Según analista, militarización es una falsa solución para la violencia
El gobierno de Honduras establece la militarización como una solución a la creciente ola de violencia en Honduras.
Sin embargo, Alba Deras, una pobladora de El Progreso, Yoro considera que el hecho que los militares estén en la calle, no es sinónimo de seguridad, al contrario, han atentado contra la ciudadanía.
El 23 de noviembre del 2011, el Congreso Nacional precedido en ese entonces por el actual presidente de la república, Juan Orlando Hernández, modificó la constitución de Honduras para permitir que los militares cumplan funciones de la Policía Nacional Preventiva.
Para el especialista en Derechos Humanos, Joaquín Mejía los militares en la calles no han dado los resultados esperados.
“Desde el gobierno de Maduro los militares están en la calle, para ese entonces la tasa de homicidio era de 42 a 46 muertes por cada 100 mil habitantes, 10 años después esta cifra se ha duplicado, a lo largo de la historia de nuestro país se ha demostrado que los militares en las calles no solucionan ningún problema”, señaló Mejía.
El proceso de militarización tomó mayor fuerza en septiembre del año pasado, cuando el Congreso Nacional aprobó en una sola noche, la ley de la policía militar de orden público, actualmente esta tropa élite consta de 3,000 efectivos con intenciones a que se eleve a 5,000, según el presidente para resguardar aún más el territorio hondureño.
Sin embargo los resultados dicen todo lo contrario, el Observatorio Nacional de la Violencia de la UNAH reporta que en los primeros cinco meses del presente año, en Honduras se han registrado 30 masacres, donde perdieron la vida más de 125 ciudadanos en su mayoría menores de 30 años.
De acuerdo a varias encuestas, la inseguridad es el aspecto que mayormente preocupa a los hondureños y la aflicción por este problema se refleja en el deseo de muchos ciudadanos en que los militares salgan a las calles a patrullar.
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