miércoles, 2 de noviembre de 2011

La Policía pretendió involucrar el conflicto agrario del Aguán con muerte de universitarios


La Tribuna

La Tribuna reproduce las declaraciones brindadas por Castellanos al programa televisivo Frente a Frente de la Corporación Televicentro:

Julieta Castellanos: Este es un tema de Estado y como hemos ido viendo el desenvolvimiento de los hechos desde el día sábado y con lo que sucedió ayer, y lo que hemos conocido hoy de la denuncia de pérdida de armas, el asunto asume una dimensión donde constatamos la institucionalidad del Estado totalmente desmoronada, aniquilada prácticamente y el país gastando un presupuesto enorme en instituciones, pero sin institucionalidad; el Estado de Honduras pagando un costo por tener instituciones para que le funcionen a la ciudadanía; sin embargo, vemos instituciones que no corresponden, que no responden al Estado, la pregunta es ¿a quién le responden estas instituciones?

Para el caso la muerte de Rafael Alejandro y Carlos David pudiera ser una muerte como cualquier otra si procediera de delincuencia común, pero esta muerte violenta, este asesinato, reviste unas particularidades excepcionales porque los asesina una institución del Estado que está obligada a darle protección a la ciudadanía, esa es la diferencia.

Probablemente si la muerte de mi hijo y de Carlos David hubiese sido otro móvil, otro hubiese sido el escenario y la preocupación no tuviera la dimensión de Estado que debe de asumir, no solamente porque en la muerte de ellos participan 4 personas empleadas, 4 o más de una institución, sino porque estamos viendo toda una red de protección institucional, por lo tanto deja de ser un hecho individual para convertirse en un asesinato institucional.

Porque si la Policía o la Fiscalía hubieran actuado a tiempo el hecho se individualiza y dice, aquí no está la institución, porque la institución nos ha entregado, eso le da un carácter diferente, porque el individuo asume la responsabilidad frente al Estado, pero en este caso es la institución la que está impidiendo que el caso se desempañe. Sin lugar a dudas ellos no están protegiendo a los 4 o más involucrados que son de una categoría muy básica y un oficial que tiene, me han dicho, alrededor de 21 años, ellos están protegiendo las redes superiores.

Desde el día sábado por la modalidad del escenario del crimen estaba la sospecha que era la Policía y eso es porque a los sicarios no les interesa limpiar la escena del crimen. La Policía siempre limpia la escena del crimen, porque se protege, entonces, desde ya a las 3 de la tarde el vehículo y todo, mi hijo ya estaba identificado y Carlos David.

Muestras de tejidos 
Las características del escenario, la sospecha es que es la Policía; y eso hace que se tomen algunas precauciones. Tengo información que ellos colocaron todo en el vehículo, entonces, se tomó la precaución de tomar todas las muestras de tejidos y de sangre para desvirtuar que ellos habían consumido cocaína, había un polvo blanco en el vehículo.
Entonces, esa tesis no pueden sacarla porque nosotros resguardamos pruebas en distintos lugares para que no fueran a salir con esa tesis y ustedes vieron que ellos a través de la prensa sacan el sicariato policial, tratando de vincular que Carlos David es hijo de un funcionario de don Miguel Facussé, cosa que yo en realidad no sé, si es así o no, pero ellos tratan de involucrar entonces al MUCA. ¿Quién podría estar interesado en un atentado contra un hijo de un funcionario o un empleado de Miguel Facussé?

Los problemas en conflicto que están en el Aguán, entonces, sacan esa tesis, ¿quién la puede filtrar a la prensa?, solo la Policía. Y a veces los medios de comunicación con la intención de tener la primicia facilitan que la Policía introduzca esas hipótesis que siembran duda. Nosotros, el equipo nuestro, inmediatamente ya se pone en alerta, sobre todo en cuanto a resguardar las pruebas y a conducir la prueba científica; haber conducido la prueba científica de esta forma les quita a ellos las tesis que tenían que ver con otras explicaciones y eso fue muy importante porque no pudieron sacar ningún elemento, o sea, tuvieron que verse obligados a mentir.

“Indicios Suficientes”
Para el día martes, al Presidente Lobo le informan. El día martes a las 5 de la tarde, aproximadamente, a él le informan que hay indicios suficientes de que la Policía ha ejecutado a los dos jóvenes. El Presidente al parecer, esto no lo tengo constatado, inmediatamente se comunica con la Secretaría de Seguridad y es probable que así haya sido, porque la Policía me llama a mí para que lo reciba con urgencia y tienen una información que darme, son aproximadamente las 6 de la tarde y les digo que no los quiero recibir en la noche por la seguridad de mis otros hijos y que los voy a recibir el día siguiente en la Universidad a las 8 de la mañana.

A la reunión de la Universidad llegaron el comisionado Marco Tulio Palma Rivera, el comisionado Julio Mejía y el comisionado Rafael (…) ellos en presencia de autoridades universitarias admiten que la Policía está involucrada. Era el miércoles a las 11 y media de la mañana y ese mismo día habían ido a requisar 10 patrullas y los fusiles. Los fiscales fueron amenazados por el director de Homicidios de la Policía Preventiva, cuando yo ya tengo la constatación de que la Policía está involucrada, de boca de ellos, yo le hablo al Presidente Lobo y le pido que me reciba, conversamos hora y media.

El Presidente Lobo me hace ver su indignación, su voluntad de que esto se investigue y sobre todo yo le pregunto que si hubiese necesidad de que el FBI intervenga, que si él estuviera dispuesto a enviar una carta de invitación, él me dice que sí, que si la embajada necesita esa carta, se la damos y que él la va a hacer. Estamos hablando del día miércoles.
Yo le dije que el vehículo lo necesitaba el día siguiente para hacer un mandado temprano, nosotros compartíamos el mismo vehículo porque solo tenemos uno en la casa, es un carro del año 2001; yo le dije, voy a ocupar el carro temprano Alejandro y me dijo no hay problema mamá, yo voy a estar a las 8:00 de la mañana, y lo llamé para ver si había salido de la casa de los Pineda, el teléfono no me daba señales de él, pero no me extrañó porque a veces se le descargaba, entonces mi hijo mayor me escuchó que yo tenía que salir y que Alejandro no llegaba y no me contestaba, y me dijo la voy a llevar mamá, andaba haciendo aquí en Tegucigalpa los mandados cuando ya recibí la llamada de un amiguito de ellos, otro amiguito, que no estaban donde los Pineda, que los andaban buscando, que no los encontraban. Ahí me desesperé porque no era costumbre de ellos amanecer en algún lugar. O dormían en mi casa, o en la casa de los Pineda, o dormían en la casa de los Carbajal. Entonces Mario Carbajal me llama y me dice, doña Julieta, Alejandro no está, ni está Carlos, y bueno ahí ya pensé que era un secuestro el que habían hecho.

Tienen vídeos para identificar las patrullas  
Entonces con ese dato, nosotros como sabíamos la ruta, de dónde salieron y para dónde iban, el equipo nuestro identificó las rutas posibles y todos los videos de la zona, todos los posibles, y creo que fue la Fiscalía la que pidió que fueran entregados. Pero los videos los tiene la Fiscalía, la Policía a mí me llama el martes para decirme que ellos tienen videos para identificar las patrullas.

Entonces a mí no me parece y les digo ustedes no veían los videos para identificar la patrulla porque la ciudad está dividida en cuadrantes, y ustedes saben qué patrulla está en cada cuadrante. Pero además de eso, ustedes dieron una bitácora que ustedes saben quiénes andaban en esa patrulla; no ocupan los videos. Nosotros teníamos la duda que si nosotros entregábamos los videos ellos los fueran a manipular y se perdiera la prueba. O sea, la prueba de la investigación ha estado del lado de la Fiscalía. Nosotros teníamos mucha confianza en la Fiscalía porque la investigación no la estaban dirigiendo, los elementos de prueba no los tenía la Policía, sino que los tenía la Fiscalía.

La Fiscalía, el martes, entre 5:00 de la tarde y 8:00 de la noche, ya tiene todos los videos de la zona, ahora, hay un hecho que nosotros en esta situación vienen dos tipos de pruebas: los videos y las patrullas que ya están decomisadas, y vienen también las pruebas de sangre.

Cuando decomisan las 10 patrullas, mire usted, hay 10 patrullas, todas están sucias, excepto una que la han lavado.

- ¿La 103 ó 104?
JC: No sé realmente, hay tres patrullas a las que les hacen las pruebas de luminol, y entiendo yo, por lo menos lo que me han informado, es que de las 10 patrullas, tres dan la prueba positiva de luminol, pero solo en una de ellas encuentran rastros de sangre, que la prueba de ADN ya arrojó que es la de mi hijo.
Mi hijo sale herido, porque es el que va conduciendo, es el que muere primero, entonces…

- ¿Al otro muchacho lo remataron?
JC: Yo me imagino que Carlos les ha de ver pedido que llevaran al hospital a Alejandro, se ha de ver puesto Carlos histérico, reclamándoles, lo han llevado vivo y lo han asesinado en la aldea. Mire, yo no quiero imaginarme los últimos minutos de la vida de mi hijo y de Carlos. Mi hijo muere primero, me imagino que se desangra, y frente a Carlos me imagino. Y es a mi hijo a quien ponen en la patrulla para irlo a dejar al lugar. El vehículo mío quedó moviéndose y lo llevan hasta la aldea y la patrulla va siguiéndolos, no sé quién lo conduce, pero a Carlos lo ejecutan en la aldea, a ocho kilómetros de la salida del sur, Alejandro ya va muerto.

Eso es lo que creemos, por el daño que tuvo él en su cuerpo, pudo haber muerto rápido.

- ¿O sea, a Alejandro no lo remataron?
jc: No he querido conocer detalles por lo doloroso que es esto para mí, pero sé que él tiene un disparo que le entra por la espalda que es probablemente el que lo mató. No he querido conocer en detalle, porque no quiero imaginarme los últimos minutos de mi vida y de Carlos, eso es para mí muy doloroso. Sin embargo, es ver un Estado desmoronado, ver un Estado fracasado y es la preocupación de que sigamos viviendo en este Estado lo que a mí me da la valentía de cambiar esto.

A mí no me importa dejar mi vida en el camino, en esta lucha. La voy a dar, la voy a dar. Porque no es posible que aquí las autoridades le den la espalda a los problemas, se hagan los desentendidos, no tengan pudor de cobrar un salario que no se ganan. Cuando uno dirige una institución es para hacerlo bien, y si no lo puede hacer bien, hay que dejar los cargos, pero no puede uno tener la inmoralidad de estar llevando a su casa un sueldo que no se gana dignamente y menos todavía estar desde una posición de funcionarios protegiendo asesinos, entonces, yo no he querido conocer todo el daño que tuvo mi hijo con el disparo, pero me imagino que Alejandro murió rápido pero Carlos no; entonces a Carlos lo llevan con vida hasta la aldea, lo bajan, lo asesinan y le disparan en la cara.

Ahora esto es toda una trama, cuando hay un dispositivo en la ciudad todas las patrullas alertan; y las postas se alertan y en este caso la posta de Loarque también es cómplice, porque la posta de Loarque despejó el camino para que ellos salieran por ahí.

Entonces yo les quiero hacer un llamado a los gobiernos que apoyan a la Policía; el gobierno de España; el gobierno de Taiwán, creo que el gobierno de Colombia, creo que el gobierno de Chile, que ya no sigan alimentado a ese monstruo.

Esta Policía no es ineficiente porque no tiene equipo, se están robando los fusiles y las municiones, no es ineficiente porque no tiene radio de comunicaciones, porque no tiene patrullas, miren para qué usan las patrullas, la Policía no solo es ineficiente, tiene en su seno a los asesinos, a los delincuentes. Entonces, con todo el respeto, porque yo sé que los gobiernos lo hacen con buena voluntad y creen que ayudan, con todo lo que está pasando; estos gobiernos deben de revisar sus políticas, porque están alimentando a un monstruo.
Donde no tienen ninguna voluntad, otros datos más que quiero plantear: ¿Por qué la Policía aunque dice que colabora, obstruye y por qué la Fiscalía ha tenido las pruebas también? Son dos cosas al mismo tiempo. Para el día viernes en la noche, recibí información que los biólogos y otros fiscales creo, habían sido perseguidos por policías que andaban en carros civiles y les quisieron decomisar las pruebas y que tuvieron que intervenir, tuvo que intervenir la seguridad del fiscal general para impedir que las pruebas fueran decomisadas, eso fue el día viernes en la noche.

Yo hablé al ministro de Seguridad ese día para ponerlo en conocimiento y le dije: señor ministro, tengo la información de que los biólogos y los policías, los investigadores en el caso de mi hijo, fueron perseguidos en la zona del Loarque; para decomisar las pruebas que traían de la escena del crimen de Carlos y que tuvo que intervenir la seguridad del fiscal general. El señor ministro me dijo que ya el fiscal general le había informado de eso, que ya estaba enterado él, pero además le dije: tampoco la Policía ha entregado el arma que tiene el oficial; adjudicada.

