En una nueva demostración de fuerza, el movimiento popular se movilizó en Tegucigalpa, rechazando la reelección de Juan Orlando Hernández e inaugurando un nuevo camino de oposición al oficialismo. La acción fue planificada desde hace más de dos meses por la Convergencia contra el Continuismo y aglutinó a miles de personas de todo el territorio nacional.
“Fuera JOH, no a la reelección”, eran las consignas más comunes durante toda la protesta. Los manifestantes no solo eran integrantes del Partido Libertad y Refundación, LibRe, también asistieron personas que pertenecen a organizaciones territoriales, estudiantes, pueblos originarios, sociedad civil e indignada en rechazo a las políticas del gobierno actual.
La movilización inició en el Obelisco en Comayagüela y culminó con un plantón frente a las instalaciones del Tribunal Supremo Electoral, TSE. En el acto de cierre de la protesta dio su discurso la representación de la Convergencia, y líderes de la Alianza de Oposición, encabezadas por Salvador Nasralla y Manuel Zelaya.
“No aceptaremos los resultados del 26 si se dan vía fraude”, dijo Zelaya durante su discurso, por su parte Nasralla hizo un llamado a todo el movimiento popular a que salga a las calles a defender el voto y cuidar la democracia.
Mientras los políticos hablaban en el escenario, los manifestantes gritaban: “queremos la CICIH (Comisión Internacional contra la Corrupción e Impunidad)”, petición que fue retomada por el candidato presidencial Salvador Nasralla.
A pesar que la movilización se convirtió en una concentración política de la Alianza de Oposición, los integrantes de la Convergencia aprovecharon para dejar claro que no son un ente que pertenece a un partido político en particular, sino una estructura abierta que está a la expectativa de unir y articular fuerzas para defender los derechos de la población.
El pasado fin de semana, siempre en Tegucigalpa, el Partido Nacional realizó una movilización en apoyo al presidente y candidato presidencial, Juan Orlando Hernández, la cantidad de personas era similar a la que se concentró este día en la capital y lo que demuestra que, en este momento, la única razón que mueve a la gente son las elecciones.
“El reto que tenemos de ahora en adelante es articularnos, y pensar más allá del proceso electoral, no quedarnos ahí simplemente. Debemos aglutinar un plan de acción para frenar las iniciativas neoliberales contra el pueblo hondureño”, declaró ante el público el dirigente obrero Carlos H. Reyes.
A excepción de algunos representantes de la Convergencia, lo demás fue todo político y electoral. La actividad se convirtió en una plataforma idónea para que la Alianza enviara un mensaje al Partido Nacional, principal contrincante en las elecciones generales, que también tienen fuerza y que el triunfo se medirá en las urnas.
“Hacemos el llamado a la gente a defender cada voto, es la única forma de derrotar el fraude planificado por el Partido Nacional”, dijo Nasralla.
Desde la Convergencia han llamado a la población a estar atentos a lo que suceda el 26 de noviembre y también a tener la disposición de movilizarse si el plan continuista se concreta.
La movilización ciudadana de hoy es planteada desde los sectores populares como una nueva oportunidad para organizar al movimiento en la lucha permanente contra las privatizaciones, venta de territorio, minería y también las políticas neoliberales.
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