jueves, 27 de septiembre de 2018

Regidor de la Alianza de Oposición en Marcala se encuentra en condición de riesgo



Por Marvin Palacios

El joven regidor, representante de la Alianza de Oposición (PINU) en la Corporación Municipal de Marcala, departamento de la Paz, Marlon Calles, está siendo víctima de hostigamientos y amenazas,  por oponerse a proyectos hidroeléctricos, cuestionar al régimen ilegal de Juan Orlando Hernández  y denunciar casos de corrupción.
Una delegación del Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH) y periodistas del periódico digital www.defensoresenlinea.com visitaron el municipio de Marcala para dialogar con el regidor de la Alianza (partido PINU), Marlon Calles, quien ha experimentado una serie de situaciones que ponen en riesgo su integridad física y emocional, por su labor como representante del pueblo y como defensor de los derechos humanos.

El regidor Calles hace uso de su libertad de expresión para rechazar el régimen ilegal de JOH
El joven político Marlon Calles surgió en Marcala como un líder comunitario, brindando asistencia social a las comunidades más pobres y acompañando las luchas del pueblo.

Salió de las filas del partido Nacional por presiones de la dirigencia política, que le presionaba para que abandonara su candidatura a cambio de dinero. Aspecto que él se negó a negociar y decidió postularse como candidato  a alcalde en las planillas de la Alianza de Oposición, donde tuvo el apoyo del diputado Abel Benítez.

“Los incidentes comienzo a recibirlos, desde  que yo decido no aceptar lo financiero o cuando decido no venderme al sistema, al actual régimen que hoy nos tiene sumisos”, sostuvo el regidor.

Indicó que al inicio iba como candidato en la planilla de Eva Fernández, después ellos sabían que tenía muchísima gente que podía hacer perder a la candidata que ellos llevaban, y es en donde ellos me ofrecen determinada cantidad de dinero, para poder dejar mi candidatura y poder seguir en el partido.

“Cosa que yo no acepté por el simple motivo de que yo les dije que no había entrado a la política con el fin de hacer dinero,  había entrado con el fin de ayudar a mi gente, por lo tanto no iba a desistir de mi candidatura, y es ahí donde comienzan las amenazas en mi contra”, afirmó Calles.

El joven indicó que su decisión disgustó a los nacionalistas, por lo que le enviaron 3 negociadores, entre ellos como última opción, a la vice presidenta del partido Nacional, Gladys Aurora López, quien lo conminó a aceptar el ofrecimiento.

Ante la insistente negativa, Gladys Aurora López le respondió “que me podía arrepentir de la decisión que estaba tomando y yo le dije que si eso era una amenaza, que yo a ella y a ellos nos les temía, que miedo solo a Dios”.

Consultado acerca de si la diputada Gladys Aurora López es muy poderosa en el departamento de La Paz, Calles respondió que “en efecto, recuerde que ella tiene un precedente, y es que las cosas ellos están acostumbrados a hacerlas con dinero y el que no se dobla con dinero; buscan la forma de doblárselo de otra forma”.

La Corporación Municipal de Marcala está conformada por el alcalde de filiación liberal, Rigoberto Villatoro, 3 regidores liberales, 3 nacionalistas, 1 de LIBRE y 1 del PINU, que recae en Marlon Calles.

Por sus constantes denuncias y cuestionamientos, Calles ha recibido amenazas a través de llamadas telefónicas, en donde se le advierte que guarde silencio, porque de lo contrario lo van a callar.

El pasado 15 de septiembre, el pueblo de Marcala manifestó su  repudio a Juan Orlando Hernández en Marcala y a los militares.
“Tiene mucha, mucha  influencia, al parecer los liberales creen que la corporación ya no es liberal, sino que es otro nacionalista más que logró llegar a esa corporación y controla todo”, señaló.

Las amenazas y las intimidaciones comenzaron desde que llegó a la alcaldía de Marcala. El joven político demandó la salida inmediata de una hidroeléctrica que entró en el período pasado, cuando la nacionalista Gloria Argueta se desempeñó como alcaldesa.

Calles explicó que la mayoría de concesiones vienen desde el gobierno (de facto) de Micheletti, y fueron otorgadas a Gladys Aurora López, a través de “Inversiones Aurora”, que cuenta con capitales multimillonarios.

La represa a la que se refiere el regidor, está en un 50 por ciento de construcción en el sector de Coral de Piedras dentro del municipio de Marcala, se ubica a 15 minutos de la ciudad y permanece fuertemente resguardada por militares. El acceso es restringido, incluso para él; que es una autoridad local y representante del pueblo marcalino.

Más tarde el regidor exigió la salida de las pilas de oxidación, que mediante un fallo, unas tierras que pertenecían a Marcala, les fueron otorgadas a otro municipio con el fin de librarse de una demanda; porque dichas pilas contaminan los mejores ríos del municipio.

La pilas de oxidación pertenecen al municipio de Chinacla, pero fueron construidas en Marcala, y mediante arreglos políticos, se cedió el territorio, aspecto que actualmente está en litigio, aseguró Calles.

Otra aspecto que ha causado malestar fue la denuncia que hace poco Calles expuso, acerca de un proyecto habitacional construido para beneficio de familias pobres, que tiene un costo aproximado de 18 millones de lempiras, pero cuyas edificaciones se caen a pedazos, producto de los materiales de mala calidad utilizados en el complejo.

