Los sin papeles, los más vulnerables
El conocido lingüista e intelectual estadounidense Noam Chomsky habló sobre la razón por la cual no hay una reforma migratoria; opinó que Estados Unidos siempre ha apoyado a dictadores por todo el mundo y que Egipto no fue la excepción y trazó un balance de los dos años de la presidencia de Barack Obama.
La mente de Chomsky, profesor del prestigioso Massachusetts Institute of Technology (MIT), se pone más filosa con el paso del tiempo, aún a sus 82 años. Ha escrito más de 150 libros y su análisis es certero aunque polémico.
Univision.com habló con Chomsky sobre tres temas: Reforma migratoria, la crisis en Egipto y la presidencia de Obama.
‘La administración de (Barack) Obama ha deportado muchos más inmigrantes indocumentados que durante la gestión de Bush hijo. Empujaron un poco el Dream Act pero no pasó nada, lo que considero trágico’, dijo.
‘La razón por la cual considero que no hay una reforma migratoria es muy simple. Cuando se tiene una seria crisis económica, aquellos que son responsables como las corporaciones ricas, los bancos, la industria financiera y el gobierno, ellos mismos no quieren que la gente preste atención a la causa de la crisis, o sea ellos mismos, y entonces quieren desviar la atención y el enojo a otro lugar’.
‘Y hay una manera rutinaria de hacer esto, que es: Apuntas a la gente que es más vulnerable. Así que el problema es el indocumentado, los docentes y sus pensiones, la policía que gana más de lo que debe. Desviar la atención es la salida y los inmigrantes son el blanco porque ellos son los más vulnerables. Y en ese contexto hay tremenda bronca en el país. Y si la atención se desvía a los más vulnerables, será muy difícil hacer algo por ellos. Por eso no hay reforma migratoria’.
¿Cuál es su opinión sobre los hechos en Egipto y la postura de EE.UU., que durante 30 años apoyó a Mubarak?
Hay una respuesta estándar para estas situaciones que surgen una y otra vez. EE.UU. apoya dictadores en todo el mundo y no sólo en el Medio Oriente. Y llega un momento en que comienzan a derrumbarse y no pueden mantenerse, o se independizan demasiado y EE.UU. entonces no los tolera más. En estos casos hay un procedimiento estándar; Marcos en Filipinas, Suharto en Indonesia, Duvalier en Haití... hay una lista larga. Los apoyas hasta que puedes y cuando se torna imposible, como cuando el ejército se rebela, los jubilas, como en el caso de Duvalier, los pones en un avión de la Fuerza Aérea rumbo a Francia con la mitad del tesoro en su bolsillo. Los mantienes hasta que puedes y luego te los quitas de encima.
¿Esto pasó en Egipto?
Eso es lo que pasa en Egipto. Están viendo cómo mantener la situación. Los militares han estado manejando el país desde 1952. Los jefes militares son dueños de la economía, pertenecen a la elite corrupta y los oficiales más jóvenes los miran con recelo, lo que puede ser caldo de cultivo para una rebelión.
‘El movimiento popular es espectacular, pero desorganizado. Lo que pasa dentro de Egipto pasa muchas veces en las dictaduras. Algo hace chispa y las cosas ocurren.
¿Ese movimiento popular puede extenderse en la región?
Argelia es para mantenerla en la mirilla. Tiene una dictadura brutal. Marruecos por el momento está calmo. Libia aparenta estar bajo control. Pero si hay una revuelta en Libia, EE.UU. la apoyaría porque no le gusta Gadafi. En Jordania hay protestas, pero tienen un ejército muy fuerte y el apoyo de EE.UU., Arabia Saudí está bastante callada, es el país más importante y más reaccionario, es el centro del fundamentalismo islámico y el mayor patrocinador de los terroristas.
Obama y sus dos años en la Casa Blanca
Los dos primeros años de Obama en la Casa Blanca recibieron una tibia, sino fría, calificación por parte de Chomsky.
‘Obama parece una persona con pocos principios. Hubo algunas cosas que debían hacerse y las hizo. Llegó en medio de una crisis económica y obviamente había que hacer algo sobre eso’, dijo.
‘La mayoría de quienes lo apoyaron en las elecciones fueron de la industria financiera. Y esperaban que les fuera devuelto el favor. Y se les devolvió. Cuando Obama formó su equipo económico lo hizo casi completamente con gente que compartió una considerable responsabilidad por la crisis y que en gran parte pertenecía a la industria financiera. Esas personas desarrollaron un programa que evitó un empeoramiento de la crisis y pusieron unas ‘curitas’ pero esencialmente terminaron restaurando el sistema tal como estaba antes.
Hoy las principales firmas de inversiones y bancos son más ricos y más poderosos que antes’.
‘El CEO de Goldman Sachs recibió un bono de 12 millones y medio de dólares y su salario cuadruplica eso. Y culpan a los docentes como una de las causas de la crisis por sus grandes pensiones’, dijo irónicamente.
‘Lo que la gente ve es un alto nivel de desempleo y culpan a la administración. Y poco se ha hecho para mejorar los trabajos. Se aprobó una reforma de salud, que es mejor que lo que teníamos'.
Con respecto al déficit que se prevé para este año y que llega a 1.64 billones de dólares –una cifra récord- dijo que ‘la mitad lo generan los gastos militares. EE.UU. gasta casi lo mismo que todo el resto del mundo junto. El resto del déficit es atribuible a un sistema de salud completamente disfuncional. EE.UU. tiene un sistema privatizado terriblemente caro. Y es una sangría en el presupuesto federal’.
Para Chomsky, Obama se ha entregado muchas veces pese a su retórica progresista. ‘La gente estaba a favor de la opción pública de la reforma de salud, pero Obama claudicó. Lo mismo con la extensión de las deducciones impositivas a los más ricos. La gente se oponía pero Obama claudicó. Y así están las cosas. Obama es como una mezcla’.
No hay comentarios:
Publicar un comentario