A juzgar por la reacción del empresariado hondureño en torno a la reelección del presidente Hugo Chávez Frías, de Venezuela, este hecho ofrece la oportunidad de que Honduras pudiera resolver el problema de la deuda interna y externa por la vía de la reconversión por la vía de Petrocaribe.
De igual manera, el Tribunal Supremo Electoral, en base a la experiencia electoral venezolana, cuyo sistema es considerado uno de los mejores del mundo, analiza la eventualidad de solicitarle a Venezuela asesoramiento y apoyo técnico para la adopción del voto electrónico, más eficaz y menos costoso, supuestamente con vista a las elecciones generales de noviembre de 20013.
El Consejo Hondureño de la Empresa Privada (COHEP) y la Asociación Nacional de Industriales (ANDI) estiman que un convenio entre Honduras y Petrocaribe daría la oportunidad de aliviar la carga de la deuda, que, según la Secretaría de Finanzas, es por el momento de 5,822 millones de dólares, de los cuales 2,511 millones de dólares son deuda interna.
“Esta deuda cara –dice Benjamín Bográn, ex-presidente del COHEP--, que le está costando miles de millones de lempiras por concepto de pago de intereses y capital, la puede trasladara a tasas de interés mucho más bajas mediante la iniciativa de Petrocaribe”.
Adolfo (Fito) Facussé, quien fue uno de los promotores del acuerdo Petrocaribe que rescató a Honduras de la crisis energética de 2007-2008 en la administración Zelaya Rosales, comparte la misma posición, reconociendo que muchos países disfrutan de los beneficios económicos de ese convenio.
Después del golpe 28-J de 2009, el dictador Micheletti denunció el acuerdo con Petrocaribe para cumplir su compromiso con las transnacionales, causándole un enorme daño al país, aunque sí se aprovechó de esos fondos, que también han servido al actual gobierno.
Los términos del acuerdo Petrocaribe son de naturaleza concesionaria, puesto que el Estado paga solamente el 60% de la factura, a 90 días plazo, mientras el 40% restante es por pagar en 25 años plazo, con dos años de gracia y apenas 1% de interés interanual.
Restablecidas las relaciones diplomáticas con Venezuela, el presidente Lobo Sosa inició las gestiones para la reanudación del acuerdo Petrocaribe, las que, según ha trascendido, se atascaron porque, en esta ocasión –y a consecuencia de lo ocurrido con el uso nebuloso de los dineros provenientes de ese fondo—se ha exigido el depósito de los ahorros en un banco venezolano.
Eso quiere decir que el acceso a Petrocaribe por parte de Honduras no se vislumbra tan expedito, a menos que se conviniera en un mecanismo confiable para garantizar la transparencia en el empleo de esos dineros, en conformidad con los compromisos sobre su destino.
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