A cuatro días de instalarse la mesa mediadora, el Movimiento Estudiantil y las autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) firmaron un segundo acuerdo en el que se comprometen a implementar y respetar la metodología propuesta por los facilitadores del diálogo para abordar las reformas a las Normas Académicas.
La segunda recomendación de la mesa mediadora está fundamentado en la necesidad de promover un diálogo permanente y abierto y así cumplir con el derecho a la educación.
Entre las recomendaciones aceptadas por la UNAH y Movimiento Estudiantil, destacan la suspensión de algunos artículos más dañinos de la normativa, entre ellas: la tabla de unidades valorativas y el cobro de servicios a los estudiantes.
Además se exhortó a continuar aplicando la readmisión condicionada de estudiantes afectados por la aplicación de esta norma durante el segundo y tercer período de 2016 y primero de 2017. “Los estudiantes que no cumplían con el índice de permanencia podrán acceder a una readmisión condicionada”.
“La mesa mediadora encuentra suficientes elementos que obligan a revisar los contenidos de estas normas, puesto que contienen disposiciones que no solo afectan al estudiantes sino que tienen impacto en la institución. Por lo tanto recomienda realizar un análisis excepcional durante la revisión. Mientras dure ese proceso se recomienda la suspensión de esas normas”, recomendó la mesa mediadora integrada por: Miriam Miranda de la Organización Fraternal Negra de Honduras (OFRANEH), Carlos Posas, presidente de la Asociación de Egresados de la UNAH, Mauricio Díaz Burdeth del FOSDEH, y como testigo de honor el sacerdote Ismael Moreno director del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación (Eric).
Rutilia Calderón, vicerrectora académica, en relación al inicio de las clases dijo que en la sesión mensual ordinaria del Consejo Universitario presentarán una propuesta fundamenta en las necesidades de los estudiantes de reingreso y primer ingreso.
“Lo esperado es que el Consejo Universitario debata y apruebe esa propuesta con las modificaciones (calendario académico) que el Consejo Universitario considere, de tal manera que les pedimos un pequeño compás de espera, pero de mañana no debe de pasar dar a conocer lo que se apruebe como disposición para lo que resta del año”, aseguró.
Cátedra de diálogo para la sociedad hondureña
Por su parte, Miriam Miranda finalizó su participación reflexionando e invitando a las autoridades universitarias y la comunidad estudiantil a no perder la capacidad de ser tolerantes y conversar en un país que urge de procesos de diálogo.
“Para mí ha sido una cosa maravillosa, aprender con mis colegas pero también encontrarme autoridades de la Universidad muy dispuestas a escuchar, a dialogar. Ojalá que tenga el fruto que ustedes como estudiantes están esperando, pero se da un paso significativo para el pueblo hondureño porque recordemos que no es un problema de los estudiantes y la universidad, es de país”, reflexionó Miranda.
Durante el proceso de mediación y diálogo en el que se discutió la metodología para las reformas de la normativa académica “se logró dar un ejemplo de cómo se construye una sociedad democrática”, manifestó el intermediario Mauricio Díaz Burdeth.
“Hay muchas cosas que deberán ser tomadas en cuenta aquí, no solamente por los partido políticos, no solamente por aquellas instituciones que están marcadas por el fracaso sino por todos aquellos que estamos deseosos de tener un país que resuelve sus cosas con diálogo, con propuesta y ahora podemos agregar con elevada propuesta técnica que va a ser construida por todo”, puntualizó Díaz.
El padre Ismael Moreno expresó que las diferencias jamás deberán ser obstáculo para encontrar las afinidades que lleven al bien común: “por lo tanto, creo yo que lo que dije cuando comenzamos este proceso, ustedes estudiantes universitarios, ustedes autoridades universitarias han dado a la sociedad hondureña una gran cátedra de cómo dialogar”.
Agregó que “no es ni el autoritarismo, no es ni la imposición, no es ni la guerra lo que resuelven los grandes problemas humanos, sino la búsqueda de consensos a partir de la apertura a lo diferente y a la escucha de las posiciones que no necesariamente son las mías”.
Fausto Cálix, dirigente del Movimiento Estudiantil Universitario (MEU), dijo que “han dado cátedra de diálogo dentro de la Universidad y para el país. La contundencia del movimiento, esa lucha constante que nos ha acompañado el padre y la madre de familia y el pueblo hondureño en general hoy está dando resultados, podemos decir que la lucha es justa y necesaria”.
La mesa mediadora recomendó a las autoridades universitarias y movimiento estudiantil establecer una instancia de monitoreo y verificación de cumplimiento a las recomendaciones para el abordaje y reforma a las Normas Académicas de la UNAH.
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