Radio Progreso
Un Acuerdo de Cooperación de Asilo, ACA, entre Honduras, Guatemala y El Salvador por presiones de Estados Unidos, es exponer a los solicitantes a una situación de mayor peligro porque en estos países, no existen ni las mínimas condiciones para brindar seguridad a sus propios ciudadanos, denunció en el marco del 177 período de sesiones de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el director del Equipo de Reflexión, Investigación y Comunicación Eric-sj, Ismael Moreno.
“Situación de los derechos humanos de los migrantes refugiados, niñas, niños y adolescentes no acompañados de la región”, fue el tema de la audiencia ante la CIDH, a petición de las organizaciones de sociedad civil por el endurecimiento de las políticas anti-inmigrantes impulsadas por Estados Unidos.
En representación de Honduras participó el sacerdote jesuita Ismael Moreno.
Las organizaciones de sociedad civil expresan su preocupación por la restricción de derechos y disminución de garantías que en contexto de pandemia COVID-19, se han acrecentado para las personas refugiadas, solicitantes de asilo y las que residen en Estados Unidos y están bajo la amenaza de deportación.
La reciente caravana de migrantes que salió de Honduras a inicios de octubre, revivió el debate sobre los problemas que generan la migración en el país, (exclusión social, inseguridad y violencia, débil desarrollo socioeconómico), como elementos de fondo que han determinado los procesos migratorios en Honduras y los países del Triángulo Norte.
El padre Melo denunció que, el comportamiento del gobierno de Guatemala con los migrantes hondureños que integraban la reciente caravana, es un dramático ejemplo de la invalides de los ACA. Por lo tanto, esos acuerdos son más amenazas que oportunidades para los migrantes y refugiados, porque responden más a políticas discriminatorias del gobierno de Estados Unidos, país que ha traslado su frontera a Guatemala.
“En estos acuerdos prima más la represión y criminalización que la atención humanitaria y solidaria”, dijo asegurando que Estados Unidos ha trasladado su frontera sur a Guatemala, para contener la migración principalmente de hondureños y hondureñas. De igual manera apuntó que ese acuerdo de asilo responde al interés político que tienen los presidentes de Honduras, El Salvador y Guatemala de contar con el reconocimiento del gobierno estadounidense que al interés de procurar el bien a su población.
La Relatora sobre los Derechos de las Personas Migrantes de la CIDH, Julissa Mantilla, expuso que los países miembros de la Organización de Estados Americanos, OEA, están en la obligación de hacer cumplir tratados como la Convención Americana de Derechos Humanos, que está por encima de cualquier acuerdo de asilo que los países del Triángulo Norte hayan firmado con Estados Unidos.
Agudización
Para el director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales, Flacso– Honduras, Rolando Sierra, mientras las condiciones de vida en el país sean insostenibles para la población, la situación muestra una tendencia hacia la agudización de la crisis, no solo económica y política, sino también migratoria.
Rolando Sierra dijo en Radio Progreso que, Honduras está frente a una migración forzada que en los próximos meses podría agudizarse producto del incremento de la pobreza que estará dejando la pandemia, pero especialmente de la violencia que se vive en los territorios.
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