sábado, 10 de noviembre de 2018

Migrantes siguen huyendo hacia el norte, buscando lo que su país le negó



La caravana de hondureños, que suma más de 7 mil migrantes según estimaciones de Naciones Unidos, sigue su camino en territorio mexicano. Esos hombres, mujeres y menores han recorrido apenas un cuarto de camino hacia su norte: Estados Unidos.

Esa caravana ha provocado la motivación para que más hondureños y hondureñas, quienes ven en la migración la única oportunidad de cambiar sus vidas, inicien el recorrido. Esta semana se rehabilitó la frontera de Agua Caliente, lugar desde donde decenas de migrantes comenzaron su recorrido para cruzar a Guatemala y luego proseguir camino hacia México.

Los puntos ciegos de las fronteras, El Florido, Agua Caliente y Corinto, son las zonas que buscan los migrantes para evitar las inspecciones migratorias. Lugares donde han sido víctimas de agentes policiales corruptos, quienes con sobornos los dejan pasar hacia territorio guatemalteco.

Recorrido
En los municipios de Ocotepeque, zona occidente hondureño, y Esquipula, oriente guatemalteco un grupo de migrantes, más de 50, iniciaron su camino hacia Estados Unidos. Radio Progreso en una cobertura especial en frontera los acompañó para internarse en ese camino. Luego de cruzar frontera, la comunidad de Esquipula los recibió con atol caliente, ese que recordó la solidaridad de los pueblos para estos ciudadanos y ciudadanas que aseguran salen de su país en busca de las oportunidades que se les niega.

Ellos pasaron una noche en la Casa del Migrante José en Esquiupla, para luego continuar en Chuquimula, ciudad Guatemala y luego saltar hacia el norte: México y Estados Unidos.

El grupo de de migrantes se despidió de Esquipula y su cristo negro, al cual acuden cada año miles de per peregrinos para suplicar fortalezas y esperanzas. Ese lugar les vio partir convencidos que merecen una vida dignificante. Y que el riesgo que han emprendido vale la pena, aunque deban burlar retenes, atravesar puentes, soportar altas temperaturas, sed y hambre, es decir, enfrentar la política anti-migrante de Donaldo Trump.

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