jueves, 10 de marzo de 2016

Miles de personas despiden a Berta Cáceres



Miles de personas le dieron el último adiós este sábado a la magnánima dirigente indígena lenca Berta Cáceres, asesinada el jueves en La Esperanza.

Durante su vela y sepelio, la multitud de personas que llegaron de distintos lares, demandaron justicia, cuando aún no hay señales de los autores del crimen.
"Justicia, justicia", "Berta vive, la lucha sigue, sigue", gritaban los asistentes al sepelio, procedentes de diferentes zonas del país, mientras trasladaban el féretro en un oficio religioso antes de ser llevado al cementerio de la ciudad natal de la asesinada, coordinadora del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh).
Los restos de Cáceres fueron llevados a eso de las 11:00 de la mañana a la ermita lenca La Gruta, para recibir los oficios religiosos, donde acudió el pueblo lenca y otras etnias en una multitud.
La Gruta, la blanca ermita fue testigo del mar de gente que llegó para participar de una misa y un programa especial preparado por líderes de organizaciones ambientalistas de Guatemala, El Salvador, Nicaragua y Honduras.
Después sus restos fueron llevados a su última morada en el cementerio general de La Esperanza, ciudad que fue testigo de sus grandes luchas a favor de los pueblos indígenas.
El sepelio de la lideresa indígena, que fue asesinada a primeras horas del jueves por desconocidos que ingresaron a su residencia ubicada en la colonia líbanos de su natal La Esperanza, se realizó en medio de cánticos, bailes, dolor y exigencia de justicia.
Hombres y mujeres lloran su partida física. Las expresiones de dolor no se dejaron de escuchar.
"Perdóname Bertita, perdóname porque no pude comprender tu grandeza", le dijo su exesposo, Salvador Zúniga y padre de sus cuatro hijos.
¡Berta Vive! gritaba la multitud en agradecimiento a la líder lenca. "Gracias Berta, serás ejemplo para las presentes y futuras generaciones", expresaba la multitud mientras acompañaban el féretro por las distintas calles de La Esperanza camino a su última morada.
Al sepelio de la dirigente indígena llegaron miembros de organizaciones de Estados Unidos, Suiza, Brasil, México y Centroamérica, quienes rindieron un homenaje para quien con sus convicciones transformó la vida de los pueblos indígenas de Honduras.

No hay comentarios: