viernes, 11 de junio de 2021

Desconfianza en las elecciones y anuncio de Zedes agudizan la crisis hondureña


Radio Progreso

A más de una década del golpe de Estado de 2009, Honduras sigue sumergida en una crisis democrática, política, económica y social, que no parece terminar y que, a partir del 2020, con la llegada de la pandemia, se agudizó mostrando lo más rancio de la clase política hondureña, advierten analistas.

En un año electoral la situación del país sigue siendo crítica y el panorama lejos de ser esperanzador, cada vez se vuelve más sombrío. El país va a elecciones con una nueva Ley Electoral, que, según entendidos de la materia, no significa cambios profundos. Así mismo, en medio del ruido electoral nuevamente se ha despertado el tema de la entrega del territorio, a través de las Zonas Especiales de Desarrollo Económico (ZEDES).

Radio Progreso (RP), dialogó con el abogado Edmundo Orellana (EO), ex fiscal general de la República y reconocido político en el país. Con él hicimos una rápida radiografía sobre el contexto hondureño.

RP ¿En qué momento se encuentra el país?

EO. El país se encuentra en una situación como nunca había estado porque en materia política tenemos un gobierno que está por terminar y que probablemente sea el gobierno más corrupto. Cuyos personeros han sido señalados en juicios en Estados Unidos.

Un gobierno que ha enfrentado la pandemia de manera irresponsable provocando un genocidio. También tenemos un gobierno que ha construido una dictadura, que se ha reafirmado en la institucionalidad hondureña. Tenemos una cantidad de políticos -particularmente una élite-, que se ha revelado corrupta porque ha estado involucrada en sonados casos de corrupción. Y ahora nos hemos enterado de que esa élite política que involucra prácticamente a todos ha aprobado una Ley Electoral que no es más que más de lo mismo. Y, por otro lado, la entrega del territorio a través de las Zonas Especiales de Desarrollo Económico (ZEDES).

RP. En medio del contexto electoral ¿Qué se está cocinando en el país?

EO. Lo que ocurre es que los políticos acostumbrados a triunfar vía fraude no quieren abandonar los mecanismos que pueden utilizar para manipular las elecciones. Lo que hicieron fue reproducir la Ley Electoral vieja en esta nueva, pero con una cara diferente.  Hay que recordar que casi todos los políticos que están en el actual escenario son aquellos mismos que estaban desde antes del golpe de Estado.

Ellos ya han participado en procesos electorales anteriores que han sido viciados, pero lo realmente peligroso es que ahora se han impuesto con más fuerza y violencia. Lo que hicieron con esa nueva Ley Electoral, es ponerse de acuerdo para que quien sea más astuto, más audaz y tenga más dinero, gane las elecciones.

RP ¿Esa nueva Ley Electoral garantiza elecciones transparentes?

EO.  No lo creo. En primer lugar, las mesas siguen manipuladas por los partidos políticos y allí es dónde se decide quién gana y quién pierde, todo depende del dinero que impongan.

Por otro lado, salen diciendo que ahora las credenciales van a tener nombre, cuando en realidad las credenciales siempre han tenido nombre. Lo que pasa que irresponsablemente se las han entregado sin nombre, y lo han hecho en contubernio con los dirigentes políticos de los partidos. La ley vieja que se derogó decía claramente que los miembros de las mesas electorales eran propuestas por los partidos políticos al Tribunal Supremo Electoral (TSE), y que el TSE establecía quién era el presidente, secretario, vocales de las mesas electorales y que además les tomaban la promesa de ley para que ellos asumieran el cargo.

Explíqueme usted cómo es que, TSE iba a hacer todo eso sin que se supiera quiénes eran. Ley dice que los nombraba, y si los nombraban era con nombres. Y ahora vienen a cacarear diciendo que es un gran logro, y no lo es. Lo que pasa es que no lo cumplía igualmente esta vez podrían no cumplirlo.

