cuando así lo designen las fuerzas fáctico mediáticas, hoy en este momento, el Partido tiene varias conquistas que son muy importantes en el avance hacia la gran meta que haremos de cumplir en el decurso de la dialéctica histórica que nos dicta muchas enseñanzas, como aquella de que las revoluciones se gestan, se organizan, se desarrollan a lo largo de tiempos específicos venciendo poco a poco las dictaduras correspondientes.
La realidad nos dicta que hemos sufrido un atentado a la democracia mediante el más escandaloso fraude montado hasta el momento. No se debe desestimar que lo que ha ocurrido es un plan específico que se ha fraguado en el Departamento de Estado, con todos los detalles pertinentes, plan que ha sido implementado en México, Guatemala, Chile, África, Asia, etc.
Pero bien, ese es un tema que habría la necesidad de abordar específicamente para conocer las fuerzas del mal, la perversidad y la deshumanización contra las cuales luchamos.
Hemos logrado al menos una cantidad de diputados, alcaldías y corporaciones municipales, con un recaudo no tan despreciable. Tal vez porque el enemigo tomó como objetivo fraudulento el gane del nivel presidencial y no así otras perspectivas que corresponden al nivel de diputados y corporaciones municipales.
Hemos entonces —como partido— avanzado hasta obtener 39 diputados en el Congreso Nacional, con este capital diputadil se habrá de prever diversas alianzas con las otras fuerzas opositoras, cuando así lo requiera la patria misma.
Si las fuerzas de LibRe, PAC y P. Liberal, confluyeran en la toma de la dirección de Congreso Nacional, habría un importante avance en uno de los poderes más destacados de la república, por su papel legislador que deroga o aprueba leyes con una justicia social determinada.
De este modo se puede considerar que el partido Liberal en el Congreso Nacional constituye el fiel de la balanza. Y su decisión de alianzas con las fuerzas opositoras al régimen podría determinar varios problemas políticos muy importantes.
El Partido Liberal podría seguir aliado al Partido Nacional en su triste y vergonzoso papel de comparsa, complicidad y confabulación contra los intereses de un pueblo que ha sido agredido por todas las políticas neoliberales que implementó JOH en el Congreso Nacional, mediante una política de compraventa utilizada para dictar leyes que siempre agredieron la dignidad del pueblo tanto que llevó a este poder a una dictadura legislativa nunca antes conocida en el país.
El Partido Liberal tendrá la opción de reivindicar su existencia ante los miles de votantes que siguen creyendo en aquel viejo partido de las filas siempre jóvenes, como se le hacía llamar hace un cierto número de décadas.
Si el Partido Liberal organiza una alianza política en el seno del hemiciclo legislativo, con las fuerzas opositoras al régimen nacionalista, el país tendrá la opción de parar la égida de una política represiva contra las mayorías pauperizadas de la nación.
No es necesario que estas fuerzas opositoras al régimen de fraude, represión y deshumanización, coincidan en sus principios ideológicos, sino más bien en una plataforma de puntos coincidentes acerca de la noción de patria que es necesario re conceptualizar a favor de la honradez, la redención social, la salida de una crisis financiera y productiva sin precedentes, y sobre todo, el rescate de la dignidad de un pueblo que no merece el destino que le ha impuesto el poder fáctico-mediático- político y militar.
El país clama por un cambio de dirección política en los tres poderes del Estado. La nación necesita de un clima de paz, de concordia y de justicia para todos por igual, en donde las serpientes no muerdan los pies descalzos de un pueblo que llora mártires, gremios destruidos, calidad de vida hacía la extrema pobreza, endeudamiento descomunal, salarios y monedas devaluadas que subsumen a la población en un estado de verdadera calamidad pública.
He aquí entonces el nudo gordiano de un poder legislativo que podría colaborar en el re equilibrio de las fuerzas políticas, he aquí entonces, nuevamente, donde debe imponerse la madurez, la honestidad, el compromiso con la patria, y el camino hacia un sendero que conlleve tranquilidad, serenidad, justicia, soberanía, equidad y valores humanizantes, en donde no se imponga el valor de los dólares de compraventa de conciencias, y en donde el individualismo sea la brújula del enriquecimiento ilícito, inmoral y asqueroso.
Todo lo planteado está allí a la espera de un resultado de negociación legislativa proclive a la visión de un país justo, soberano e independiente.
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