Radio Progreso
La Iglesia Católica conmemora en este mes de agosto el “Mes del Matrimonio y la Familia”, un tiempo propicio para reflexionar sobre las familias que hay en la actualidad.
“Esperamos la comprensión, la familia ya no es la forma sencilla en que se ha buscado anteriormente, que sean casados por la Iglesia, no, hay que acompañar a la familia y comprender las diferentes situaciones que se dan, por eso tiene que darse una pastoral que comprenda las situaciones actuales de la familia”, señala Ramón Zavala, laico de la comunidad Inmaculada Concepción de María de la Parroquia Guadalupe en San Pedro Sula.
Zavala sostiene que la Iglesia debe integrar a los diferentes tipos de familia que hoy existen y abandonar el clericalismo que tanto daño provoca. “La Iglesia debe escuchar al Papa Francisco que hizo una encíclica preciosa sobre la familia, da unas directrices, pero que yo siento que no toda la Iglesia la ha escuchado, meditado y puesta en práctica”, manifestó Zavala.
Radio Progreso dialogó con Ramón Zavala (RZ) de la comunidad Inmaculada Concepción de María de la Parroquia Guadalupe en San Pedro Sula sobre la realidad que enfrenta la familia hondureña.
RP. ¿Qué mensaje esperan ustedes de la Iglesia Católica?
RZ. Esperamos la comprensión, la familia ya no es la forma sencilla en que se ha buscado anteriormente, que sean casados por la Iglesia, no, hay que acompañar a la familia y comprender las diferentes situaciones que se dan, por eso tiene que darse una pastoral que comprenda las situaciones actuales de la familia. La Iglesia debe escuchar al Papa Francisco que hizo una encíclica preciosa sobre la familia, da unas directrices pero que yo siento que, no toda la Iglesia la ha escuchado, meditado y puesta en práctica.
RP. ¿Qué es la familia para usted?
RZ. La familia es un término que ha variado mucho. Antes, la familia era el núcleo que correspondían a los padres, a los esposos, a los hijos y en algunos casos a los abuelos que vivían en un sólo hogar, pero ahora la familia ha variado mucho, lo fundamental en una familia son los lazos de amor, de compromisos mutuos por salir adelante tanto en lo económico, en el aspecto social y en lo emotivo.
RP. ¿Cómo está la familia hondureña?
RZ. Usando una frase de Galeano que dice que nosotros somos seres de carne y hueso con alegrías, con tristezas, con esperanzas, con triunfos y fracasos, pues la familia está formada por personas que somos así. El Papa Francisco lo define de una manera más bonita al decir que no existe familia perfecta. La misma sociedad nos define como familia porque no somos un ente aislado de la realidad social, somos parte de ella, se decía que si la familia va bien la sociedad va bien, pero también a la inversa: si la sociedad va mal, afecta a la familia. En Honduras hay una fuerte desintegración familiar.
RP. ¿Cómo se da eso?
RZ. El sistema económico decía que era muy importante la familia para sostener dicho sistema, ahora el Neoliberalismo ya no le importa la familia sino que le importa la persona como individuo y la manera en que pueden lucrarse de cada uno de nosotros y nosotras. Eso ha traído una terrible descomposición de la familia.
RP. La mayoría de las familias en Honduras son lideradas por las mujeres.
RZ. Esa es una gran verdad. Nosotros trabajamos con las Comunidades Eclesiales, y aquí en la zona tenemos a ambos sectores: la clase media y la clase pobre de los barrios. En la clase media vemos a muchas mujeres que luchan solas, no son acompañadas por el compañero de hogar, ni a la catequesis son acompañadas. En los barrios marginales se da el caso que el marido o no tiene trabajo o tiene problemas de vicio, y la mujer tiene que luchar por sus hijos.
RP. ¿Qué responsabilidad debe asumir el Gobierno?
RZ. El Gobierno debe asumir la responsabilidad de un trato igual tanto para hombres como las mujeres. Si no se les da oportunidades a las familias con educación, salud, un techo digno, entonces estamos destruyendo nuestro país porque aparte de los recursos naturales, aparte de la cuestión económica, la familia desempeña un papel vital como se dice dentro de la Iglesia, la familia es la célula principal.
RP. ¿Cómo ha sido el impacto de la pandemia en las familias?
RZ. Ha sido demoledor para las familias, ha habido hogares que tienen sus negocios y que hacen la lucha como salones de belleza, puestos de venta de comida, que han cerrado porque también han sido golpeados hasta con los impuestos. Muchos perdieron sus empleos como los que trabajaban en las maquilas, en los call center, algunos que lograron regresar lo hicieron, pero en otras condiciones, mucho más precarias. Eso trajo un gran desempleo, y eso se mira en cómo ha aumentado las familias que están pidiendo dinero en los semáforos de la ciudad. Además, aumentó la migración hacia el norte.
RP. ¿Qué mensaje esperan ustedes de la Iglesia Católico?
RZ. Esperamos la comprensión, la familia ya no es la forma sencilla en que se ha buscado anteriormente como que sean casados por la Iglesia, no, hay que acompañar a la familia y comprender las diferentes situaciones que se dan, por eso tiene que darse una pastoral que comprenda las situaciones actuales de la familia. La Iglesia debe escuchar al Papa Francisco que hizo una encíclica preciosa sobre la familia, da unas directrices pero que yo siento que no toda la Iglesia la ha escuchado, meditado y puesta en práctica.
RP. ¿Cómo se vive esta situación en su Parroquia?
RZ. En nuestra Parroquia (La Guadalupe) se dan situaciones con un clericalismo tremendo, significa que la opinión de los clérigos, personas que son funcionarios de la Iglesia, es la palabra de Dios y que no puede haber contradicción, pues ese clericalismo ha afectado mucho a la familia.
Por ejemplo, una madre que tiene un problema con su esposo no es casada y trata de llevar a su esposo a la Iglesia, cuando va a la Iglesia lo que recibe es un regaño al decirle que debe rezar, orar porque está viviendo en pecado cuando eso no es lo que quiere escuchar porque es una persona que ya lleva una carga en su alma y en su espíritu, entonces vamos a terminar de correrla de la Iglesia, y también pasa con los laicos que muchas veces somos peores que los sacerdotes para ser clericalista.
RP. ¿Cómo superar eso?
RZ. Mientras no aprendamos a escuchar y a acompañar a estas personas, a llevarlas y a darles esperanzas, no vamos a poder caminar, mientras sigamos corriendo a las familias que están en esas situaciones no va a poder haber una mirada cristiana. El Papa Francisco nos ha incitado a tener la escuchar y a saber dialogar con las diferentes formas de familia que hay.
RP. ¿Qué significa el Papa Francisco para usted?
RZ. El Papa Francisco significa una gran esperanza, ha tocado los grandes temas y nos ha dado una pauta de diálogo que debe ser una guía también para las familias, es un diálogo que nos cuesta. El Papa Francisco nos ha enseñado el diálogo, la escucha, el respeto al otro, a lo diferente, el respeto y amor a la naturaleza.
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