RP. En actual contexto ¿seguirá en el poder el Partido Nacional?

 EO. Yo sí pienso que el Partido Nacional tiene grandes posibilidades, porque estar en el poder y estar en el poder significa tener todos los mecanismos para imponerse.  Tiene la fuerza policial, fuerza militar, los Tribunales de la República. Tiene empleados públicos, es decir la burocracia. Y además, tiene lo más importante; el Presupuesto General del Estado.

Ahora que se puede postularse el actual gobernante, posiblemente lo haga. La situación de él es muy delicada después de las elecciones, porque está en riesgo de que sea procesado criminalmente en los juzgados Federales de Estados Unidos, y la única manera de que eso no suceda, es seguir en la presidencia.

En Honduras es muy fácil sustituir a un candidato presidencial. Siempre ha sido fácil. En el país ha habido casos de hombres de paja, es decir testaferros que han salido diciendo que son los candidatos y que ganan las elecciones, pero al final el candidato oficial es otro.

RP. Uno de los temas que ha resurgido en medio del contexto electoral ha sido la entrega del territorio a través de las ZEDES ¿por qué se revive en este momento?

EO.  Este tema ha cobrado vigencia porque no se sabía que ya se habían aprobado oficialmente 3 (la de Roatán, Choloma y Choluteca) fue hasta que el exministro Ebal Díaz compareció en un programa de televisión, diciendo que ya habían autorizado y que van a autorizar más. Estamos entonces ante un hecho consumado que desconocíamos, porque en general la sociedad asumía que el gobierno estaba respetando la Constitución y la ley.

RP ¿Qué significan las ZEDES para Honduras?

EO.  Ellos están hablando de un montón de cosas que no tienen nada que ver con la realidad. Por ejemplo, hablan que con la ZEDES, se va a desarrollar el país. Pero las mismas son áreas que van a quedar fuera de Honduras. La pregunta es si las empresas van a estar separadas del país, no van a pagar impuestos para Honduras, van a pagar para sostener las mismas ZEDES.

Están separadas en materia aduanera, ellos tienen su propio sistema aduanero, su propio sistema tributario, su propio sistema de justicia, sus propios tribunales. Ellos van a nombrar sus jueces.

También está el hecho de que hay un régimen de propiedad privada muy riesgoso, porque ellos tienen la facultad de lograr que se expropien las tierras que necesiten para su construcción. Es más, la Ley dice que pueden decidir ampliarla, el gobierno les ha dado facultad para ampliar y obtener la expropiación de los terrenos aledaños.

RP. ¿Qué le queda por hacer a la ciudadanía con el tema de las ZEDES?

EO. Por allí andan recogiendo firmas. Están planteando pedir un referéndum. Esas cosas resultan inútiles. Recursos de inconstitucionalidad ya no caben, ya se han presentado varios. Eso nos dice claramente que, si ya se han declarado con lugar o se han desestimado, uno nuevo que se presente sobre los mismos hechos, con los mismos argumentos no se va a aceptar.

Y en cuanto al Referéndum, yo no sé si la gente que lo está pidiendo sabe en qué consiste. Hay que hacer un trámite que es lo más complicado y no será aprobado por el Congreso Nacional. Ya los medios legales se agotaron. Las poblaciones deben tener clara una cosa y es que las ZEDES, son entidades soberanas y como tal allí van a aplicar los convenios que ellos suscriban. Los tratados que tiene suscrito Honduras ellos no están obligados a cumplirlos.

Necesitamos valor, dignidad, vergüenza. Cómo es posible que las ZEDES estén avanzando sobre los terrenos de la población hondureña y nadie haga nada. Que lo único que sean capaces de hacer son unas pequeñas manifestaciones que se van de una esquina a otra. Eso no va a revertir las ZEDES.

 Los derechos se pelean jurídicamente o por la fuerza, pero se pelean.


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