La rectora de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), formuló hoy la denuncia pública del caso.
“Quiero iniciar esta presentación, haciendo una denuncia que no ha trascendido en los medios de comunicación. El día miércoles, nueve de noviembre, entre la 1:30 y 2:00 de la tarde, sufrió amenazas y atentado, el joven Gabriel Álvarez Pageth (19), estudiante de la Universidad Católica de Honduras e hijo del periodista Renato Álvarez” dijo la rectora Castellanos.
La declaración fue realizada en el inicio de una jornada donde la máxima casa de estudios de Honduras presentó ante la sociedad civil su propuesta de seguridad ciudadana y en contra de la violencia en esta nación centroamericana, desbordada por la creciente violencia que cobra al menos 20 víctimas mortales por día.
La rectora continuó diciendo que “frente a su casa, [la vivienda del periodista Renato Álvarez] estaba un vehículo estacionado con tres hombres; dos se bajaron del vehículo y le pusieron una pistola en la cabeza por cada lado [al joven Gabriel]. Vecinos que se percataron salieron y afortunadamente, el hecho no tuvo otras consecuencias.”
“Lo particular”, -señaló la rectora- “es que ellos viven en una colonia que tiene una barra de entrada y no hay registro del número de placas del vehículo que ingresó. Este hecho, la misma tarde del día miércoles, fue de conocimiento del Comisionado de Derechos Humanos, quien me lo informó a mí; además, yo lo sabía por otra vía e inmediatamente trasladé la información al señor Presidente de la República y a la Designada Presidencial, la abogada María Antonieta de Bográn”.
Julieta Castellanos prosiguió aseverando que, “sin lugar a dudas, estos actos están dentro de la cadena de intimidaciones contra diferentes sectores que nos estamos ocupando del tema y es tiempo de que esta información no quede en el ámbito privado, ni privado institucional, sino que trascienda para que se valore la magnitud del problema y para que exijamos que estos cuerpos de represión, de intimidación, sean investigados y desarticulados, lo que lleva de manera inexcusable a un intervención inmediata de la policía nacional”.
Álvarez dirige el noticiero TN5 de la corporación Televicentro en su edición estelar y además conduce el foro televisivo Frente a Frente que se transmite cada mañana.
Desde que se denunció la red criminal que opera desde la Policía, desconocidos en carros sin placas efectúan “inspecciones” en las cercanías a la casa de Renato Álvarez, uno de ellos incluso se bajó de uno de los carros, mostró su pistola y señalaba la casa del comunicador cuando hablaba por teléfono, según testigos.
Eso fue hace dos semanas. Las intimidaciones van desde “pláticas casuales” por terceros acerca de operaciones de los escuadrones de la muerte en los años ochenta, hasta […lo sucedido] el miércoles por la tarde: dos desconocidos en una camioneta sin placas salieron al paso de uno de los hijos del periodista Álvarez.
Justo frente a la casa del periodista, le pusieron una pistola en la cabeza, no le robaron la billetera y solamente se llevaron sus cuadernos de la universidad y su mochila, así como el celular que portaba en sus mano.
Uno de los habitantes de la cuadra se habría percatado, gritó y los sujetos huyeron. La vigilancia del lugar, en principio, negó que hubiera ingresado a la colonia un vehículo sin placas, pero luego cotejó en sus registros que en efecto el carro desconocido sí había entrado y todo apunta que esperó a que llegara el hijo del comunicador para efectuar la intimidación.
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