miércoles, 29 de enero de 2014

En el día de la mujer hondureña nada que celebrar mucho porque luchar



Nosotras, feministas del Centro de Estudios de la Mujer CEM-H y las redes Locales de Mujeres  en el marco del Día Nacional de la Mujer Hondureña,  alzamos nuestras voces para mostrar al mundo la situación de violación a los derechos humanos de las mujeres en el país,  y del porqué de nuestra lucha rebelde y transgresora.

Denunciamos:

Al gobierno continuador del Partido Nacional, que pretende en su desesperación  mantenerse para continuar realizando acciones que afectan los derechos humanos  de las mujeres, con estrategias que caminan hacia el desaparecimiento de los mecanismos institucionales de la mujer, que han sido producto de nuestra lucha constante como es la pretendida creación de Súper Ministerio, bajando el perfil del Instituto Nacional de la Mujer, INAM y la Secretaria de Derechos Humanos. Sumado las acciones de desmantelamiento de la Unidad de Investigación de Delitos contra la Vida de la Mujer al pasar la Unidad de Femicidios a la nueva Unidad de Investigación para atender la diversidad de delitos y crímenes, de esta forma será difícil que los crímenes contra mujeres sean categorizados como femicidios.
El incremento de la violencia contra las mujeres que  pasó de 473 casos en el 2011, 606 en 2012  a más de 630 en 2013. De los femicidios registrados en el 2013  únicamente ingresaron a los Tribunales de Justicia 96 casos, de estos sólo 26 obtuvieron resolución, significando que únicamente el 4% de los casos se resuelven. Las denuncias de violencia doméstica pasaron de 20,861 casos en el 2012 a 21,138 casos de enero a  noviembre 2013. Las denuncias llegadas a los tribunales sobre delitos sexuales contra las mujeres, de enero a noviembre 2013 fueron  295. Uno de los factores que tiene que ver con esta problemática es la falta de educación sexual, negándose hasta la fecha el gobierno de la República a implementar de manera generalizada las guías de educación sexual.
Las mujeres siguen sin tener acceso a la tierra, esto se demuestra en  el programa de titulación de tierras del gobierno,  en donde el Instituto Nacional Agrario del total de títulos otorgados, únicamente 27% fueron dirigidos a mujeres. Los programas de asistencia social como el bono diez mil implementados por el gobierno se han politizado al beneficiar sólo a las mujeres del partido político que tiene el poder del Estado, además como son transferencias condicionadas exigen a las mujeres que atienda las tareas impuestas por el gobierno como ser: garantizar que el niño o la niña asistan al centro escolar y llevarlos al centro de salud. En el caso de la merienda escolar, el trabajo recae sobre las madres de familia y le reduce su ingreso familiar al tener que gastar para complementar la merienda.  Estos programas no fomentan la corresponsabilidad paterna y deterioran la vida y la salud de las mujeres al centrar la atención en los hijos e hijas olvidándose de su bienestar.
Desde el Estado en complicidad con fundamentalistas religiosos,   se realizan  violaciones de los derechos humanos de las mujeres,  tal es el caso de la penalización de la Píldora de Anticoncepción de Emergencia PAE, negando a las mujeres el derecho a decidir sobre su cuerpo.
El deterioro del Estado al reducir los servicios públicos, privatizando la salud, la educación, el agua coloca a las mujeres en una situación precaria, pues al no asumir el Estado sus responsabilidades públicas constitucionales, son las mujeres las encargadas del cuidado de los enfermos, educar a los hijos y abastecer el agua en los hogares.
Se pretende reformar la Ley de Municipalidades y convertir a las Oficinas Municipales de la Mujer en oficinas de Género y Desarrollo, que tendrá múltiples funciones atendiendo diversas poblaciones, retrocediendo a nivel de política pública el avance de derechos de las mujeres ya que las OMM han sido las encargadas de implementar la Política Nacional de la Mujer en el ámbito local.
La mayoría de  alcaldes y gobiernos locales están haciendo caso omiso a las demandas y agendas locales de las mujeres, incumpliendo compromisos, pactos y acuerdos con las redes municipales de mujeres utilizando para otros fines el 5% de la transferencia municipal,  que según ley debe ser destinada a acciones de prevención y atención de la violencia contra las mujeres.
A pesar de existir una cuota legal obligatoria de 40% como mínimo de participación política de las mujeres en los cargos de elección popular, al final después de este último proceso electoral únicamente ocupan el Congreso Nacional el 25% de mujeres y en las Alcaldías sólo 20 mujeres las dirigirán representando el 6.1% del total.

Por lo tanto exigimos y demandamos:

Destinar  el presupuesto  del estado para la inversión social pública y focalizar recursos dirigidos para las mujeres, a la vez que exigimos la reducción  inmediata del gasto militar.
Castigo inmediato a los responsables  de los femicidios y otros casos de violencia contra las mujeres. Esto implica mejorar los sistemas de investigación en el país, fortaleciendo y creando más  unidades de investigación de delitos contra la vida de la mujer, creación de más juzgados especializados en violencia doméstica en el país.
El cumplimiento  por parte de los alcaldes y alcaldesas sobre los pactos firmados con las diferentes expresiones del movimiento de mujeres y el manejo  del 5% de la transferencia municipal de manera transparente y consensuada con las organizaciones y redes locales de mujeres.
Acciones inmediatas para que se revierta la penalización de la Píldora de Anticoncepción de Emergencia PAE.
La no fusión de aquellas instituciones que forman parte del mecanismo de protección de las mujeres en el país y que afecta las luchas históricas del movimiento feminista en Honduras.
Ratificación del Protocolo Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de todas las formas de Discriminación contra la Mujer CEDAW.
A la cooperación internacional, que nos acompañen y apoyen en nuestras luchas alzando la voz junto a nosotras.
Al movimiento popular hondureño, que apoyen nuestras demandas y exijan el respeto a los derechos humanos de las mujeres.

Nuestro Cuerpo, No es un Campo de Batalla, Paremos los Femicidios y la Militarización de Nuestros Cuerpos.

No Pedimos Nada, Exigimos lo que nos Corresponde.

Nuestras Demandas No Pueden Esperar, Exigimos su Cumplimiento Ya.

No hay comentarios: