Los constantes aumentos de precio de granos básicos, como el frijol rojo y la carne de res, dispararon la inflación acumulada en marzo pasado a 2.95 por ciento, según el informe emitido por el Banco Central de Honduras (BCH).
La población consume dos millones de quintales de frijol rojo, según datos de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG).
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) registró una variación mensual de 0.59 por ciento, porcentaje inferior al de los dos meses precedentes. La variación interanual se situó en 5.79 por ciento.
Impactó mayormente el rubro de alimentos y bebidas no alcohólicas, en gran medida por incrementos de precios en granos básicos, carne de res, pescado entero, camarón, chorizo criollo, leche entera en polvo, productos lácteos, algunas frutas y verduras, margarina, pan molde y cereales.
La especulación en el costo del frijol, se agudizó en el mercado San Pablo de Tegucigalpa donde las cinco libras de ese alimento costaban 80 lempiras. En mercados Las Américas y San Isidro entre otros, valía 70 y 75 lempiras, dependiendo de la calidad.
Lamentablemente en la Feria del Agricultor y del Artesano, ubicado a inmediaciones del Estadio Nacional, ya no venderán frijoles a nivel de sus vendedores afiliados.
Por otra parte, disminuyeron de precio, productos como: carne de pollo y cerdo, huevos de gallina, algunas frutas y hortalizas de temporada, azúcar de caña y café molido.
Combustibles
También pesó el alojamiento, agua, electricidad, gas y otros, en especial por alzas de precio del pago por alquiler de vivienda, del gas líquido LPG y queroseno, así como por el alza en el ajuste por combustibles a la tarifa residencial de la energía eléctrica.
El rubro de Transporte, contribuyó en el índice de inflación por alzas en el precio de las gasolinas súper y regular, diésel, llantas y baterías para autos, vehículos, aceite para motor de vehículos, cambio de aceite y transporte terrestre hacia fuera del país.
Mientras, que a nivel de muebles y artículos para la conservación del hogar destacan aumentos en los precios de pago por servicio de trabajadora doméstica, cama matrimonial, muebles para comedor y sala, electrodomésticos, lámparas y utensilios para la cocina.
Finalmente la inflación mensual en hoteles, cafeterías y restaurantes fue resultado de incrementos en los precios de las comidas, refrescos naturales y gaseosas consumidos fuera del hogar, pasteles y el servicio de alojamiento en hoteles.
La región Resto Norte (La Ceiba) sigue registrando el costo de vida más alto, seguido de la región Central Metropolitana (Distrito Central). Entre tanto, las regiones sur, resto central y norte metropolitana registraron las menores variaciones, inferiores a la del indicador general.
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