sábado, 6 de octubre de 2012
Informe sobre Desarrollo Humano Honduras 2011
Por Hugo Noé Pino
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en Honduras ha hecho una importante contribución a la discusión y búsqueda de soluciones de los problemas nacionales con la publicación recientemente de su Informe sobre Desarrollo Humano 2011 (IDH).
Bajo la coordinación de Mario Posas y con la contribución de un grupo destacado de investigadores se escogió como tema principal la reducción de la inequidad como desafío impostergable. A tal efecto se define la inequidad como aquellas desigualdades que se consideran injustas, innecesarias y socialmente remediables. El trabajo se concentra en cuatro dimensiones de la inequidad: la económica, la social, la política y el acceso a la justicia.
En su desarrollo “se realizó un riguroso proceso de investigación en el cual se empleó una metodología altamente participativa e incluyente. Con el valioso apoyo del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), se levantó la Primera Encuesta Nacional de Percepción sobre Desarrollo Humano (ENPDH) enfocada en los temas de inequidad y movilidad intergeneracional” (IDH 2011, pag.5).
Los análisis y la información contenida en el Informe deberían ser estudiados por todos los sectores de la sociedad dado que presentan una radiografía de nuestra realidad y además contribuye con recomendaciones de cómo superar situaciones adversas. Se destaca el papel de las políticas públicas en “nivelar el campo de juego” entre los sectores de la sociedad.
El Informe nos muestra cómo la mayoría de los hondureños y hondureñas tienen una clara percepción de las profundas inequidades existentes en el país, pero tal vez lo más preocupante es la percepción de la mayoría de que estas inequidades están aumentando. Esto debería llamar fuertemente la atención de la élite política y económica de Honduras.
Entre los datos que presenta el IDH podemos destacar el empeoramiento de la desigualdad medido por el coeficiente de Gini que de un nivel alto de 0.564 en el 2001 se encuentra en 0.580 en el 2011. Las desigualdades en la distribución del ingreso son tan grandes que el 10% de la población de más bajo ingreso únicamente recibe el 0.7 del ingreso nacional, mientras que el 10% más rico recibe el 40.6%.
La investigación muestra en detalle que la desigualdad proviene de la falta de acceso a un mercado de trabajo que genere trabajos de calidad, a una educación de mayor cobertura y calidad, la carencia de más y mejores servicios de salud e infraestructura económica. Pero también se enfatiza la falta de acceso a las decisiones políticas y de justicia.
El tema de las desigualdades está siendo discutido en varias instancias; recientemente la Cepal publicó un estudio denominado “Cambio estructural para la equidad”, el cual fue presentado en la Asamblea General de finales del mes de julio en El Salvador. Por su parte, el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi) hizo público en marzo pasado su segundo informe regional “La Política Fiscal de Centroamérica en tiempos de crisis” en el cual utiliza la equidad como tema transversal.
Esto no es casual, Centroamérica después de un período de crecimiento muy fuerte entre el 2004 y 2007 se ha visto vulnerable a la crisis internacional del 2008-2009. La caída de la producción en ese período y la incipiente recuperación posterior han producido un agravamiento de problemas como el empleo y el ingreso con los resultados que se muestra en el IDH.
Para ilustrar la importancia de las políticas pública para superar esta situación, hacemos referencia a publicaciones de la Organización para el Cooperación en Desarrollo Económico (OCDE) que muestra a que la situación de distribución del ingreso en Europa es similar a la de América Latina antes de la aplicación de la política fiscal, pero que disminuye sustancialmente después de las intervención de las políticas públicas. No obstante en países como Honduras la política fiscal por su carácter regresivo, más bien aumenta la desigualdad. En este sentido el IDH presenta una serie de medidas que habría que considerar con mucha seriedad.
Finalmente, entre los aspectos relevantes del Informe es la propuesta de un Pacto Social en el cual converjan diferentes sectores políticos y sociales del país para lograr consensos mínimos en varias áreas. Para ello se podría aprovechas el marco electoral del próximo año para lograr que los candidatos y candidatas a la presidencia puedan comprometerse a un mecanismo como éste de concertación.
En relación a un tema que por su importancia nos hubiese ver tratado en el IDH es de los efectos del cambio climático sobre el desarrollo humano, porque este fenómeno afecta principalmente a los sectores más pobres de la población. Finalmente, una recomendación, a fin de que la riqueza de la investigación se pueda difundir a amplios sectores de la población, sería muy útil contar con una versión popular que presente sus principales hallazgos.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario