Por Rodolfo Cortés Calderón
La politiquería en Honduras está que hierve, es una caldera del diablo. Hace una semana se dieron elecciones primarias llenas de denuncias de inflación y trasiego de votos, adulteración de documentos y compra de conciencias. Pero además, coincidieron éstas con las declaraciones de un cartel de narcotraficantes hondureños extraditados a Estados Unidos—llamados “Los Cachiros”-- que aseguraron en el juicio que se les sigue en Nueva York que ellos han sobornado y coordinado “trabajos” con varios políticos de alto nivel de los tres principales partidos políticos de Honduras: Nacional, LibRe y Liberal.
Los politiqueros de Honduras y de todo el mundo cuando andan en campaña política—no tanto para servir al pueblo- sino para saquear los bienes del Estado son capaces de entregar el alma a Satanás, por eso muchos de ellos terminan en el infierno del descrédito, señalamiento, aborrecimiento y burla de sus pueblos.
Esta semana que concluyó, la mayoría de los acusados por el “cachiro” Devis Leonel Rivera Maradiaga entre ellos Porfirio Lobo Sosa, ex presidente de Honduras 2010-2014 y su hijo Fabio Porfirio Lobo; Antonio (Tony) Hernández Alvarado, actual diputado y hermano del presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández Alvarado, JOH; Carlos Armando Zelaya Rosales, hermano del ex Presidente de Honduras 2006-2009 y Coordinador del partido Libertad y Refundación, LibRe, José Manuel Zelaya Rosales, ante las implicaciones que les hizo el “cachiro” sin el menor rubor Se han defendido como inocentes angelitos ubicados en el umbral de la gloria.
Los testaferros de estos narco-políticos se deshacen en su defensa, principalmente “analistas” y “periodistas” de los medios corporativos hondureños, creyendo que en Estados Unidos los jueces o magistrados se dejan engañar por falsos testimonios como sucede con los mediocres juececillos catrachos. Cada incriminado sabe que todo lo que declare podrá actuar en su favor o contra si de acortar penas carcelarias se refiere.
Ya en nuestro país hay antecedentes de lo que hacen los magistrados, jueces y Cortes en Estados Unidos. Los casos del político y financista Jaime Rosenthal Oliva, su hijo Yany Rosenthal Hidalgo y su sobrino Yanky Rosenthal, así como el caso del ex presidente Rafael Leonardo Callejas Romero (1990-1994), señalados presuntamente de lavado de activos vinculados con el narcotráfico, los primeros, y pago de sobornos con dineros de la FIFA, el segundo, esperan su enjuiciamiento en aquel país a pesar de que los Rosenthal, del partido Liberal y el ex presidente Callejas, del partido Nacional, eran intocables por las corruptas y tramposas “autoridades judiciales” hondureñas del bipartidismo nacional-liberal. Los Rosenthal siempre fueron los dueños de la Corte Suprema de Justicia, la manejaron a su antojo y Callejas Romero, siempre manipuló todos los poderes y recibió 16 cartas de libertad e inocencia, aun siendo señalado como un reconocido “cleptócrata” de los bienes estatales por el senador republicano estadounidense Jesse Helms, Presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado. Sin embargo, a ninguno de ellos se le ha acusado o enjuiciado en Honduras. ¡Cosas veredes!
Porfirio Lobo Sosa, Tony Hernández y Carlos Armando Zelaya han hecho gala de inocencia en los medios corporativos que son sus aliados. En un gobierno de Leyes donde funciona la institucionalidad y la legalidad, de oficio todos hubieran renunciado u obligados a hacerlo. Pero en Honduras el partido Nacional, con el presidente Juan Orlando Hernández a la cabeza, tiene cooptados y alineados políticamente a su favor todos los poderes e instituciones: Congreso Nacional, Corte Suprema de Justicia, Ministerio Público, Fuerzas Armadas, Comisionado de Derechos Humanos, Tribunal Superior de Cuentas, Policía Nacional, etc.
Otros supuestos implicados por el “cachiro” que han mantenido una férrea autodefensa son Óscar Nájera, diputado del partido Nacional por Colón y Fredy Nájera, diputado del partido Liberal por Olancho; además del actual alcalde de LibRe por Tocoa, Adán Fúnez; sin embargo, el actual ministro de Seguridad, Julián Pacheco Tinoco, se ha llamado a silencio.
Pero hay más, en las elecciones pasadas del 12 de marzo más de una veintena de ellos han sido reelectos y propuestos como alcaldes y diputados (as) para las elecciones generales de noviembre próximo con lo que se perfila la consolidación de un Narco Estado tolerado y consentido por Estados Unidos.
Aunque el panorama político para noviembre 2017 se ve oscuro, le sugerimos escoja, seleccione con lupa a sus candidatos/candidatas a presidente/designados; diputados/diputadas; alcaldes/alcaldesas según le indique su conciencia y corazón, pero alístese a reclamarles o exigirles cuando no le cumplan lo prometido, así se construirá Patria, no siendo borrego de ellos o ellas. La excesiva tolerancia es una mala compañera y consejera.
¡Tienen además la palabra todos los partidos políticos de Honduras que son los gestores de esta casta de diablos corruptos y corruptores!
19 de marzo 2017.- Felicidades padres responsables de honduras en su día.
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