Nueva estrategia de intervención yanqui: Colombia, Honduras y Haití

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Una expresa manifestación del contraataque imperial sobre América Latina y el Caribe corresponde a una triangulación fatal que se gesta entre los hermanos pueblos de Colombia, Honduras y la ocupada Haití, denunció este domingo el Presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez.

En su columna dominical, Las Líneas de Chávez, el Mandatario sostuvo que éstas son tres versiones de una nueva estrategia intervencionistas, armamentista y ocupacionista norteamericana en suelo nuestroamericano.

Como situación que alarma a todos los gobiernos de los países integrantes de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (Alba), como lo es la ocupación militar que Estados Unidos está ejecutando sobre Haití, con excusa de ayuda humanitaria, Chávez refirió al vicepresidente de Bolivia, Álvaro García, quién alertó que esa presencia militar pueda ser permanente.

Al respecto, García destacó: “Es una invasión gringa que no salva vidas, que no lleva alimentos, que no levanta los escombros, que no recoge cadáveres, sino que simplemente está ahí para hacer una presencia militar, y nuestro temor es que esa presencia militar quiera convertirse en permanente”.

En ese sentido, consideró que el accionar del gobierno de Barack Obama es otra agresión contra nuestra América, contra la soberanía de El Caribe y contra la Alba, pero sobre todo contra el pueblo haitiano.

“Sobre todo es contra un pueblo en búsqueda de su dignidad secuestrada, humillada y violada por la ambición imperial, colonialista y neocolonialista, que no perdona -y que jamás lo hará- el muy objetivo hecho de que el pueblo negro, africano y caribeño de Haití fue el primero en sacudirse las viles cadenas de la esclavitud”, enfatizó el líder de la Revolución bolivariana.

De esta manera, siendo Haití el principal impulsor de la causa independentista de nuestra América, Chávez exhortó al ¡Contraataque popular a todo lo largo del frente de batalla!

Estimó que el espíritu independentista y soberano del pueblo haitiano, además de su fuerza histórica, será la fuerza que lo hará levantarse ante la adversidad y la amenaza imperial actual.