Por Natasha Pitts *
Más de un mes después del terremoto de magnitud 7,3 en la escala Richter, que destruyó gran parte de Haití, la población de este país continúa necesitando con urgencia atención y solidaridad mundial. Agua y alimentos todavía son los géneros más solicitados por los que están en campaña para ayudar a reparar los daños. Sin embargo, la intensificación de actividades relacionadas con la protección de la infancia está siendo también considerada urgente.
Entre los cerca de 3 millones de afectados por la catástrofe hay 1,2 millones de niños. Debido al número elevado, incluso con los esfuerzos del gobierno haitiano y, sobre todo, de organizaciones no gubernamentales y del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), la atención orientada a la oferta de educación, nutrición, salud y vivienda para los niños necesita todavía ser intensificada. Según Unicef, 29 organizaciones están compartiendo informaciones y recursos para proteger a los niños en Haití.
Un relevamiento realizado por el Movimiento Socialista Haitiano constató que cerca de 10 mil niños y niñas están viviendo en condiciones subhumanas. La mayoría perdió a sus padres y familiares durante la tragedia del 12 de enero y está dependiendo exclusivamente de la buena voluntad de los voluntarios. Por la situación de vulnerabilidad de las pequeñas víctimas, las entidades también están redoblando la atención para que no se favorezca el tráfico de niños haitianos.
Para evitar delitos como el tráfico y el abuso sexual, se están creando mecanismos de búsqueda de padres y familiares de los niños hasta ahora sin compañía de un adulto. Unidades de protección de la infancia del Ministerio del Desarrollo Social están monitoreando el movimiento de salida de niños en el aeropuerto de Puerto Príncipe y en las zonas fronterizas para evitar e impedir su salida ilegal del país.
Para no dejar que la situación de Haití caiga en el olvido, Unicef lanzó el último día 10, en Brasil, la campaña "Yo, tú y Unicef: juntos por los niños de Haití". La intención es continuar recaudando fondos para fortalecer el trabajo de Unicef y demás agencias de la ONU que están en Haití prestando atención especial a los niños víctimas del terremoto. Los interesados en participar de la acción pueden hacer donaciones por el sitio de Unicef o depositar cualquier monto en la cuenta de la entidad (Agencia 3382-0/Cuenta Corriente Nº 404700-1/CNPJ de UNICEF: 03.744.126/0001-69).
Según informaciones del gobierno haitiano, por lo menos 212 mil personas murieron, 300 mil quedaron heridas, y 1,1 millón están desamparadas. Prácticamente no hay más escuelas, hospitales o iglesias en el país. El palacio presidencial, ubicado en la capital Puerto Príncipe, también se vino abajo por la intensidad del terremoto.
Ocupación militar
En un comunicado divulgado mundialmente el martes 16 de febrero, el Movimiento Socialista Haitiano pide la unión de los pueblos en suelo haitiano y repudia la insistente ocupación militar estadounidense en el país. Después de la tragedia, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) comenzó el envío en masa de militares para reforzar la Misión de Estabilización de las Naciones Unidas (Minustah) y mantener el orden en el país, aunque la necesidad mayor es de alimentos, agua y medicamentos.
Traducción: Daniel Barrantes - barrantes.daniel@gmail.com
* Periodista de Adital
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