Ni feliz Navidad, ni feliz Año Nuevo

Vos El Soberano


Por Juan Tallapiedra

Resulta difícil desear felicidad y alegría en esta navidad que encuentra de luto al digno Pueblo de Honduras. Y resulta difícil porque, tradicionalmente, estas fechas se celebran bajo un contexto de espiritualidad y solidaridad, sin embargo esta vez nos embarga un profundo sentimiento de tristeza al saber que el pueblo ha sido violentado en sus derechos civiles y humanos.

Esta navidad nos encuentra bajo un régimen dictatorial despótico que ha asesinado a nuestros hermanos y hermanas, torturado, secuestrado, desaparecido y violado a nuestros compatriotas sin considerar si eran niños, niñas, mujeres, ancianos y ancianas, hombres, discapacitados, hondureños y extranjeros. Además se nos ha robado la libertad de expresión, de movimiento, de protesta, de elegir y ser electos, de vivir en paz. Esta navidad será de luto, y aunque debemos regocijarnos con nuestras familias, ningún hondureño bien nacido podrá dejar en el olvido a los mártires de esta guerra desigual del Pueblo contra la oligarquía empresarial-política-militar.

Sin embargo debe ser una época de esperanza, de retomar el sentimiento solidario que unió al Pueblo de Morazán alrededor de la heroica Resistencia Popular, de replantear los objetivos políticos que nos lleven a circunstancias sociales más justas y equitativas. A coger mas fuerzas para el futuro cercano para exigir el cumplimiento fiel de nuestros derechos. El provenir de Honduras está en nuestras manos y deberán servir estas fechas para reflexionar y prepararnos para las duras luchas que aun debemos librar.

Ni Feliz Navidad ni Feliz Año Nuevo…. Pero si solidaridad con las familias de los caídos, de los torturados, de los desaparecidos…reflexión a los líderes del futuro cercano, fuerza a los combatientes populares de hoy y mañana, salud y orientación a quienes seguirán.