lunes, 7 de marzo de 2016

MACCIH en las honduras catrachas: Dos opciones



La MACCIH ya está en Honduras, ¿saben sus miembros en qué Honduras se han metido? ¿Están realmente interesados los señores de la MACCIH meterse en estos vericuetos hondureños para saber que esta nuestra Honduras es mucho más que conferencias de prensa, hoteles capitalinos,  y reuniones oficiales con el gobierno y con algunas de las organizaciones capitalinas?

¿Acaso está interesado el señor Juan Jiménez y sus colegas de la MACCIH saber a carta cabal quiénes son como interlocutores Juan Orlando Hernández, y sobre todo quién es realmente el canciller Arturo Corrales Álvarez? La MACCIH ha llegado a Honduras, pero sus miembros necesitan conocer todas sus profundidades para comprender sus complejidades, y así entonces dar respuestas conforme a las demandas de toda la sociedad hondureña.

Hemos de suponer que los miembros de la MACCIH están sobradamente enterados de que han de superar el escollo de venir bajo la sombra de haber firmado un convenio con el ciudadano presidente que fue la persona más repudiada en las consignas indignadas del año pasado. Y han de estar de sobra enterados de que han venido a Honduras trayendo entre sus manos un convenio de alianza con el gobierno acusado de haber llegado al poder con el empujoncito de dineros saqueados del Seguro Social.

La MACCIH está en la obligación de meterse a fondo en estas Honduras, no solo en casos individuales o específicos, sino tocar los sistemas productores de impunidad y corrupción y que han contribuido a la ruptura de la independencia de los tres poderes del Estado.

Si de verdad quiere la MACCIH dar un servicio en la lucha contra la corrupción y la impunidad, ha de tocar de frente el Consejo Nacional de Defensa y Seguridad, la estructura política y militar en torno a la cual se establece quiénes son los que en Honduras toman las decisiones, y la subordinación de todos los poderes del Estado y del Ministerio Público a las decisiones personales del ciudadano presidente de la República, Juan Orlando Hernández.

Y si de paso se toca de frente el sistema de partidos políticos, el uso y orígenes de dineros para las campañas políticas, sin duda ese hilo llevará a que finalmente se investigue al propio presidente de la República. La MACCIH ya llegó a Honduras. Y tiene delante de sí dos opciones: la primera, quedarse en sus superficialidades, y entonces va derecho al fracaso y a ser un factor más de desestabilización; la segunda, meterse con honradez en sus profundidades, entonces se encontrará con muchas sorpresas, y su futuro tendrá solo dos caminos: o sacar a flote todas las inmundicias de los políticos y sus aliados los altos empresarios, o renunciar porque no le dejaron tocar fondo. Cualquiera de estos dos caminos será un formidable servicio que necesita Honduras.

No hay comentarios: