martes, 29 de noviembre de 2011

UNAH: Policía es la banda criminal más peligrosa de Honduras


Tiempo


La Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) justificó su propuesta de intervenir la Policía Nacional porque esta institución se transformó en una organización delictiva, y por el aumento acelerado de la inseguridad ciudadana.

Según el documento elaborado por el Alma Máter, el asesinato de los dos estudiantes universitarios Rafael Alejandro Vargas Castellanos (22); y su amigo Carlos David Pineda Rodríguez (24), acontecido en la capital el sábado 22 de octubre del presente año y perpetrado por miembros de la Policía Nacional, fue el detonante que precipitó la caída del telón que encubría las actividades delictivas de la Policía.

"Este asesinato se constituyó en un caso emblemático, pues ha sintetizado la indignación nacional ante miles y miles de muertes violentas que quedan sin investigar y por ello en absoluta impunidad", puntualiza la propuesta que se gestó a iniciativa de la rectora, Julieta Castellanos, madre de uno de los universitarios asesinados.

El documento también establece que la acción de los fiscales y medios de comunicación evidenciaron que más allá del apoyo de algunos policías a bandas delincuenciales, la propia Policía ha actuado como una banda que ejecuta graves acciones ilícitas. El documento establece que la Policía se ha constituido en la organización delictiva que con mayor eficacia está destruyendo la convivencia en la nación, volviéndose por ello la más peligrosa.

La UNAH afirma que la Policía actúa bajo la protección de las leyes del Estado; es financiada con el dinero público, recursos que aportan los contribuyentes a través de impuestos y tasas.

Además indica que cada uno de sus miembros es una autoridad ante la ciudadanía, facultada y entrenada para el uso de la fuerza, para detener y capturar ciudadanos; que porta legalmente armas de fuego y otro tipo de armas; usa uniformes que simbolizan su autoridad y tiene a su disposición para usar a su entera voluntad y discreción las patrullas, equipos de comunicación, postas, celdas y toda una logística muy útil a la hora de delinquir.

Dirección Nacional 
La UNAH asegura que la Policía tiene adscrita como parte de sí misma a la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), y dice que con ello los propios policías deciden sobre los casos que se investigarán, los que no se investigarán y la celeridad o lentitud con que debe ser tratado cada caso.

Además, agrega, pueden manipular las investigaciones para implantar "pruebas", decidir sospechosos, ocultar a verdaderos hechores, dar falsas explicaciones y alterar de múltiples formas la investigación criminal a su propia conveniencia. Otra de las aseveraciones de la UNAH indica que en la gran mayoría de casos delincuenciales la Policía es, en la práctica, quien dirige la investigación criminal, aunque por ley esta es función del Ministerio Público a través de los fiscales.

Según el instrumento de la UNAH, la Policía controla totalmente sin limitaciones legales ni transparencia y en forma exclusiva los servicios de inteligencia, decidiendo así qué o a quiénes analizar y disponiendo de la información de inteligencia para los usos que ellos mismos dispongan.

También afirma que la Policía recibe denuncias ciudadanas de todo tipo y las maneja y gestiona sin la menor transparencia y sin acceso de los ciudadanos a la información real que les permita el seguimiento de sus casos. Ello permite que la misma Policía descarte o deje de considerar las denuncias en que están involucrados sus propios miembros, añade.

Apreciaciones 
Según la UNAH, la ineficacia deliberada de la Policía ha conducido a la creciente pérdida de soberanía del Estado sobre territorios en todo el país. Con la complicidad de la Policía son cada vez más las áreas gobernadas por el crimen organizado, en las que no imperan las leyes de la República sino el mandato de los delincuentes. En dichos territorios la Policía opera al servicio de ellos.

Nuevos Actores
Otra de la justificaciones para que se dé la depuración policial, dice la UNAH, es que la delincuencia común ha quedado relegada ante nuevos delincuentes que agreden en mucho mayor escala a la ciudadanía, y cuya característica central es que operan con un alto grado de organización.

No hay comentarios: