Por Sandra Rodríguez
Campesinos y campesinas del oriente de Honduras han iniciado acciones solidarias mediante el trabajo de siembra en parcelas demostrativas agro-ecológicas, con las que se implementa accesiones para una alimentación sana y mejor calidad nutricional.
De esta forma, se implementa parte del proyecto “Ejercicio pleno del Derecho y reducción de la pobreza de poblaciones indígenas y campesinas”, que ejecuta el Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras, COFADEH.
Las acciones se realizan en conjunto con la Central Nacional de Trabajadores del Campo, CNTC, coordinada por Jesús Ponce, con quien se firmó un convenio de cooperación el año pasado, para dar formación en derechos humanos al Agua y Alimentación a miembros de empresas campesinas afiliadas, de los municipios de Alauca, El Paraíso, Trojes, Danlí, Morocelí, Jacaleapa y Yuscarán.
La CNTC, quien tiene personal técnico capacitado para la implementación de parcelas demostrativas agroecológicas, identificó las zonas donde se sembrará y para qué productos están aptas.
Franklin Almendrares, Técnico de la CNTC, dijo que al inicio es difícil trabajar a base de producción orgánica, pero vale la pena, porque es un producto de mejor calidad y saludable, por eso es importante identificar con acierto que es lo que se va a cultivar.
Con esto se garantiza la alimentación sana y segura para las familias afiliadas a la organización, estas nuevas étnicas han tenido buena aceptación en las familias beneficiadas, pues poseen sus propios huertos.
Según estudios previos, más de 200 mil familias sufren de hambre en Honduras, un país con tierras de vocación forestal y agrícola, sin embargo las tierras se concentran en pocas manos, por lo que los y las campesinas a diario exponen hasta su vida para defender una pequeña parcela sólo por la necesidad de cultivar su alimento.
Francisco Suazo
La experiencia en parcelas demostrativas en huertos familiares de campesinos y campesinas ha producido fresas, zanahorias, chile, tomate, frijoles, maíz, café, plátano, entre otros alimentos.
Sonia Triminio, representante de la junta directiva de la CNTC, dijo que hay alegría y aceptación de parte de las empresas campesinas beneficiadas con el proyecto, ya que el apoyo que da le COFADEH va más allá, con los talleres de formación en derechos humanos, al Agua y Alimentación que han recibido en el último año.
Francisco Suazo, de la empresa campesina Hermanos Unidos de Rancho el Obispo, ha cultivado frijoles con técnicas de cultivo orgánico, y que fue una experiencia muy buena, por lo que implementar nuevamente estas parcelas agroecológicas será de mucho beneficio para la empresa campesina de la cual forma parte.
“Es una gran experiencia cultivar de manera orgánica, yo antes cultivaba con productos químicos, pero eso causa daños a la salud, por lo que es mejor implementar abonos naturales, con lo que a la vez cuidamos el planeta y el agua”.
Esperamos cultivar productos que nos permitan la sostenibilidad, de modo que podamos generar nuestros ingresos para dar una mejor vida a nuestras familias, dijo don Francisco, quien permanece con medidas cautelares, por estar en un proceso de recuperación de tierras.
“Creo que el hecho que el campesino busque trabajar la tierra, no es delito, pero aquí en Honduras parece que ser campesino o campesina si lo es, porque nos persiguen, judicializan y nos arrebatan las tierras en la que queremos trabajar”, denunció el labrador.
Mientras que José Domínguez del municipio de Alauca, manifestó que la parcela comunal será una buena oportunidad para expandir la forma de cultivo y proveer a la comunidad una alimentación sana.
“Esta será la primera vez que implementaremos parcelas agroecológicas, tenemos todo listo, los terrenos, la gente y las ganas de trabajar, solo estamos a la espera que el técnico nos diga que semilla vamos a cultivar. Siempre se ha sembrado maíz y frijoles pues de ahí sacamos nuestros alimentos, sin embargo esperaremos las recomendaciones de los expertos”.
Agregó que “esta seguridad en nuestro trabajo, nos lo da la formación en temas de derechos humanos que nos da el COFADEH, pues ya tenemos conocimientos de nuestros derechos y como defenderlos, y parte de nuestros derechos es a tener tierras y semillas para cultivarlas, de este modo nos auto sostengamos, así mismo exigimos al Instituto Nacional Agrario, INA, nos legalice pronto los permisos de trabajo comunal”.
Por su parte, Olvin Triminio, cuenta según su experiencia que cultivar parcelas demostrativas posee un gran valor, pues hay que tener paciencia, pero el resultado lo demuestra el buen producto de las cosechas realizadas.
La naturaleza tiene las cosas a nuestro alcance y nosotros no las sabemos utilizar, por lo que cultivar de manera orgánica es una bonita experiencia, apuntó.
Parte del proyecto que ejecuta el COFADEH, es la formación de la Red de Comunicadores y Comunicadoras Sociales, quienes ya realizan acciones de denuncias públicas y apoyo a los y las demás compañeras de los siete municipios en los que se enfoca.
Y la red de defensores y defensoras de derechos humanos, quienes con la formación recibida por el COFADEH, realizan mapeos de la situación de violación a derechos humanos y gestionan ayuda y procuran en favor de quienes desconocen como defender o exigir se les respete sus derechos.
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