La fiscal cuyo nombre no reveló el entrevistado, le expresó que “en este país era mejor cuidarse, que si no estaba dispuesto en abandonar mi lucha en defensa de los recursos naturales, o que si me gustaría ser recordado como una Bertha Cáceres, yo le dije que ellos tenían el deber de actuar y que no iba a claudicar en mi lucha, aunque me costara la vida”
“Yo lo denuncié en medios locales y nacionales, dada la situación que ninguno se atrevía a denunciar eso, con lo cual recibí amenazas, amenazas públicas, en las cuales me dijo el señor alcalde que yo no debía tocar ese tema y que buscara la forma de arreglarlo. Yo le dije que ahí no había llegado por su partido y tampoco por él; que había sido el pueblo el que me llevó ahí y que por lo tanto había llegado a defenderlo”, señaló.

Añadió que denuncié el proyecto habitacional, que para mí es un robo más, porque constituye  un desfalco más a los bienes públicos, a los dineros del estado por diferentes medios, y él (el alcalde) me dijo públicamente, me prohibió tocar ese tema.

Por sus constantes denuncias y cuestionamientos, Calles ha recibido amenazas a través de llamadas telefónicas, en donde se le advierte que guarde silencio, porque de lo contrario lo van a callar.

El regidor también criticó fuertemente la concesión que se otorgó hace 5 años, de un mercado municipal a una cooperativa, en vista que los ingresos que se reciben son ínfimos, frente a las ganancias que se obtienen producto del impuesto que pagan más de 300 puestos de venta.

Calles detalló que de esa concesión, la corporación municipal percibe 15 mil lempiras, cuando sólo por el pago del uso de los sanitarios, se obtienen 25 mil lempiras mensuales.

“Entonces varios llegaron a hacer muchísimo dinero, y quieren seguir. Se han sacado cientos de acuerdos que no se han respetado, ellos no se han ido del local, y siguen siendo protegidos por el señor alcalde”.

Es por eso que recibí una amenaza, diciéndome que así como había sido el impulsor de sacar un acuerdo para que se fueran en 72 horas, también así luchara para que ese acuerdo no se ejecutara, porque después me iba tocar luchar para cuidar a mi familia.

Otra amenaza que recibió el joven regidor, está relacionada con la construcción de la hidroeléctrica que impulsa la empresa “Inversiones Aurora” en Marcala.

“En la cual me decían que dejara de tocar ese tema, del tema hidroeléctrico, porque si no, ellos iban a buscar la forma; o me callaba o me mandaban a callar”, señaló.

En vista de esta serie de incidentes, el regidor solicitó ayuda del Comité de Familiares de  Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), organización de derechos humanos,  que está dando seguimiento al caso, investigando si las autoridades competentes han realizado diligencias o si se ha ordenado brindar medidas de protección.

Para el caso, Calles dijo que en las oficinas regionales del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (CONADEH), extraviaron una denuncia relacionada a una detención ilegal, que estuvo cargada de abuso de autoridad, y que fue ejecutada por policías, dos meses antes de las elecciones generales de 2017.

Defender los bienes comunes y denunciar la ilegalidad y la corrupción, representa un alto riesgo en Honduras

Calles cree que esa detención, sin justificación alguna, fue propiciada para tratar de dañar su imagen ante el electorado.

“Eso tuvo como fin dañar mi reputación política, esa fue una detención que se produjo antes de las elecciones, en plena campaña. Fui detenido y enviado a la posta policial, en la cual tuvieron que llegar un abogado  y otras personas a sacarme. Yo pedí explicaciones sobre el motivo por el cual estaba siendo llevado a la Policía, y no obtuve respuesta”, comentó.

Según lo que tenemos entendido, la orden de la detención “pudo haber venido de Gladys Aurora López con el fin de dañarme, para afectarme políticamente”.

Yo busqué poner la denuncia en COFADEH, porque hubo una fiscal que me dijo que si yo estaría dispuesto a retirar la denuncia de mi detención ilegal en 2017, y yo le dije que no.

La fiscal cuyo nombre no reveló el entrevistado, le expresó “que en este país era mejor cuidarse, que si no estaba dispuesto en abandonar mi lucha en defensa de los recursos naturales, o que si me gustaría ser recordado como una Bertha Cáceres, yo le dije que ellos tenían el deber de actuar y que no iba a claudicar en mi lucha, aunque me costara la vida”.

Junto a la advertencia que la fiscal le hizo a Calles, también le comentó que el caso era complicado, y que si había amenazas, que mejor parara de seguir haciendo lo que se dedicaba a hacer.

Calles sostuvo que sigue recibiendo hostigamientos por parte de personas del partido Nacional. En hechos recientes, hace un mes aproximadamente, tuvo que salir escoltado por la Policía, porque al parecer una de las dirigentas departamentales nacionalistas; tenía orden de agredirlo, durante un evento público en el cual, el voto del regidor era decisivo en torno a la escogencia de la elección para la Oficina Municipal de la Mujer.

Más reciente aún, y comprometido con su pueblo, Calles abandonó la mesa principal de la Corporación Municipal en pleno, durante los desfiles patrios del 15 de septiembre, y se unió a las manifestaciones populares que tildaron de asesinos a los militares que marchaban, y gritaban consignas de ¡Fuera JOH! y ¿Cuál Independencia?.

En esa oportunidad, el regidor le dijo al alcalde que se abstuviera de ordenar reprimir a las personas que hacían uso de su derecho de expresión. Posteriormente se bajó de la mesa principal, tomó una pancarta que decía ¡Fuera JOH! y se unió a la movilización popular que manifestó su rechazo el régimen de Juan Orlando Hernández y sus políticas represivas.

Por todas las amenazas que ha recibido durante su gestión como regidor de la Alianza de Oposición, Marlon Calles se encuentra en condición de riesgo y ha tenido que tomar algunas  medidas, para proteger su integridad física y emocional y la de su familia.

No hay comentarios: