martes, 22 de abril de 2014
¡Auxilio doña Lisa Kubinske!
Por Roberto Quesada
"Esta acción criminal contra nuestro compañero de equipo Carlos Mejía Orellana es un golpe a nuestro trabajo, a nuestra institución y por lo tanto denunciamos este hecho, porque vulnera el trabajo de comunicación, vulnera el derecho que tenemos a la libertad de expresión y vulnera la vida de todos y cada uno de los miembros de nuestro equipo.”
Ismael Moreno (cariñosamente “el Padre Melo”), sacerdote jesuita, director de Radio Progreso.
Los asesinatos en Honduras siguen desesperadamente, como para no dejar duda que ese primer lugar del país más violento, sangriento del mundo no se lo quita nadie. No faltará quien se sienta orgulloso de por primera vez tener a Honduras primera en algo.
Ya casi el pueblo hondureño se ha acostumbrado a que encuentran a unos cuantos encostalados, otros atados, mutilados, en fin los asesinatos en su más diversas formas, tonalidades como para ser exhibido en una vitrina como apetecible producto a la venta.
Y aquí se dice guerra entre maras, ajuste de cuentas, en algo andaba, no era mansa palomita, pero es una desgracia para el pobre muerto, que encima de estar muerto, se le culpa de su muerte. Y reina la impunidad a todo nivel. Aunque no crea hay mucha gente en Honduras que no sabe qué quiere decir la palabra impunidad, pues se lo decimos con sencillez: Es cuando se asesina, roba, se delinque de cualquier manera y no existe castigo alguno para los malhechores.
Pero entre estos crímenes, sobresalen unos, los que se hacen selectivamente. Esto se ha venido acentuado en Honduras desde poco antes del golpe de Estado del 28 de junio del 2009.
Poco antes del golpe comenzaron a asesinar a personas cercanas al entonces presidente constitucional Manuel Zelaya Rosales, y desde entonces a la fecha, eso no se ha detenido.
Y uno de estos asesinatos, que tiene todas las características de provenir del terrorismo de Estado, es el del joven responsable de mercadeo y ventas de Radio Progreso y miembro del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación, ERIC de la Compañía de Jesús en Honduras, Carlos Hilario Mejía Orellana.
Este tipo de asesinatos, así como las intervenciones militares a gran escala, se dan generalmente en fechas en que la población esta distraída por festividades. Para navidad o año nuevo, Semana Santa en que la mayoría de la gente anda pensando en playas y otras diversiones, se ordenan este tipo de crímenes.
De esta manera se evita la repercusión de la prensa, sobre todo en los países que tienen una prensa no tan servil a los intereses de la minoría pudiente y de los extranjeros injerencistas, como es el caso de Honduras.
Y el hecho pasa como una noticia que pocos vieron y cuando se regresa de vacaciones ya hay nuevos asesinatos, nuevos problemas después de haber despilfarrado lo poco que se tenía en el festín semanasantero, y el asesinado pasa sin pena ni gloria al otro mundo.
Por supuesto que el asesinato de Carlos Mejía es calculado para darle un fuerte golpe bajo a Radio Progreso. Emisora insigne, emblemática con su postura digna contra el criminal golpe de Estado, de hecho, nosotros colaboramos tanto retransmitiendo sus noticieros como pasándoles informe de primera mano, tal como alimentamos a Radio Globo, Cholusat Sur, sin costo alguno, de pura fe en la solidaridad, durante lo álgido del golpe de Estado que aún persiste en Honduras.
Los funcionarios que frisan cifras, que los ponen como loros en estaca a mentirle a la población hondureña de que el crimen ha bajado (ha bajado de los cerros a la ciudad), ni ellos mismos se creen lo que los ponen a decir; por eso tartamudean, se equivocan, se enfadan ante ciertas preguntas, por eso el Gobernador no permite preguntas, da los “informes” y sale corriendo.
Entonces los hondureños/as, ¿a quién podemos pedirle auxilio? Pues a los verdaderos jefes, a los Estados Unidos. Los demás son monigotes puestos allí para devengar jugosos salarios, prebendas y meterles el cuento de que son importantes, cuando en la realidad para el ala radical estadounidense solo ellos importan, los demás son objetos desechables. Allá el Gobernador que se crea el cuento.
Es aquí en donde debería de pronunciarse Doña Lisa Kubinske, embajadora de los EE.UU, encargada de darnos la más moderna democracia a los hondureños/as, que se pinta para andar visitando “tigres” e inaugurando bases militares, pero se llama al silencio ante estos asesinatos fuertemente sospechosos de ser terrorismo de Estado. Nos predican la ejemplar democracia estadounidense, pero con palabras no con hechos, la jefa del gobierno de Honduras, Sra. Kubinske, debería jalarle las orejas al Gobernador y ordenarle, exigirle que cesen todo tipo de asesinatos, pero especialmente los selectivos, encaminados a silenciar al pueblo hondureño, cercenando la libertad de expresión, matando la libertad de prensa.
Asesinan a miembro del Equipo de Radio Progreso
Alerta 017-14
12 de abril de 2014
Comité por la Libre Expresión (C-Libre).- Carlos Hilario Mejía Orellana responsable de mercadeo y ventas de Radio Progreso y miembro del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación, ERIC de la Compañía de Jesús en Honduras, fue asesinado a puñaladas la noche del viernes 11 de abril en su casa de habitación en la colonia Suazo Córdova de la ciudad de El Progreso, departamento de Yoro, al norte del país.
En conferencia de prensa el sacerdote jesuita, Ismael Moreno, expresó que el hecho sangriento es un golpe directo, no solamente a la vida de Carlos Mejía y su familia, sino que también al trabajo que realiza Radio Progreso y el ERIC.
"Esta acción criminal contra nuestro compañero de equipo Carlos Mejía Orellana es un golpe a nuestro trabajo, a nuestra institución y por lo tanto denunciamos este hecho, porque vulnera el trabajo de comunicación, vulnera el derecho que tenemos a la libertad de expresión y vulnera la vida de todos y cada uno de los miembros de nuestro equipo. Para nosotros es altamente sospechoso que este hecho criminal haya ocurrido justamente en las vísperas de semana santa, cuando todo mundo se retira a sus respectivas vacaciones especialmente los entes responsables de la justicia, y cuando también es mucho más fácil que los hechos lamentables como estos pasen a un segundo y tercer término, por lo tanto nosotros presentamos como altamente sospechoso que ocurra precisamente en estos días", explicó el padre Moreno.
"Su asesinato es una muestra más del fracaso de las políticas de seguridad del Estado hondureño y de su falta de voluntad política para adoptar las medidas efectivas de protección establecidas por la CIDH. Frente a ello, exigimos una investigación seria y diligente que conlleve a la identificación, juzgamiento y sanción de todos los responsables de este crimen, sean actores materiales e intelectuales", exigió Joaquín Mejía, también miembro del ERIC.
Con el fin de proteger la vida e integridad de Mejía Orellana la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) había otorgado medidas cautelares el 2 de julio de 2009, el 26 de abril de 2010, el 03 de mayo de 2010, el 02 de junio de 2010 y el 27 de mayo de 2011.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario