El Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH), a exigió este jueves cancelar la autorización del proyecto hidroeléctrico Agua Zarca en el sector de Rio Blanco y el cese al hostigamiento y amenazas que se ejecuta contra la población indígena Lenca.
Desde hace once días los habitantes de Río Blanco y de otras cinco comunidades del sector mantienen tomada la carretera de esa zona en rechazo a la construcción e instalación de un proyecto hidroeléctrico en el Río Gualcarque.
En una conferencia de prensa ofrecida en la Plaza La Merced de esta Capital, los miembros del Copinh señalaron que continuaran con la toma de la carretera en las inmediaciones del proyecto hidroeléctrico Agua Zarca, para impulsar y fortalecer esta lucha en otras comunidades, para así ejercer su derecho de autonomía indígena.
“Exigimos al gobierno Central y sus dependencias implicadas en este proyecto de muerte a que procedan inmediatamente a cancelar las autorizaciones del mismo y a que sea retirado de nuestro territorio, no sólo por ilegal, sino que por su ilegitimidad”, señala el Copinh en un comunicado que distribuyeron a la prensa nacional e internacional.
El Copinh responsabilizan a DESA, SINOHYDRO, FIHCOSA, Congreso Nacional, SERNA, ICF, a las corporaciones municipales de Intibucá y San Francisco de Ojuera, como a quienes contribuyen a financiar este proyecto, de la violación de sus derechos históricos, territoriales, culturales y el derecho humano a mantener sus ríos de forma comunitaria.
También los responsabiliza de los hostigamientos y amenazas de todo tipo que se ejecuta contra la población indígena Lenca y contra los miembros del Copinh.
La organización indígena también responsabiliza “a la policía y al ejército, que junto con hombres armados, con apariencia paramilitar, hacen presencia, custodiando a las empresas y amenazando a la población” en ese sector de enorme riqueza de bienes comunes de la naturaleza.
El Copinh hace un llamado a la solidaridad activa, al pueblo hondureño a sumarse a este proceso por la emancipación y la dignidad y a las comunidades a profundizar la defensa territorial y los derechos del pueblo Lenca.
Siete organizaciones de derechos humanos y ambiente de los Estados Unidos, en una carta enviada al presidente Porfirio Lobo Sosa lo instan a asegurar el respeto a la vida y los derechos de los miembros del Copinh y las comunidades indígenas Lencas de Río Blanca.
“Estamos extremamente preocupados por las amenazas, vigilancia y persecución enfrentadas por miembros de la comunidad de Río Blanco y de Copinh por su derecho al proyecto hidroeléctrico Agua Zarca”, le dicen las organizaciones estadounidenses a Lobo Sosa.
En un cabildo abierto y en asambleas indígenas, las comunidades rechazaron el proyecto hidroeléctrico y le informaron al gobierno de su posición adoptada.
También interpusieron denuncia de rechazo al proyecto en la Fiscalía de las Etnias del Ministerio Público, SERNA y en el Congreso Nacional.
Fausto Benítez, dirigente patronal de Río Blanco, indicó que le han dado un ultimátum de 72 horas a la empresa hidroeléctrica para que retire la maquinaria del sector.
“Estamos decididos a mantener esta lucha hasta el final”, señaló Benítez.
Por su parte Lucio Sánchez, dirigente del Copinh en Río Blanco, le pidió al presidente Porfirio Lobo Sosa que se ponga la mano en la conciencia y que ya no siga vendiendo a la nación a pedazos.
“Nosotros no estamos de acuerdo porque esta compañía hidroeléctrica ha hecho un desastre en las tierras que nosotros trabajamos, metieron los tractores haciendo pedacitos las vegas donde nosotros trabajamos, siendo una amenaza de muerte, porque de dónde vamos a mantener ahora a nuestros hijos”, señaló el campesino.
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