La Policía no ha querido entregar el arma, pero además hay un hecho que se me estaba yendo y es que en los videos se ven dos camionetas que participan, que se supone que son oficiales que están dando instrucciones. ¿Cómo deshacerse del cadáver? Están dando las instrucciones, los videos no son de tan buena calidad, porque son cámaras de la zona, son cámaras de los negocios de la zona, cuyo objetivo de ellos es capturar las entradas y el carro que va en movimiento; pues no son de tan buena calidad, pero se ha pretendido enviarlos a Estados Unidos para que los analicen.

Por último; el día sábado recibí una llamada telefónica que a la Fiscalía de Derechos Humanos le habían quitado el caso y que lo habían pasado a Delitos Comunes, cuando constanté y miembros del equipo nuestro hablaron con la señora fiscal de Derechos Humanos, la señora Sandra Ponce y ella confirmó que lo que se había hecho era integrar un equipo de las tres fiscalías: Derechos Humanos, Delitos Comunes y creo que Crimen Organizado, no pude constatar al final del día sábado, si al final el arma que estaba adjudicada era del señor oficial.

- ¿Al subinspector?
JC: Al subinspector; había sido entregada, eso no lo he constatado y, pero ya el día de ayer, pero el día viernes y este es un dato importantísimo, ayer el fiscal general me confirmó una versión que yo tenía, que el día viernes en la noche ya estaba la prueba de ADN y que el señor Presidente lo supo en la noche del día viernes, como a eso de entre 7 y media, 8 y media de la noche. Yo tenía esa información no confirmada…

- ¿La prueba de ADN de su hijo?
JC: (…) de mí hijo, que era la prueba de ADN de mi hijo, se constata por dos manchitas de sangre que hay en el pick up, la patrulla que habían lavado, la única patrulla lavada verdad, de las diez ahí estaban dos manchitas de la sangre de mi hijo, entonces yo tenía esa versión no confirmada; esperábamos que con esa versión la Fiscalía actuara el sábado temprano; mi pregunta es: ¿Por qué no lo hizo? Y esa fue la plática que tuve ayer con el señor fiscal general.

Ayer cuando yo hablé, cuando yo supe la noticia, a mí me llama un periodista para decirme que tienen confirmación de que no se presentaron los 4 policías que tenían de franco, no sabía yo que habían salido (…) no sabíamos verdad. Que si voy a dar alguna reacción, le digo que no, porque voy a esperar a ver qué pasa, porque no tengo ninguna información verdad, y luego cuando ya se confirma, yo hablo primero con el secretario de Seguridad y él me dice: le devuelvo la llamada.

En un momento, me la devuelve y me dice: estoy indignado, habíamos dado otras instrucciones. Le dije: mire, esto es realmente una burla, esto es indignante, aquí hay un problema de Estado, aquí el Estado se está haciendo parte de este crimen y esto; le digo; es una situación grave que yo la voy a denunciar, porque yo tengo toda la información de toda la semana, la hemos ido recabando y yo voy a decir, no solo la tengo yo, la tenemos un equipo grande.

Eso nos da a nosotros alguna seguridad, nos hace menos vulnerables. Después de eso hablé con el señor fiscal general y con el Presidente Lobo, el Presidente Lobo me dice: me acabo de enterar, estoy indignado como usted, le digo yo: Presidente ¿quién nos da garantía en este país, quién gobierna el país señor Presidente? Si usted dio instrucciones, si dio instrucciones al secretario de Seguridad, ¿cómo es que la Policía, que tiene una formación de mando jerárquico no obedece órdenes? ¿A quién le obedece la Policía? ¿Quién gobierna, quiénes son los grupos aquí que en este país, deciden, sino es el secretario de Seguridad, el fiscal general, que también me había dicho; estamos llevando el proceso? Yo hablo con el señor fiscal general en la tarde y en la plática, yo le hago varias preguntas.

Porque él me dice, me dijo el fiscal general: no teníamos la prueba científica suficiente. Como no, le dije, ya la teníamos, usted la tenía desde el día viernes en la noche y la tenía el Presidente también, entonces él ahí me dice: yo le informé al Presidente, yo le informé al Presidente, entonces yo ahí constato la versión que yo tengo, verdad, yo tenía una versión; pero yo la constato con el señor fiscal general.

Entonces, la pregunta es, primero dos cosas: esta investigación no la ha dirigido exclusivamente la Policía y para nosotros eso era un elemento de seguridad, que la dirigía la Fiscalía, si la Fiscalía la dirigía, para qué necesitaba un informe de la Policía, para dictar un requerimiento fiscal.

- ¿Ellos tenían ya pruebas?
JC: Ellos tenían, la Fiscalía tenía ya…

- ¿La prueba científica?
JC: El ADN de Alejandro confirmado, que era la misma prueba de sangre que estaba en la patrulla, el día viernes.

Entonces yo en este caso, yo miro tres tipos de cuestiones: primero la indefensión frente al Estado, aquí no hay Estado, hay una indefensión de la ciudadanía, hay una falta de respuestas, pero no realmente falta de respuestas frente al delito común, es que el Estado participa con sus instituciones en la ola de violencia que hay en el país, porque uno conocía de casos de robacarros, de otros delitos, de secuestros, donde decía: supuestamente la Policía está involucrada.

Imagínese usted; con todas las pruebas y ellos, ellos primero o sea ambas instituciones, tienen que dar una explicación, yo quisiera ver sentada a la abogada Sandra Ponce, al fiscal de Delitos Comunes y que nos expliquen ¿por qué teniendo ya el ADN desde el día viernes en la noche, por qué no emitieron un requerimiento fiscal ese día, si ya les habían dado permiso? Desde el viernes a mediodía parece, ya se habían ido siempre, pero ellos resguardaban su responsabilidad institucional, ellos son funcionarios públicos, yo soy funcionaria pública, yo trabajo con una institución del Estado, yo estoy obligada a responder por mi institución.

Mire, este es un caso donde ya amerita una reestructuración de todos, y no, y no es; como quiero aclarar, porque sea un homicidio de un (…) este, es un asesinato, no es un homicidio, si al final los jueces actúan bien; va a ser un asesinato, yo quiero decir: de todo esto los jueces no tienen nada que ver todavía, porque el caso no les había llegado, la Corte Suprema todavía aquí no ha intervenido. Aquí es: Secretaría de Seguridad – Policía.

Entonces esta es una caricatura del Estado, es una caricatura de país, no se merece el país, no nos merecemos nosotros como ciudadanos de este país; estas instituciones, y yo reitero mi llamado a los gobiernos del Reino de España, de Taiwán; creo como les digo; de Colombia, de Chile y otros más, de Estados Unidos; que no continúen alimentado un monstruo que se alimenta de sangre de la juventud de este país, un monstruo que llena sus cuentas bancarias, que su nivel de vida lo cobra con sangre, este país no se merece estas instituciones, ni estos funcionarios y en ese sentido yo les digo: estoy pasando por un dolor durísimo, hace 3 años falleció mi esposo, no había terminado de cerrar su período de duelo y ya he abierto otro, pero esta lucha la voy a dar, aunque deje mi vida en el camino.

- Pero a la hora de presentar requerimiento fiscales ahí está la duda de todos, el fiscal que le dice al Presidente ya tenemos el ADN y hemos comprobado que es el de las gotas de sangre de Rafael Alejandro y ahí se queda todo; faltó la voluntad del fiscal, faltó la voluntad del Presidente, faltó la voluntad de los dirigentes de este país y ahora la pregunta no es que si tenían o no voluntad; porque teniendo las evidencias, por qué no lo hicieron, esa es la pregunta. En un caso donde la rectora sospecha, están oficiales superiores formando parte de una red, es lamentable. Voy a la pausa comercial y escucharé a la vicerrectora académica en este caso, donde la rectora sospecha que pududieron, inclusive, poner droga en el vehículo, ¿de quién, rectora?
JC: El mío, porque es mi vehículo el que andaba Alejandro, nosotros solo tenemos un vehículo en la casa.

- ¿Le pusieron la droga?
JC: Sí, es lo que me informaron, que había un polvo blanco en el vehículo y que a raíz de eso, entonces, se tomaron las providencias para extraer de los muchachos todas las muestras para hacer la prueba si habían consumido droga o no. Como ellos saben que se tiene todas esas pruebas, entonces, nunca sacaron la tesis de que había sido un hecho de droga. Lo que sacan, entonces, es la tesis del sicariato; entonces, ellos se van a…

- ¿Eran policías sicarios?
JC: Que eran policías sicarios, porque el papá de Carlos Pineda trabaja con don Miguel Facussé, es la primera versión que sale en LA TRIBUNA, creo que el día martes, por ahí.

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